Espero y noten la sorpresa de este capítulo
⚕️⚕️
Jamás entenderé el engaño.
¿Que hay de bueno en engañar a quien le juras amor eterno?
Cuando solo son patrañas.
El aburrimiento se apodera de mi cuerpo, mis ojos arden un poco así que dejo el libro frente a mí y acaricio mi sien sintiendo un leve palpito por el cansancio.
La sala totalmente iluminada por la luz solar que se cuela por las ventanas, dando a entender que hoy será un día soleado.
Mi cuerpo descansa sobre el sofá luciendo una pijama con figuras de nubes y estrellas.
Pasos se acercan y veo a mamá entrando a la sala.
—Buenos días hija— ella camina hasta uno de los sillones dejando caer su cuerpo mientras luce un traje morado al igual que el listón que recoge su largo cabello.
—Hola mamá ¿vas a salir?— pregunto evidente viendo su vestimenta.
—Iré un rato a la floristería, hoy llegan los tulipanes importados, ¿quieres ir? Te vendría bien visitar de nuevo la floristería.
—Quisiera hacerlo, pero...— alzó el libro entre mis manos y ella sonríe ligeramente —Debo terminar de leer este libro, tal vez otro día— digo y tomo de nuevo los lentes y pienso en leer de nuevo, pero papá entra a la sala.
—Recuerden que mañana es la velada con los socios rusos, cancelen lo que tengan pendiente— dice papá con cierto tono de ansiedad.
—Descuida papá, mañana tendré el día totalmente libre.
—Yo también cariño, además, agendé una cita al SPA planeo retocar mi cabello— él suspira mirando del reloj que rodea su muñeca.
—Está bien, debo irme ya, Liam aún está en su viaje y debo encargarme de su trabajo— sus palabras llaman rápidamente mi atención.
—¿Un viaje? ¿De negocios?— pregunto sin sonar tan obvia mientras papá asienta.
—Sí, tuvo que salir rápido de la ciudad al parecer por problemas con la maquinaria en Cadaqués, nada importante...— papá camina hasta mamá y deposita un beso en su frente —Las veo después— dicho eso camina lejos de la sala y mamá me mira.
—¿Quieres que agende una cita para ti también? Tu cabello luce un poco maltratado—mamá dice con una mueca, yo me río por esta y me levanto del sillón acomodando mi pijama.
—Mi cabello está bien, descuida mamá— sostengo el libro y mis lentes y camino lejos de la sala subiendo a mi habitación.
Mi teléfono suena sobre mi cama.
Liam
Khate, ¿estás bien? ¿Por qué no contestas mis llamadas?
Ignoro su mensaje como lo he hecho desde ayer y dejo a un lado mi teléfono centrando mi vista en el libro en mis manos.
Tal vez sea infantil el no contestarle, pero es inevitable pensar que Liam está con otra mujer.
.
.
.
Tarareo la canción de Harry Styles mientras sostengo la toalla que cubre mi cuerpo húmedo, camino al closet y mientras decido mi ropa, mi teléfono suena sobre mi cama.
Pienso que es Liam así que lo ignoro, pero nuevamente suena, suspiro caminando a este.
Adrián
¿Cómo está tu muñeca? ¿Tomaste tus medicamentos?
—Claro que si, aún me duele un poco.
Adrián
¿Tienes ánimos de ir a un pequeño Karaoke? Está al sur de la ciudad, tu amiga también podría ir.
