Encuentro

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Día de la decisión 

Desde el momento en que Demian estuvo aquí, no he podido dejar de pensar en todo lo que ha sucedido conmigo. Desde que tengo memoria soy un huérfano quien tuvo que pasar por mil y una penuria para poder llegar dónde me encuentro hoy día; ni siquiera recuerdo por cuántas casas y padres sustitutos pase, lo que sí recuerdo es que no fui para nada feliz hasta conocer a Patricia y Jake quienes me trataron de una manera diferente, me enseñaron a sentirme un poco más seguro de mi y se hicieron aquellos hermanos que siempre desee.

¿Cómo debería sentirme ahora que llega alguien idéntico a mi y me dice que es mi hermano? ¿Que llevó a qué mi vida fuera de esta manera? ¿Por qué aparecer ahora cuando todo está poniéndose en orden? Tengo un hermoso bebé, encontré buenos amigos, soy necesario para algunas personas y sobre todo, encontré a alguien que me ama tal cual soy, un hombre que aún después de haberle mentido por meses, pudo cambiar su forma de pensar y sin importarle nada solo me eligió y me brindado todo el amor y cariño que siempre quise. ¿Por qué? Ahora que por fin sentía que valió la pena todo mi dolor para llegar a Jonás. 

— soy alguien muy difícil — suspiro —pero de verdad te amo Jonás — cierro los ojos con cansancio. 

Desde la visita de Demian, no he podido dormir casi nada, Dylan también parece sentir la tensión en el ambiente. Desde que todo paso ha estado extremadamente sensible y no quiere despegarse de mí ni por un segundo. 

Suelto un suspiro antes de ponerme de pie, regalo mi cabello algo largo. Ya debería cortarlo, miro a mi bebé aún dormido y me dispongo a asearme para poder salir y resolver todas mis dudas y poder tranquilizar a los Everett.

— Daniel— la voz de Jonas se escucha tras la puerta en el momento que salgo del baño. 

— puedes entrar— respondo sin dejar de buscar en el armario algo de ropa.

—!Dios¡ Estás desnudo— giro al escuchar su exclamación, encontrando que se encuentra dándome la espalda. 

— No tengo nada que tú no tengas, además eres mi pareja— hablo tranquilamente. 

— yo…yo… vine a ver si estabas bien— dice sin verme.

— Estoy bien, de hecho, creo que hoy resolveré todo esto— su cuerpo gira rápidamente al escucharme.

— Daniel….—

— Te amo, no tienes nada de qué preocuparte— sonrió.

— Daniel — susurra.

Me acerco al rubio enorme y lo obligó a inclinarse un poco hacia mi para poder dejar un beso en sus besos algo resecos por el frío. Sonrió al separar nuestro labios, perdiéndome por un momento en sus hermosos ojos verdes como la aceituna. 

— ¿Quieres venir conmigo? Pienso resolver esta situación hoy mismo— sonrió para darle confianza.

— Este asunto es delicado y familia…—

— Eres mi familia Jonás — interrumpo sus palabras — ven conmigo — pido. 

Doy una mirada a mi pequeño hijo en las manos de Helena quien ha venido a pedido mío, para ayudarme con Dylan durante el tiempo que tarde en ir al pueblo y hablar con Demian para poder decidir que haré. Subo al auto después de mirar a Jonás quien se encuentra de pie del lado del conductor.

— Estaré contigo en todo momento— dice viéndome. 

— Lo sé — respondo sin verlo. 

Me distraigo pensando en todo lo que estado sucediendo, de tal manera que no me doy cuenta en que momento, Jonás ha conducido todo el camino hasta ael pueblo y ahora nos encontramos frente a una gran casa de color blanco muy bonita y elegante, con un gran letrero que dice HOTEL FOSTER. Aún cuando el auto se detiene, Jonás sólo se mantiene en silencio observando hacia el frente. Sé que está tratando de darme algo de tiempo y agradezco que sea tan comprensivo.

— Creo que llegó el momento— susurro al sentir su mano tomar la mía. 

— Si es difícil, solo tienes que decirlo, te sacaré de allí inmediatamente — habla antes de besar sobre mis nudillos. 

— gracias — sonrió.

Bajo del auto seguido de mi novio quien rápidamente se acerca a mi oar caminar hacia la entrada del hotel, dónde ya se encuentra un mujer de mediana edad, cabello rubio, ojos cafés y una hermosa sonrisa esperando por nosotros. 

— Bienvenidos, adelante— dice con un tono suave y atrayente. 

— Gracias Mirian — Jonás saluda a la mujer. 

— no tengo que preguntar por qué vienen, me asombré mucho al verlo también— dice guiándonos hasta la escalera que da al segundo piso.

— El señor ordenó que cuando vinieran pasarán de inmediato— comunica la mujer mayor. 

— Gracias — sobrio antes de subir las escaleras

Jonás camina a mi lado hasta llegar a una habitación con el número 2 en ella, suelto un suspiro y levanto mi mano para llamar a la puerta, pero no logro hacerlo, todo mi cuerpo tiembla. Vine aquí dispuesto a poner todo en orden, pero ahora siento que todo esto me supera.  Cierro los ojos aún con mi mano elevada, hasta que siento mi mano ser tomada y guiada por la más grande me ayuda llamar a la puerta. Abro los ojos viendo a Jonás sostener mi manos y decir en silencio “Estoy contigo”  asiento y espero que la puerta sea abierta, cosas que no demorara de cinco segundos. 

— Daniel, viniste— Demian sonríe al verme — señor Everett — saluda a Jonás.

— solo Jonás — dice el rubio.

— Adelante, pónganse cómodos— nos brinda espacio para poder entrar.

— Quisiera hablar de esto lo más pronto posible— digo viendo a mi hermano.

— antes debo decirte algo… cuando supo lo que vine a hacer aquí en América, no pude detenerl….—

— Da..niel — la voz entrecortada de una mujer se escucha dejándome congelado. 




Hola a todos, espero estén súper bien. Bueno les he traído este nuevo capitulo, lamento sj es algo corto, pero lo he escrito en mi teléfono y no estoy acostumbrado así que me fue algo difícil. Espero que les guste y lo disfruten. 

My Little HopeDär berättelser lever. Upptäck nu