EL REGRESO DE UN FARMACÉUTICO LEGENDARIO

CAPÍTULOS DEL 1 AL 6

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CAPÍTULO 1. TRANSMIGRADO
A OTRO MUNDO
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"Yi'er, esta es la farmacopea transmitida por nuestros antepasados, y también el tesoro más preciado de nuestra familia Lin. Ahora te la daré a ti. Debes protegerla bien."

Su padre se sentó junto a la cama y le entregó la gruesa farmacopea.

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"Lin Yi, tu padre ha muerto y la empresa ha cerrado. Nadie puede permitirse tu costosa medicina diaria. Será mejor que te den el alta del hospital y vayas a casa a descansar."

"Lin Yi, ¿te dejó tu padre la farmacopea? Repártela. ¡Eso no es algo que puedes tener!"

"¡Si no la entregas, no podrás vivir más aquí!"

"No eres más que un perdedor. Es un desperdicio dejarte una casa tan grande. No mereces vivir aquí. ¡Fuera!"

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Luchó desesperadamente y discutió con aquella gente. Quería que esas cosas sucias se fueran de su casa. A nadie se le permitía tocar las cosas dejadas por su padre, pero su cuerpo discapacitado no podía moverse en absoluto. Sólo podía ver cómo entraban en su casa, saqueaban las cajas y los baúles y se llevaban todas las cosas de valor.

Los que solían ser amables y cariñosos ante él y su padre eran ahora tan feroces como fantasmas.

Odiaba a esa gente, y nunca permitiría que se llevaran las cosas más importantes que le había dejado su padre. Se las llevaría aunque muriera.

Engañó a esa gente para que entrara en el estudio de su padre, pulsó el engranaje que había junto a la cama para encerrarlos, luego salió de la cama hacia la cocina poco a poco, encendió el gas, quemó a toda la familia Lin y esas cosas sucias, y pereció junto a ellos.

La violenta explosión fue como los fuegos artificiales de alguna fiesta. Finalmente, todo había terminado.

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Su cuerpo estaba a veces frío y a veces caliente. A veces estaba como en un mundo de hielo y nieve, y a veces como quemado por el fuego. Sus miembros estaban tan doloridos y pesados que no podía levantarlos con todas sus fuerzas.

¿Pero no había estado muerto? ¿Qué pasaba ahora?

"¡Tírale la medicina! ¿Tirarte al lago? ¿Quieres morir? ¡No es tan fácil!"

Una aguda voz femenina sonó de repente.

Le pellizcaron la barbilla con tanta fuerza que sudó. Su boca no podía abrirse automáticamente, y la medicina que era tan amarga que le hizo enfermar fue vertida bruscamente.

Se atragantó y tosió histéricamente. La cabeza parecía a punto de estallarle y ni siquiera podía abrir los ojos, sólo oía los gritos de una mujer.

"Inténtalo de nuevo. Métele la medicina o los hundiré en el estanque, perdedores."

"¡Más fuerte! ¡Más fuerte!"

La apestosa y amarga decocción estaba metida en su boca, y su cuerpo estaba cubierto de una gruesa colcha, que hacía que Lin Yi se sintiera como si estuviera en un vapor, e incluso la respiración que exhalaba era como si quemara.

Quería averiguar qué estaba pasando, pero la somnolencia creciente le arrastró a un oscuro sueño.

Era un sueño extraño, pero a partir de él, conoció su situación actual.