[Terminada ]Deseos Ocultos [Historia Lésbica ]

Parte 26 (Segunda parte)

Hola! les dejo cap :3 espero les guste, lo adelanto porque tengo un rato libre en el trabajo. Creo que los días de actualización serán Martes o miércoles, sabado y domingo. tengo menos carga laboral esos días. Saludos! 

Capítulo 26

Cuando Génesis tomó asiento, lo hizo con una elegancia deliberada, permitiendo que un ligero rubor adornara sus mejillas. Aunque sus ojos revelaban una astucia juguetona, se comportaba como si no tuviera idea de la atracción tanto física como emocional que empezaba a sentir en su interior. Esa mezcla de aparente inocencia y confianza era algo que Mike encontraba irresistible. Ella sabía exactamente lo que estaba haciendo, y él no podía apartar su mirada de sus bellas piernas.

Se giró hacia Mike y lo miró a los ojos con expectación. Lo cierto era que lo echaba de menos, quería verle sonreír con esa expresión cautelosa, como si temiera estar diciendo algo tonto para espantarla.

Samantha lo miraba todo desde la cocina y sintió un malestar que se le presentó como dolor de estómago. Era difícil para ella, y hasta para su hermana, mirar a su madre dejarse seducir por otro hombre que no fuera Richard. Era como si el mundo de las dos se estuviera resquebrajando, negándoles la oportunidad de arreglarlo, y aunque tuvieran el poder entre sus manos para hacerlo, el problema entre sus padres no era asunto suyo y no lo podían controlar.

Resopló con la frustración asomándose en su rostro y se marchó de vuelta a la habitación de Denise. Encontró a su hermanita acostada, muy ocupada tomándose selfies con poses sugerentes y casi enseñando el pecho.

—¿Qué haces?

—Me voy a hace un only —bromeó y soltó una sonrisa al ver la cara de su hermana menor—. Era un chiste. Estoy tomándome fotos para mostrárselas a Alexia cuando regrese.

—La extrañas mucho ¿verdad? —Preguntó Sam, y al hacerlo, provocó que los ojitos de Denise se enrojecieran.

—Es que a pesar de lo tonta que fue al provocar ese roce entre nosotras, la verdad ella sólo quería vivir su fantasía.

—No era muy saludable lo que ella quería.

—Estamos en un mundo tan jodido y perverso. ¿Por qué no es sano estar enamorada de una persona, aunque sea un familiar?

Samantha se halló sin palabras ante tal dilema. Si se viera forzada a escoger entre el amor que sentía dos mujeres, siendo hermanas, y las sombras crecientes de avaricia y malicia que oscurecían el mundo, sin titubear, se decantaría por el amor. Su mente comenzó a nadar en un mar de pensamientos profundos, pero optó por alejarse de esas reflexiones filosóficas, consciente de que sumergirse en ellas no la llevaría a ninguna parte concreta.

—Mamá está muy encariñada con ese tipo —dijo Sam, en un intento por cambiar el tema.

—Mike —dijo Denise—. ¿No te agrada?

—No. Se ve que sólo la quiere para un rato. Mamá salió vestida como adolecente calenturienta.

Denise rio.

—Papá se lo merece.

Sam cruzó brazos después de sentarse en la silla junto al escritorio.

—¿Por qué lo dices? ¿Sabes algo?

Denise soltó el aire que estaba sosteniendo y se sentó en el borde del colchón. Llamó a su hermana para que se pusiera junto a ella y luego, ambas se miraron con seriedad. La tensión en el cuarto subió un par de grados.

—Te voy a decir lo que pasó —reveló Denise—, y sólo porque si mamá te lo cuenta, se va a poner a llorar y no quiero que se ponga mal.

—¿Qué pasó? —Preguntó Samantha, más intrigada que antes.