Capítulo cuarenta y ocho "Motel embrujado"

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Anocheció por lo que no nos quedó de otra que parar en algún lugar a dormir, la cosa es que no encontramos otro lugar que no fuera un viejo motel sacado de película de terror, el motel "Glen Capri", al verlo un escalofrío recorrió mi espalda, algo no se sentía bien allí.

—¿Estás bien? —preguntó Scott cuando bajamos.

—si—sonreí apenas.

—tranquila, he visto peores —miró el viejo edificio frente a nosotros.

—¿En dónde lo has visto? —se metió mi hermano

—el entrador hizo sonar su silbato —escuchen, la junta ha sido pospuesta para mañana, este es el motel más cercano con habitaciones disponibles y la falta de juicio para...aceptar a degenerados como ustedes, se pondrán en parejas, escojan bien —nos tendió las llaves —como somos impares habrán tres personas que compartirán cuarto.

—no se preocupe, iré con mi hermano y Scott —dije tomando una llave.

—¡y no habrán perversiones sexuales cometidas por ustedes pervertidos! ¿Entendido? Guarden sus sucias manos para ustedes mismos.

Fuimos a la habitación —chicos, no me gusta este lugar.

—solo a un loco le puede llegar a gustar este lugar —comentó Stiles abrazándome por los hombros —descuida hermanita, solo será una noche ¿Sí?

—lo sé, pero una noche es lo suficientemente larga como para que pasen muchas cosas.

Entramos y nos tiramos en nuestras respectivas camas, yo por obvias razones compartiría cama con Stiles.

—bien, tengo cuatro —habló mi mellizo.

—¿Cuatro qué? —lo miramos.

—¿Sospechosos? —inquirió Scott

—si, eran diez...bueno nueve, técnicamente estaba Derek dos veces —golpeé su brazo —¡au!

—¿Y quién es primero? ¿Harris? —sugirió el castaño.

—Harris está desaparecido pero no muerto. —apuntó el chico junto a mí.

—sino está muerto, la profesora de química es la que realiza los sacrificios humanos. —supusó nuestro amigo.

—si, creo que sonó mejor en mi cabeza.

—puede ser la de historia también —señalé. —Jennifer...hay algo en ella que no me cierra ¿Saben?

—no había pensado en ella, la verdad.

—puede ser alguien más de la escuela ¿Recuerdan a Matt? No sabíamos que mataba gente  —opinó Scott.

—¿Disculpa? —Stiles se levantó —discúlpame, si sabíamos, lo dije desde el primer día ¿Recuerdas?

—si, pero nunca pensamos que realmente sería Matt —puntualicé.

—yo si estaba muy muy seguro, enserio, muy seguro y nadie me escuchó.

—¿Quiénes son los otros tres? —preguntó Scott.

—la hermana de Derek, Cora, nadie sabe nada de ella y es su hermana, el otro, tu jefe.

Ahora fue Scott quién se levantó —¿mi jefe?

—si, tu jefe, no me gusta esa cosa que trae de Obi–Wan, me asusta —el castaño pareció no entender.

—¿No has visto la guerra de las galaxias? —sonreí divertida.

—lo prometo, si regresamos vivos, veré la película.

—me vuelve loco —murmuró mi hermano.

—a mi también —cerré mis ojos con fuerza al darme cuenta que lo dije sin pensar —la película, la película me vuelve loca —mentí.

AMHESWhere stories live. Discover now