EL REGRESO DE UN FARMACÉUTICO LEGENDARIO

CAPÍTULOS DEL 140 AL 145

Pei Xuanqing pensó cuidadosamente y entonces dijo: "Los cultivadores a veces tienen algunas premoniciones sobre su propia seguridad. Ten cuidado cuando compitas con otros mañana."

Lin Yi dijo: "De ninguna manera. ¿Estaré en peligro?"

Pei Xuanqing tocó la horquilla de su cabeza y dijo: "La horquilla puede bloquear ataques de cultivadores por debajo del reino General Espiritual. Tienes que ponértela."

Lin Yi asintió y dijo: "Lo haré."

Después de que Pei Xuanqing dijera eso, no pudo evitar sentirse un poco inquieto. Incluso si salía mañana al escenario de las competiciones, sólo lucharía contra algunos del Reino Cultivador Espiritual. Los cultivadores en sí no eran muy peligrosos, después de todo, su cultivo no era muy alto. Sin embargo, era inevitable que hubiera cultivadores como Lin Ying que tuvieran el segundo o tercer nivel o incluso bestias demoníacas contratadas de nivel superior...

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A la mañana siguiente, la competición estaba a punto de empezar, y todos fueron al lugar de competición fuera de Ciudad Fenglai.

Todo el lugar de la competición era espacioso. Era una gran cuenca, y el suelo había sido regulado por una poderosa fuerza, muy plano, y reforzado con una gran formación, que podía soportar el daño de sus artes. Rodeado de pilares circulares de todos los tamaños, las cabezas de estos pilares habían sido cortadas por la mitad, con filas de asientos encima de ellos. En cada pilar se sentaban los representantes de una fuerza, y cuanta más gente tenía una fuerza, más grande era su pilar, desde donde podían dominar todo el lugar.

Fue sólo después de llegar al lugar cuando Lin Yi se enteró de las reglas específicas de la competición.

El Torneo de las Diez Ciudades se dividía en dos fases: la primera era una competición individual, y la segunda una competición por equipos.

La competición individual ponía a prueba las habilidades individuales, mientras que las competiciones por equipos ponían a prueba su fuerza global.

Tanto las competiciones individuales como por equipos se dividían en tres niveles de competición: el reino del Cultivador Espiritual, el reino del Maestro Espiritual y el reino del General Espiritual.

Lin Yi y Pei Xuanqing sólo podían participar en la competición del Reino Cultivador Espiritual. La diferencia era que Lin Yi sólo estaba en el segundo nivel del Reino Cultivador Espiritual, mientras que Pei Xuanqing el noveno nivel. Entonces sería injusto para Lin Yi participar en la competición del Reino Cultivador Espiritual. Sin embargo, no había elección. Su bajo cultivo en el Reino del Cultivador Espiritual era un hecho, y la competición no podía subdividirse en todos los niveles por su culpa, por lo que no tenía sentido.

Antes de que empezara la competición, el Jefe Pei les dejó y se fue a la posición de arriba. Lin Yi y Pei Xuanqing siguieron al padre y a la madre de Pei Xuanqing al campo. Al entrar, el Jefe Le y su esposa trajeron por casualidad a su gente y, al encontrarse ambas partes, sus ojos brillaron.

"Estaba pensando cuándo llegaríais, y aquí estáis". Dijo alegremente la señora Le.

La Sra. Le incluso cogió la mano de Lin Yi, preguntándole cómo había estado en los últimos días y le pidió que se quedara con ellos en Ciudad Leyang después de que esto terminara.

Lin Yi se sintió un poco avergonzado. La señora Le, al igual que la señora Pei, aunque era madre y tenía un hijo tan grande, se mantenía muy bien. Debido a su alta cultura, parecía bastante joven y hermosa. Cuando la Sra. Le le cogió de la mano, le sudaban las palmas de las manos.