XXV : Final

357 38 0
                                    

—¿Se escapó? ¿De nuevo?

Preguntó Min Hao con su mano restregando su frente. Nuevamente el sobrino de Jiang Cheng había escapado, ese niño se dedicaba a desaparecer cada vez que podía.

—Ese mocoso.

Dijo con ira el menor.

Rápidamente ambos hombres salieron en busca del pequeño pero nada obediente Jin Ling. La noche se acercaba y esto preocupaba mucho a los dos sujetos.
Rápidamente la noche los alcanzó y la lluvia se hizo presente. El más alto no permitió que su amado se mojara y rápidamente consiguió un paraguas para el menor. Mientras buscaban al Jin decidieron separarse, quizás así serían más rápidos.
En un momento perdió a Jiang Cheng y no supo qué hacer, ahora tenía dos preocupaciones. Más tarde Hada apareció, el perro ladró con fuerza en señal de que la siguiera, Li sin dudarlo la siguió. Luego de aproximadamente media hora corriendo llegó a un extraño templo. Su mano estaba sobre la empuñadura de su espada, listo para atacar.
Al ingresar lo primero que sus ojos vieron fue a Jin Ling y a Jiang Cheng, herido.

—Alto ahí, joven maestro Li.

Lo amenazó Jin Guangyao apuntando al cuello de Jiang Cheng con su espada.
No tuvo más opción que sellar también sus poderes espirituales y sentarse junto al menor, tratando de cuidarlo lo más que podía. Parecía que había peleado con Wei Wuxian, quien se encontraba sentado básicamente sobre Lan Wangji.

—A-Ling, ¿Tú te encuentras bien? ¿No te lastimaste?

Preguntó preocupado mirando al adolescente.

—Estoy bien.

Respondió con simpleza, pero eso bastó.

La fría mirada de Jiang Wanyin lo delataba, había peleado nuevamente con Wei Ying. Se preguntaba cuántas cosas le habría dicho el menor al de negro, cuántas lágrimas habría derramado en esa conversación.

—A-Cheng…

Nombró con suavidad.

—No ahora.

Respondió el menor. No quería pelear también con el de ropas azules.
Continuaron observando, Jin Guangyao manipuló la situación pero, al final, las cosas no salieron como él esperaba. Llevando a la muerte del mismo. Todo planeado por el mismísimo Nie Huaisang, pero, como siempre, él no sabía nada.
La verdad sobre todo finalmente había salido a la luz. Wei Ying había sido víctima de un elaborado plan de Jin Guangyao, quien había aprovechado que el Wei eligió el camino del cultivo demoníaco.
Apenas recuperó su energía espiritual, el mayor ayudó al más bajo.

—¡Hada!

Gritó alegremente Jin Ling al ver a su mascota canina. Pero al recordar el miedo que causaba está en Wei Wuxian decidió sacarla fuera del lugar.

—Gracias. ¿Me puedo quedar con esto?

Dijo Wei Ying a Jiang Cheng, refiriéndose a Chenqing, su flauta.

—Fue tuyo en primer lugar.

Le respondió. Sus labios se movieron queriendo decir algo, pero al notar que su hermano desapareció junto a su ahora pareja de cultivo, dejó las palabras dentro suyo.

—¿Deberíamos volver a casa?

Preguntó el mayor, observando la mirada pérdida de su amado.

—Si, esperemos a que A-Ling venga.

El joven salió casi corriendo, su rostro estaba lleno de lágrimas, había estado llorando.

—Límpiate la cara.

Comentó con su tono de siempre.

—¿Dónde están?

Preguntó refiriéndose a Wei Wuxian y Hanguang-Jun.

—Se han ido.

—¿Los dejaste ir así como así?

—¿O si no? ¿Que se queden a cenar? ¿Decir gracias y perdón después de la comida?

—No hubiera sido una mala idea.

Susurró el mayor, con intención de no ser escuchado.

—No es de extrañar que se quisieran ir. ¡Todo se debe a esa actitud tuya! ¡¿Por qué eres tan molesto, tío?!

—¿Es así como hablas con alguien mayor que tú? ¿Estás pidiendo ser golpeado?

Regañó el de prendas violetas.

—Simplemente cada uno volverá a su secta, A-Ling. No podemos pretender que ahora estemos junto a ellos.

Explicó Li. El menor de los tres asintió y comenzaron a caminar.

—Tío, tenías algo que decir, ¿No?

—¿Qué? No.

—¡Justo ahora! Yo lo vi. Querías decirle algo a Wei WuXian, y luego no lo hiciste.

—No hay nada que decir.

Esa era una gran mentira, pero si no lo había dicho durante tanto tiempo, ¿Decirlo ahora cambiaría algo?
Una mano se posó en su hombro y una cálida sonrisa le fue dedicada por ese hermoso hombre que lo acompañaba. Puede Wei Wuxian había roto su promesa, pero ahora tenía a Li Min Hao y sabía que él no lo dejaría, no rompería su promesa.
Quizás el destino así lo quiso, probablemente su camino y el de Wei Ying no estaban conectados. Pero estaba feliz de contar con un compañero de cultivo como Min Hao.
Sonrió, fue difícil, pero aún tenía una familia a pesar de todo lo que le fue arrebatado a lo largo de su vida.

































































Hemos llegado al final de esta historia. Fue la única historia que pude escribir en mucho tiempo, varias veces pensé en si subirla o solo guardarmela para mí. Siento que quizás muchos no estarán conformes con el Male Oc y sus acciones, pero en mí cabeza está la razón de cada una de sus desiciones, pero es difícil escribirlas, siento que el lector debe darse cuenta por si solo.

Pero…este no es el fin.

Se vienen especiales. Se habrán dado cuenta que los capítulos que hablan sobre el pasado aún tienen bastante por contar.

Aún no se bien cuando, pero estaré subiendo los capítulos extras de esta historia.

Sin más que decir, gracias por leer toda esta historia y apoyar la misma.

¡Hasta la próxima actualización!

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Aug 27, 2023 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Atado a tu amor | Jiang Cheng x Male OcWhere stories live. Discover now