𝖁𝖊𝖎𝖓𝖙𝖎𝖉𝖔́𝖘

1.3K 103 16
                                    

Jungkook;

Bajé de mi auto y luego me adentré a aquella cafetería. Uno de los meseros me hizo una reverencia y me guío a una mesa. En el lugar habían algunas personas platicando y probando las delicias de esta cafetería. Me senté en una de las sillas y pedí dos americanos calientes para el frío.

— ¿Desea algo más señor Jeon? — Negué en su dirección y el se retiró haciendo una reverencia.

Tome un sorbo del americano y disfrute de su sabor. Minutos después fueron los que pasaron cuando vi al señor Lee caminar en mi dirección. Me levanté de inmediato y ambos hicimos una reverencia.

— Le pedí un americano caliente — Ambos nos sentamos — Espero que le guste señor Lee.

— Si, es perfecto para este frío — Sonrió tomando un sorbo — Dígame jovencito, ¿Para que me citó aquí?. Usted me ha llamado con urgencia.

— Iré directo al grano — El presto atención — Me enteré que usted tiene dos hijas.

Ante mis palabras el se mostró sorprendido y luego lo vi tragar fuertemente. Su semblante se volvió neutro y luego asintió.

— Así es — Murmuró — Pero no debería meterse en vida personal.

— Lo sé — Me limité a decir — ¿Quiere encontrarlas? — El me miró en shock.

— ¿Cómo sabe que las estoy buscando? — Preguntó sorprendido

— Se que usted las abandonó — Vi como su cuerpo se tensó — ¿Se arrepiente de haberlo hecho?.

— Si — Murmuró bajando la mirada — Cuando mi esposa murió... yo quedé destrozado, empecé a beber y descuide a mis hijas. Sentí que no podía hacerme cargo de ellas, no podía alimentarlas porque me gastaba la plata en el alcohol — Tragué fuerte al escucharlo — No quería que ellas pasaran más hambre y las dejé con una vecina. — Hizo una pausa — Nunca me imaginé que una de mis hijas se iba a colar en mi auto, aquella noche ambos tuvimos un accidente por un descuido mío.

— ¿Un descuido suyo? — El asintió.

— Tenía una botella de alcohol en el carro, esa noche estaba llorando y me sentía como el peor hombre por estar abandonando a mis hijas. — Hizo una pausa para suspirar pesado — Desvíe la mirada del camino y luego escuché el gritó de mi hija mayor. Cuando iba a reaccionar ya era muy tarde, me había pasado un semáforo y un coche nos arrolló. — Me miró con culpa en los ojos — Y-yo no sabía que ella estaba en el auto y me sentí tan culpable que simplemente huí después de despertar en el hospital.

Y realmente el señor Lee se escuchaba arrepentido. Yoona quería volver a verlo y yo cumpliría ese sueño.

— ¿Le gustaría volver a verlas? — Repetí

— Si, por eso las estoy buscando — Me dijo — Todos estos años quise ser alguien, quise salir adelante y ganar dinero para ellas. Para recuperarlas y darles una buena vida, una vida que de niñas no tuvieron.

— Se en donde está Yoona y Yuna — El hombre abrió sus ojos en sorpresa

— U-usted las conoce — Aquello no era una pregunta — ¿Ellas están bien?.

— Si — Asentí con una sonrisa — Yuna ya es una adolescente, sufrió cuando tenía quince años.

— ¿Por qué?.

— Será mejor que ella se lo diga — Presioné los labios

— Y-yo tengo miedo a que ellas no me quieran ver, no sé cuál serán sus reacciones o si se alegrarán de verme. Han pasado años.

𝐔𝐧𝐚 𝐮́𝐥𝐭𝐢𝐦𝐚 𝐨𝐩𝐨𝐫𝐭𝐮𝐧𝐢𝐝𝐚𝐝 #𝟐 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora