~COMIENZOS~

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Liam

Me lo merezco.

Merezco todo su odio.

Merezco sus lágrimas.

¿Pero que más podría hacer?

Sería un egoísta en pedirle que deje todo por mí.

Que deje su hogar, su familia y a sus amigos e inclusivamente su trabajo el que tanto le costó conseguir.

Es mejor así.

-Beatrice por favor escúchame- digo y la castaña retrocede y limpia sus lágrimas.

Me duele verla llorar.

-Jódete, ¿te vas sin decirme el porqué?

-Ya te lo dije, necesito hacerlo- ella niega y empieza a caminar desesperada por toda la habitación.

-Quiero una buena razón ¿que hay de nosotros? Ya no me amas- yo me acerco a ella y la tomo de los hombros.

-Beatrice entiéndelo, no queda nada aquí mi padre murió y dejo alejarme de Italia.

-déjame ir contigo Liam yo... Yo iré contigo - dice y se arrodilla ante mí llorando, yo rápidamente la tomo de sus brazos y la levanto.

-No hagas eso beatrice por favor- siento mi voz romperse.

No quiero dejarla.

-No me abandones Liam- siento sus puños apretando mi chaqueta.

Antes de que sus palabras hagan efecto suelto a la castaña apartando la de mí, ella niega mientras llora.

Yo tomo mis maletas y salgo de la habitación y su llanto se oye hasta las escaleras.

Yo tomo una gran respiración y salgo del departamento dejando mis maletas en el auto.

Y es inevitable llorar, soy un hijo de perra en dejarla.

Pero llevarla conmigo sería el acto más egoísta de toda mi vida, ella nació aquí. Aquí está todo lo que ella ama.

Yo solo fui un amor pasajero>>

Dejo las llaves del departamento que ambos compramos en la entrada de este y subo a mi auto sin mirar atrás.

Conduzco hasta el aeropuerto sintiendo mi pecho arder por la escena de Beatrice.

Ella jamás me perdonará por lo que hice.

Me lo merezco.

...

-Si madre estoy a punto de abordar el avión.

-No sabes lo emocionada que estoy hijo.- la escucho del otro lado de la línea.

-te hablo cuando llegue. Te amo mamá.

-Te amo Liam.

Sin decir nada más cuelgo y cuando mi vuelo es anunciado camino a este abordando el avión.

Me dejo caer en mi silla y un señor regordete se sienta junto a mí antes de darme una gran sonrisa.

Yo hago lo mismo y mi atención cae en la ventana donde mis ojos pesan por el sueño acumulado, la muerte de mi padre, el estrés del trabajo y sobre todo por Beatrice.

Caigo en un profundo sueño sintiendo mi corazón doler.

Cuando llegó a España la azafata lo anuncia y yo salgo del avión con los demás pasajeros, el clima frío me recibe y suspiro estando en otro ambiente.

Un ambiente menos pesado.

Camino en el aeropuerto arrastrando mis maletas sintiendo el cansancio de todo en mi cuerpo.

Terrible tentación Where stories live. Discover now