LA ISLA- PEDRI GONZÁLEZ

Capítulo 41

ALMA

—No pienso ir.

—¡Pero por qué!.

—Porque es un poco violento que ni me hayas presentado en general y que aparezca así de repente en un evento de ese nivel contigo de la mano.—Reí.

—Bueno, puede que tengas razón.

—¡Ves!.

—Pero en algún momento habrá que contarlo Alma, quiero hacer mil millones de cosas contigo y será mucho más sencillo si lo hacemos público.

—Dijiste que iríamos a mi ritmo.—Le encaré.

—Eso fue antes de saber que ibas a ritmo de caracol...—Me reí por su comentario.

—Vale, iré a la cena, pero solo a la cena.—Pedri me besó apasionadamente sin dejar que acabase de hablar.

—Oye que no he terminado de hablar.—Me reí entre besos.

—Me lo cuentas luego, ahora solo puedo pensar en una cosa, y empieza por "Tus" y acaba por "Tetas".

Una carcajada salió desde lo más profundo de mi ser, pero fue rápidamente sustituida por un jadeo que escapó de mis labios a causa de la excitación que estaba sintiendo al notar su lengua recorrer mis pechos.

PEDRI

Esta noche teníamos una cena importante donde acudirían todos los miembros del equipo y del club ya que habíamos ganado la liga, era algo así como ''una cena de celebración''.

Sé que le había dicho a Alma que iríamos a su ritmo, no quiero presionarla, pero sí que me estaba costando mucho reprimirme de ciertas cosas cuando estábamos ''visibles''.

Precisamente por este motivo acordamos que ella iría desde su piso en un taxi hasta el restaurante donde se hacía la celebración, mientras que yo iría con Gavi en mi coche.

Eran al rededor de las 20:30, tenía mis manos un poco sudorosas, no habíamos hecho público este evento ya que era algo más íntimo, pero aún así la prensa se había acabado enterando y habían aparecido por allí un grupo de paparazzis con sus respectivas cámaras detrás de unos arbustos.

A veces me hacía gracia ver cómo se ''escondían'' ya que claramente me daba cuenta de que nos estaban haciendo fotos por el ruido que hacían sus cámaras al clicar.

Entré con Gavi a mi costado, Eric se nos unió rápidamente y juntos nos refugiamos en el interior del local.

Saludé a los allí presentes con un apretón de manos, y fui avanzando hasta la mesa que nos correspondía, saqué el móvil de mi bolsillo y le escribí un mensaje a Alma.

''Acabo de llegar, ¿cómo vas?.''

''Estamos entrando, hay muchísima seguridad, parece que estemos entrando a las instalaciones de la  NASA''

Una risa se escapó de mis labios al leer su mensaje.

–Es oficial, lo hemos perdido.–Dijo Eric.