𝐘𝐎𝐔𝐍𝐆 𝐑𝐎𝐘𝐀𝐋𝐒

X

Mikey miro el cielo, los colores naranjas, amarillos y rosas se comenzaban a ver gracias a que se estaba haciendo de día; ¿Qué debía hacer?, él no quería ayudar a su madre a escapar de la Isla, si fuera por él, dejaría que su madre muriera ahí; suspiro cansado, recostandose en la ventana para poder observar mejor el amanecer.
Una mano se posó en su hombro, curioso giro un poco para encontrarse con la mirada tranquila de Kokonoi.

—Buenos días... ¿Qué piensas?

—Buenos días, solo quería pensar en otro plan, uno en el que podamos ser felices sin temer a nuestros padres

—Suena bien... Sabes que no podemos quedarnos aquí, ¿cierto Mikey?

—¿Y por qué no?, todos soñamos algún día con esto, podríamos ser libres al fin

Kokonoi suspiro, tomando asiento al lado del azabache, admirando el amanecer, sus manos tomaron con firmeza los hombros de su amigo.

—No podemos arriesgarnos a que tú mamá nos asesine

—Tienes razón - Mikey respondió risueño, Kokonoi le regreso la sonrisa.

—Oigan - La voz apagada de Rindou hizo que girarán, su rostro de veía pálido. —Algo anda mal...

El de orejas se recostó hacia atrás, el pecho de Baji lo resivio, este abrió los ojos y le miro confundido.

—¿Qué cosa Rin? - Kokonoi pregunto sin resivir respuesta.

—Hey, Izana, se ve mal - Kakucho miro a su mejor amigo, el moreno respiraba con dificultad y se veía pálido.

—Ran también se ve mal - Kazutora toco la frente del mayor, este se quejaba entre sueños. —A la mierda, esta muy caliente...Oye, despierta idiota

—¿Qué está pasando? - Draken abrió los ojos, aun bastante adormilado.

—¡Carajo Rindou, no te duermas! - Baji sacudió al de cabellos coloridos, preocupado de su pálida piel.

Mikey miro un a sus amigos, ¿qué les estaba pasando? ¿Acaso era magia?.

—Izana, despierta - Llamo nervioso a su amigo, esperando a que el de ojos violeta se riera de él por demostraste preocupado ante él.

—Mikey, ¿qué hacemos?... ¡MIKEY!

—¡Hay que llevarlos a la enfermería, alguien busque a Takemitchy!

—Idiotas - Ran les llamo débilmente, su rostro serio.

—No hables, te llevaremos co-

—No - Izana hablo con firmeza, tomando asiento y sosteniendo con fuerza el brazo de Kakucho. —No iremos a ningún lado, esperemos

—¿Esperar qué?, ¡estas enfermo Izana!

—¡Hay que esperar dije!

—Izana, ¿qué pasa? - Mikey clavo sus oscuros ojos en el moreno, este suspiro.

—Tengo un mal presentimiento... Kaku, ¿tú estás bien?

—Idiota, preocupate por ti en este momento

—¿Qué es lo qué piensas? - Kokonoi pregunto viendo la mirada perdida del moreno.

—Hay algo mal... Que alguien me pase mi bolso

—Ten

—¿Qué es eso? - Baji apretó entre sus brazos al menor de los hermanos gato y miro directamente la piedra en las manos de Izana.

—Es el amuleto del País de las Maravillas, hay algo raro

—Eso ya lo sabemos, solo con mirarte a ti y a estos dos es fácil deducirlo