❝𝐒𝐎𝐔𝐓𝐇 𝐏𝐀𝐑𝐊; 𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒❞

Mike One-Shot

Requested: Cherrel_

--> Sales a escondidas con el líder de los vampiros

Eras hermana de Henrietta, más pequeña que ella pero sólo por un año. De todos modos ella no te trataba cómo un bebé, claro que te protegía pero también te dejaba juntarte con sus amigos, fumar y demás. Por consecuencia, tu también eras gótica y compartías sus mismas ideas.

Aunque ir a esa fiesta en Casa Bonita cambió tus planes un poco. Lo recuerda muy bien, era cumpleaños de una chica y habían decidido ir por la comida rica del lugar nada más. En el área de juegos, para su sorpresa, estaban los vampiros. La gente siempre los confundía a los góticos con vampiros, no entendían la diferencia y era molesto: los vampiros eran tontos.

Querías jugar a un juego pero un chico con mechones verdes estaba ahí, sabías que era parte de los vampiros. No ibas a esperar a que terminara, Henrietta te había enseñado que si querías algo debías actuar para conseguirlo y no esperar a que llegue a ti.

-Oye, quiero jugar. A un lado, vampiro- él pareció no escucharte, -¡Oye! ¿Estás sordo? Dije que te muevas-

-Mi silencio es una respuesta negativa- habló sin despegar los ojos del juego

-Lo que sea, muévete- volvió a ignorarte, -¡Oye, tú!-

-Ese no es mi nombre- su tranquilidad te enfurecía aún más

-No me importa cual es tu nombre. Creo que ya estuviste suficiente tiempo aquí, ahora muévete.- él te ignoró nuevamente, decidiste dejar de insistir, te dedicaste a mirar la pantalla del juego, tu expresión se relajó. -Oye, ¿Cómo lograste vencer al jefe anterior?-

-Qué bipolar- bromeó él, resoplaste, él soltó una risa, en ningún momento había volteado la mirada para verte aunque lo hizo de reojo, sabía quien eras. -Es fácil, tienes que usar una combinación que activa el golpe máximo-

-Oh...-

-Puedo enseñarte- pensaste en la oferta pero algo dentro de ti "recapacitó" : él era un vampiro

-No gracias, puedo descubrirlo sola- volviste a tu actitud arrogante

-Cómo quieras-

Te fuiste de ahí pensando en lo sucedido, se lo contaste a tus amigos y desde ahí empezaron una conversación en la que se pusieron a criticar a los vampiros.

Lamentablemente también se los encontraban en la escuela, hasta compartían algunas clases.

La cosa es que cada que se cruzaban en los pasillos sus miradas también se cruzaban, en clase no podías voltear a verlo de vez en cuando, te causaba curiosidad. 

Al poco tiempo te atreviste a hablarle, tomaste cómo excusa la conversación sobre el juego, es decir el tema de su primera y única conversación. Sorpresivamente tenían más en común de lo que pensaban y al poco tiempo se hicieron amigos. Claro que todo esto era en secreto de sus amigos, no querían que descubrieran que eran amigos del enemigo.

Aún peor, después se enamoraron y empezaron un relación amorosa que al día de hoy seguían manteniendo en secreto.

Nunca se veían en la escuela, sólo cuando se cruzaban en pasillos y compartían clases, porque en los recreos cada quien pasaba tiempo con su grupo y a la salida tu siempre te ibas con Henrietta así que no había oportunidad. Sólo se veían a la tarde o incluso noche, cuand Henrietta preguntaba solo le decías que ibas a caminar o comprar algo y ella lo aceptaba, no era controladora ni tan protectora.

Ese día le dijiste que irías a una tienda de conveniencia por algo de comer y luego al cementerio. A ella le pareció bien. Tú saliste y te dirigiste a la tienda donde habías quedado de verte con Mike, se saludaron y hablaron un rato ahí hasta que decidieron caminar hacia el cementerio. A pesar de los cientos de cadáveres que había ahí, era un lugar tranquilo dónde podían pasar tiempo en serenidad.

Hablaron, bromearon, incluso se besaron. No les molestaba salir en secreto en lo absoluto. Finalmente lo despediste con un beso y volviste a tu casa con una sonrisa.

Al entrar, te encontraste a Henrietta sentada en el sillón de la sala cómo si estuviese esperándote a ver cuando entrabas por la puerta principal. En su mano tenía tu billetera y antes de que pudieras preguntar ella se explicó.

-Vi tu billetera sobre la mesa y pensé, ¿Cómo va a ir a la tienda sin dinero? entonces salí y fui a la tienda a la que sabía que irías pero te vi con ese chico. ¿Sales con ese vampiro? ¿En serio? Por cierto me tomé la libertad de comprarme algo con tu dinero. Como sea, él no me agrada- te habías quedado sin palabras pero no ibas a mentirle ahora que lo sabía, poco te importaba si no aceptaba tu decisión.

-¿Y qué si lo hago?-

-Los vampiros son unos estúpidos-

-No lo son, al menos él no. Sí tenemos algunas ideas diferentes pero es una buena persona-

-No me vas a convencer. La verdad no me importa con quien quieras estar pero te juro que si te hace algo voy a arráncale esos malditos colmillos y luego se los clavaré en los ojos-

-Estaré bien-

-Pero ni se te ocurra traerlo aquí. Y cuidado cuando lo beses, no te vaya a morder- rodaste los ojos ante su "broma". 

Después de todo su reacción no fue tan mala, seguramente los demás reaccionarían igual y eso te alivió. Hablarías con Mike, tal vez sería hora de decirle a sus amigos también. Lo más probable es que los grupos siguieran siendo enemigos porque sabías que él no iba a querer llevarse bien con tus amigos y tus amigos tampoco querrían convivir con los vampiros, pero mínimo podrían establecer cierta "paz".