Luz se ofreció a ir por una bebida para ambas, a lo que Amity aceptó, esperándola en su sitio.


 Luz cruzó prácticamente al otro lado del gimnasio.


—Entonces... ¿qué tal la velada? — escuchó una voz a su lado.


Amity volteo un poco sorprendida, no había visto que Lilith se había acercado a ella.


—Miss Lilith— saludó, —bastante bien, divertida en realidad— fue la respuesta de Amity.

—Me alegro y... te deseo suerte supongo— dijo Lilith ofreciendo una mano a su exalumna. 


Amity devolvió el apretón, aunque mantenía una expresión confundida.


—En la universidad y en tu vida en general, dudo que no nos volvamos a ver nunca...— dijo dando una mirada suspicaz a la Blight, —... pero no nos veremos por un tiempo, simplemente me estoy despidiendo de una de mis mejores estudiantes— explicó ella.


Amity en un impulso, jaló a su profesora favorita en un abrazo.


—Gracias Lilith, yo también disfrute mucho de mis clases. Sigue enseñando con esa pasión por favor, que estoy segura que no voy a ser la última que termine fascinada con ellas— le dijo sinceramente.


Lilith le dirigió una mirada llena de cariño cuando se separaron.


—Gracias por tus palabras Amity— luego volteó a la pista, Luz venía en camino, —y bueno, yo las dejo, estamos cuidando a un chico que parece traer una botella de licor, llevamos una hora intentando revisarlo, pero es escurridizo— se excusó mientras Luz llegaba y le entregaba una botella de agua a Amity y otra a Lilith.


—Gracias Luz— le dijo haciendo una seña de despedida en dirección a Amity —... y suerte— le dijo en voz baja a Luz. 


Ante ese último comentario Amity se extrañó, y aún más porque Luz miró a Lilith severamente y su cara se sonrojó con fuerza. 


Pero lo dejó pasar, centrándose en abrir su botella de agua y dar un gran sorbo.



—¿Todo bien, Ams? — preguntó Luz después de unos minutos.

—Si, es sólo que...creo que ya estoy extrañando todo lo que pasó aquí en los últimos meses.

—¿Algo que pueda hacer para curar tu temprana melancolía? — preguntó Luz suavemente.


Amity se movió para detenerse justo enfrente de Luz.


—Creo que sí, ¿me concederías este baile? — preguntó ofreciendo una mano a su novia.


Pero antes de que Luz se moviera escucharon a Boscha.

—¡Ahí están! — dijo ella a unos metros y acercándose rápidamente.

Aprendiendo a ser [Lumity]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora