Luffy x lectora | ❝¿Acaso existe algo más valioso que tus sueños?❞
Nuestra palabra y nuestros actos nos acaban definiendo como personas. La voz es lo único que nadie puede quitarnos, pero la perdemos poco a poco cuando hacemos promesas que sabemos q...
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—¡Es Camie, la sirena! ¡Es una sirena de verdad, ¿no es asombroso?!
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—Recuerda ________, no debe hacer mucha fuerza —aviso Chopper y Zoro chasqueo la lengua.
—Sí, gracias —asintió y se fue con su botiquín.
Me crucé de brazos y observé a Zoro como volvía a ponerse su camisa.
Habíamos llegado al Red Line.
Sin embargo, en el transcurso pasamos por una especie de "corrientes de serpiente" que nos había dificultado nuestro recorrido y ahí, vi como a Zoro empezó a toser algo de sangre.
El idiota no se había recuperado del todo de Thriller Bark.
—No me mires así, estoy bien —formuló levantándose y me apareció una vena en la frente.
—¡¿Cómo que estás bien?! —gruñí y jale su mejilla con reproche mientras este se quejaba —¡¿Por qué no me dijiste nada?!
—¡No era necesario!
—¡Pero mírate como estás! —lo solté y me crucé de brazos —... listo, ya lo decidí.
—¿Qué cosa? —poso su mano encima de sus espadas como de costumbre.
—No beberás hasta que te recuperes.
—¡¿Eh?! —se alarmó y desvié la mirada —¡Estás loca!
—¡Cállate! ¡No debiste ocultarme esto!
—¡No puedes dejarme sin sake!
—¡¿Quieres verme?! —chocamos frentes y desviamos la mirada cuando se escuchó una risa.
—¡Sí que son divertidos! —Luffy rio tirándose al suelo y nos separamos.
—Nos olvidamos de ti —mencionamos al mismo tiempo y Luffy dejo de reír.
—¡¿Cómo qué se olvidaron que estaba aquí?! —se levantó y nos señaló —¡Son malos!
—...
—...
—...
Nos soltamos a reír, pero nos callamos cuando Nami llamó a Luffy.
—¡Ya voy! —respondió, me quité su sombrero cuando se acercó y se lo acomode en la cabeza viendo su sonrisa —¿Segura que no quieres ir?
—Tengo que vigilar a este —señale a Zoro.
—¡Ey! —se quejó y lo miré.
—¡¿Qué haces?! —me acerque para quitarle la pesa que ya había agarrado.
