Mi aventura (One Piece)

Capitulo 90

Bere bere bere bere 

Ace cogió el Den Den Mushi soltando un pequeño suspiro, hacía menos de un minuto que Kris se había ido y que había confirmado sus sentimientos por la pelirroja en voz alta por primera vez. Su abuelo se había quedado sorprendido, pero no habían vuelto a hablar. 

Cacha. 

-Ya voy Marco, estaba term... 

-Está viva. 

-ando de. -Ace se calló de forma abrupta, Marco había hablado mientras él aún no terminaba su frase. Así que creyó oír mal. -¿Qué has dicho?

Garp se giró para ver el caracol con el ceño fruncido, creyendo también haber oído mal. 

-Está viva. -La voz del comandante sonó con gran seguridad, de forma inconsciente el pecoso dio un pequeño paso hacia atrás. 

-Como sea una equivocación y me ilusiones para nada... -La voz le tembló de forma leve, tenía la vista perdida y su abuelo logró ver como la mano que sujetaba el caracol también tembló de forma casi imperceptible. 

-Lo hemos comprobado Ace, está viva. Así que mueve tu culo al barco para que podamos irnos a un sitio donde puedan tratarla bien antes de que la jodida Marina encuentre nuestro barco. 

Después de que Marco dijera esto los ojos del caracol se cerraron, indicando que la llamada había terminado. 

Ace se quedó en silencio, sus ojos se movían de un lado a otro, procesando la nueva información que acababa de recibir. 

¿Estaba viva? ¿Cómo podía ser? Él mismo había visto como su corazón dejaba de latir, la había tenido entre sus manos, no tenía color en la piel y su cuerpo no desprendía a penas calor. 

¿Había revivido de la nada? O tal vez su intento de reanimación sirviera para que su corazón volviera a latir, pero al estar débil no lo había notado y creía que estaba muerta. 

No podía ser. 

-¿Entonces la chica está...? -Garp dejó la pregunta en el aire observando a su nieto, quien regresó a la realidad al escuchar su voz. 

-No puede ser... -Negó levemente con la cabeza, "Andaira está viva, la enana está viva". Con este pensamiento en su cabeza las comisuras de sus labios se tensaron en una sonrisa mientras sus cejas se alzaban. -¡Está viva! ¡La enana está viva!

Garp alzó las cejas mientras sonreía, viendo como la vida volvía al rostro de su nieto, el cual antes estaba sombrío. Sus ojos brillaron como nunca antes lo había visto. 

Cuando terminó de hablar el pecoso pareció creerse sus palabras, cerró los puños mientras los sacudía como si hubiera tenido una victoria y después levantó sus ojos llenos de vida para observar los de su abuelo. 

-Tengo que ir a verla, ya nos veremos por ahí vejestorio. -Después de decir esto el pecoso dio un puñetazo amistoso en el bíceps de Garp antes de girarse y darle la espalda. -Cuando nos volvamos a ver te devolveré el puñetazo que me diste. 

Antes de que el marine pudiera decir nada el joven comandante corrió directamente hacia la ventana que había en la pared contraria, saltó contra ella rompiendo los tablones de madera  y cayó en el tejado de enfrente. 

Lo último que vio Garp de él fue como desaparecía tras un edificio con una gran sonrisa en el rostro. 

-Estos jóvenes de hoy en día... -El viejo negó con la cabeza a pesar de estar sonriendo con cariño, sacó el paquete de galletas que había dejado a medias y empezó a comerlas mientras iba de regreso a la plaza, donde le daría un par de gritos y órdenes a Coby y Helmeppo aprovechando que estaba de buen humor.