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Seungcheol abrió el grifo de agua a su máximo, se lavó las manos y luego el rostro de forma frenética. Una, dos y muchas veces más luego de esa. Recargó su peso sobre el lavabo del baño y luego se miró el rostro en el espejo.

Por más que intentaba borrar los sonidos e imágenes de Jeonghan de su cabeza estaban tan vívidos como hacía un momento.

La poca cordura que le quedaba lo había hecho moverse de ese lugar y regresar a su consultorio. Mentiría si dijese que no quería quedarse hasta el final. A Jeonghan parecía no haberle importado que mirara todo, pero estaba seguro de que Wonwoo no pensaría lo mismo.

Tendría que volver, pero no estaba seguro de cómo podría ver al rubio a la cara y fingir que nada pasó. Porque sin duda algo había pasado, y Jeonghan lo había consentido.

¿Acaso disfrutaba ser visto cuando su esposo le hacía el amor? ¿Era una fantasía hacerlo en lugares públicos? Cualquiera los hubiese visto además de él. Pero ellos sabían que los iría a buscar, ¿Era todo intencional? ¿Qué demonios significaba esa sonrisa? ¿Quería provocarlo?

Fuera cual fuera su intención, lo había logrado. Había despertado en él mucho más que sólo su miembro. Era un deseo escondido en el corazón de Seungcheol. Un deseo que era casi palpable en él.

Y no había que ser un gran moralista para reconocer el error en todo ello. Porque Jeonghan estaba casado.

Esa era su realidad.

⌛⌛⌛

- Ya no puedo más - jadeó - Vamos a descansar.

Wonwoo retrocedió un par de escalones y se sentó junto a Jeonghan.

- Sólo subimos dos pisos.

- Pero en total llevamos ocho.

- Pero ya descansaste tres veces.

Jeonghan lo miró fastidiado. Era increíble lo bien que lucía pese a todo el esfuerzo que había hecho.

- No entiendo de dónde sacas tantas fuerzas.

- ¿Lo dices porque estoy enfermo?

- Lo digo por la cogida de ocho pisos abajo - dijo besando sus labios - Y por las miles de escaleras.

Wonwoo volvió a besarlo con ternura y anhelo.

- No es que yo tenga una gran resistencia, es que la tuya es un asco.

- ¡Oye! - gritó - Tener sexo es cansado.

- Pero no hiciste nada - se carcajeó - Incluso te cargué todo el tiempo.

Los pucheros y el silencio de Jeonghan le daban la razón. Él era bonito, inteligente y agradable; ser atlético ya era demasiado.

Wonwoo volvió a ponerse de pie y miró arriba.

- ¿No se supone que el doctor Choi nos encontraría en algún punto?

Jeonghan imitó su acción.

- Tal vez está demasiado ocupado.

- No lo justifiques.

- No lo hago - negó entrelazando sus manos y volviendo a caminar hacia arriba - Debe ser duro trabajar con pacientes con cáncer. Probando cosas nuevas... Fracasando, teniendo esperanzas... Y volviendo a fracasar.

Wonwoo lo escuchó en silencio.

- No es lo mismo que hacemos nosotros. Cuando algún proyecto fracasa o no sale como lo esperamos sólo perdemos dinero. Hay más y nuevas oportunidades... Pero cuando un médico fracasa en su profesión... Pierden mucho más.

US AGAIN (WONHAN)Where stories live. Discover now