Amity se despidió de Luz con un pequeño apretón en su mano, Luz lo devolvió antes de que la soltara.


En ese momento decidió darles un poco de privacidad a los Noceda, después de todo, debían ponerse al día.

Salió del comedor seguida de Hunter, quien la miraba aun en shock.


Una vez que llegaron a la sala se sentaron ambos en el sofá, y King subió directo al regazo de Amity, quien al ver al gato decidió darle unas cuantas caricias.

—Eso... si fue inesperado, ¿cómo es que pensaste en ello? — preguntó Hunter.

—Luz finge que no le afecta, pero la verdad es otra— Amity suspiró y volteo a ver a Hunter, —ella estuvo triste todas estas semanas después de la publicación de ese reportaje, siempre le preguntaban lo mismo. Además, es su padre, después de todo. Creo que ella necesita cerrar ese capítulo de su vida, ¿sabes?, simplemente hablar con él— explicó ella.

Hunter quedó pensativo ante tal comentario.

—Es muy noble lo que has hecho— dijo simplemente.

Amity se limitó a darle una triste sonrisa mientras seguía acariciando a King.


. . .


Pasaron aproximadamente veinte minutos y Eda bajaba las escaleras.

Vaya que esa reunión la tenía estresada, los inversores eran muy difíciles de convencer.


Antes de llegar, distinguió a Hunter y... ¿Amity?, aunque faltaba Luz.

Llegó a la sala buscando y volteando para todos lados, —¿y Luz? — les preguntó.

—Está con mamá Cam en la cocina— respondió Hunter, Amity sólo la saludó con una seña a la distancia, King se había dormido en su regazo.

—Y ¿qué se supone que están haciendo? — preguntó Eda acercándose a los chicos.

—Yo... puede que haya arreglado una llamada telefónica con el papá de Luz— confesó Amity un poco nerviosa.


El padre de Luz, vaya.

Eda había hablado de Cam sobre su pasado desde que se conocieron, el tema era delicado, porque más allá de las implicaciones de que él estuviera en prisión, era un tema sentimental complicado para Camila y Luz, Eda lo sabía.


Tomó asiento en el sofá de una plaza que estaba por ahí desocupado.

Tal vez... ¿debería ir y ver si estaban bien?

Sabía que Camila no había terminado mal su anterior matrimonio, pero no sabía cómo tomarlo ella misma.


—De cualquier forma, ya deben estar terminando de hablar, sólo les pude conseguir treinta minutos— comentó Amity moviendo a King al sillón.

—Yo... iré a ver si esta todo en orden— les dijo Eda levantándose todavía pensativa.


Se dirigió a la cocina, pero no interrumpió la conversación que estaba escuchando.


—Me alegra mucho saber que han salido adelante, es bueno saber que no jodí demasiado sus vidas— se escuchó del teléfono la voz de un hombre.

Una pequeña risa salió de Camila —está bien Manny, déjalo ir, ya te hemos perdonado—.

Aprendiendo a ser [Lumity]Where stories live. Discover now