Vi como Lauren se alejaba de mi caminando hacia su cabaña, apresuré mi paso a ella. No podía echarme por un error que cometí hace mucho tiempo.

—Está no es un área en la que puedas estar, lárgate de acá - Espeto sin detenerse.

—Por favor... no hagas que me echen... - Tome su brazo con fuerza haciéndola girar.

Ella torció mi mano para después hacer volar mi cuerpo estampándome en el suelo lleno de lodo, jadeé. Su brazo estaba sobre mi cuello, su rostro estaba furioso muy cerca de mi.

—Como te atreves infeliz - Siseó —Mírate Cabello, eres una chiquilla infantil que va acosando señoritas por ahí ¿A esto aspirabas cuando decidiste entrar al Ejército? - Ok, aquello hirió mi orgullo. Claro que a esto no aspiraba, yo quiero ser como mi padre pero eso ella no tiene por qué saberlo. Y ahora ella estaba jodiendo todos mis sueños.

Con una de mis piernas la hice caer al suelo, colocándome encima de ella forcejeando por mantener sus manos tranquilas.

—¡Suéltame! Estás cavando tu tumba.

Por fin pude controlar sus manos, la tenía apresada con sus manos arriba de su cabeza, yo estaba encima de ella y demonios no me pude controlar.

Ataque su deliciosos labios, bueno un intento de beso por qué ella movía su rostro evitando la unión de nuestros labios, en una tonta decisión solté sus manos para agarrar su cara y mantenerla para mi, gemí cuando sentí sus labios suaves. La bese con todas las ganas que le tenia desde hace dos años.

Ella me mordió.

Lauren aprovechó que yo estaba soltando maldiciones por el dolor de mi labio inferior y escapó de mi agarre, caminando rápidamente hacia su "casa" me puse de pie y la alcancé nuevamente con agresividad la tomé de la cintura pegando su trasero a mi erección, estaba todo jodido de todas formas, no me iría de aquí sin antes follarla.

Alcance la perilla y abrí su puerta metiéndonos rápidamente, cuando la puerta se cerró me abalancé sobre ella de nuevo atacando sus labios mientras una de mis manos estrujaba sus pechos por encima de la ropa y mi otra mano amasaba su trasero, apretaba su trasero mientras acercaba mi pene a su intimidad, estaba como piedra. Lauren correspondía mi beso mientras gemía, ella estaba disfrutando de como restregaba mi pene en su intimidad disfrutaba de lo que mis manos le hacían a su cuerpo, se separó de mi solo para tomar una bocanada de aire mientras me veía de manera intensa cuando creí que vendría una bofetada o algo peor ella se abalanzó hacia mi aferrándose a mi nunca mientras su traviesa mano viajaba a mi entrepierna, Jadeé. La sargento Jauregui acariciaba mi polla por encima de los pantalones lentamente, recorría toda mi longitud para apretarme cuando llegaba a la cabeza.

Ella caminó haciéndome retroceder hasta que mis piernas toparon con algo haciéndome caer en lo que parecía ser una silla la verdad es que no me interesaba donde estaba lo único que quería era tener mi polla en su coño. Lauren se sentó en mi regazo meneando su coño en mi miembro, comenzó a besar mi cuello dejando pequeñas mordidas en el lo que me hacía jadear.

Click.

Escuche y mierda.

¿Unas jodidas esposas?

¿Por que mierda tenía unas esposas?

¿De donde mierda las sacó?

Estaba tan sumida en mis ganas de follarla que no note como ella llevaba mis manos hacia atrás y me esposaba en la puta silla. Lauren se puso de pie con una sonrisa socarrona.

—Esto no es gracioso, suéltame - Forcejee tratando de salir de ellas pero era en vano solo lastimaba mis muñecas.

—¿No? A mi si me parece gracioso - Se acerco a la puerta para cerrarla con llave y volverse a mi.

One Shots - Camren Where stories live. Discover now