𝐔𝐧𝐚 𝐮́𝐥𝐭𝐢𝐦𝐚 𝐨𝐩𝐨𝐫𝐭𝐮𝐧𝐢𝐝𝐚𝐝 #𝟐 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤

𝕮𝖆𝖙𝖔𝖗𝖈𝖊

Maratón
2/3.  

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Todas las miradas en aquel salón estaban puestas en aquella hermosa joven de vestido rojo pasión. Su belleza y sus hermosos ojos no pasaban desapercibidos por nadie y mucho menos para aquel pelinegro quien estaba con la boca abierta, aquel pelinegro que estaba completamente en shock al ver a el amor de su vida mucho más hermosa que antes.

Estaba sorprendido al notar su cabello color negro, al verla maquillada perfectamente bien y al ver aquel vestido que se le ajustaba a su perfecto cuerpo. Uno de sus hombros y clavículas estaba expuesto llamando la atención de todos los hombres en aquel salón, sin pasar desapercibido sus perfectas curvas y aquella pierna blanquecina que salía de su vestido.

— Santa madre, ¿Quién es ese mujerón? — Comentó Jenny.

Jungkook tragó en seco quedando sin palabras, aquella admiración paso a segundo plano cuando sus celos lo invadieron al ver al acompañante de la ahora pelinegra. Su mandíbula se marco haciéndolo ver más varonil y sus manos se volvieron puños sin poder evitarlo. Jugó con su lengua por el interior de su mejilla y cuando estaba dispuesto a ir por ella su madre lo detuvo del brazo.

— No vayas a armar escándalos — Murmuró mirando a la chica.

Aquella hermosa chica aún no se había dado cuenta de la presencia del pelinegro.

A lo lejos una furiosa pelinegra miraba a Yoona con enojo. Sus ojos fríos y semblante serio estaban fijos en aquella hermosa chica de vestido rojo pasión.

— Maldita perra — Gruñó entre dientes apretando los puños al ver que Yoona se robó la atención de todos.

La atención ya no estaba puesta en Iu y aquello la molesto mucho más.

La hermosa chica de vestido rojo camino junto a su acompañante siendo guiada por este. Llegaron frente a una pareja mayor y allí Yoona supo que eran los padres biológicos de Soo-hyun.

— Un gusto conocerlos señores Kim — Hizo una reverencia — Soy Lee Yoona.

— El gusto es nuestro, querida. — Dijo la señora Kim amable

— Tu acompañante robo la mirada de todos — Comentó el señor Kim a su hijo — ¿Es solo tú acompañante o tu novia? — Yoona casi se atraganta con su saliva al escucharlo.

— Papá — Murmuró el chico avergonzado — Yoona sólo es mi... amiga — Susurró desanimado.

— Apuesto a que todos aquí piensan que son una hermosa pareja — Comentó la señora Kim haciendo que la chica se remueva incómoda — No creo que una mentira de una sola noche afecte.

— ¿A qué se refiere? — Murmuró la chica confundida

— A que digan que son pareja solo si preguntan — Y con aquellas palabras se fue junto a su esposo.

Yoona miró a Soo y el también. La miró avergonzado y ella enarcó una ceja en su dirección.

— Lo siento, mamá dice que si estás personas me ven con una pareja estable es más fácil que me acepten en la alta sociedad. — Murmuró rascando su nuca.