⚜Ｒａｓｔｒｏ ｄｅ Ｓａｎｇｒｅ ｙ Ｍａｇｉａ⚜

11. Hope.

«Rescue me, show me who I am..»

[*New Orleans. 5 años después*]

 > Corría por aquella casa, parecía no terminar más de hacerlo. Cada escalera le daba a tres puertas y en cada que elegía una, personas, rostros deconocidos aparecían. Situaciones no vividas.; Su vestido rojo sangre transparente como si fuese un tul, el corsé que traía hacía juego con ellos y el short tiro alto negro que traía puesto abajo, hacía juego con los aparentes pétalos de rosa rojos que habían esparcidos por el suelo de cada piso por el cual la joven morena de ojos oscuros y rostro medio angelical, pasaba. 

Pisó el suelo de lo que parecía el último piso, sentía que ya había estado allí. Miró desde el pié de la escalera: de nuevo tres puertas. Estaba segura que habrían más personas, más imágenes. Todo de nuevo. 

¡Pero no! Había algo que la llamaba, como si la guíase. La joven se dirigió hacía la puerta central, sujetando un pedazo de su vestido queriendo evitar caerse de ser posible., Tomó la perilla de la puerta central de madera vieja y gastada, la giró e ingresó dentro de lo que parecía un as de luz blanco...<

  El despertador sonaba retumbando en la cabeza de la joven que estaba escondida entre sábanas y colchas. No estaba acurrucada ni mucho menos, por el contrario, parecía, ante cualquiera que la viese, una contorcionista: sus brazos, uno doblado para atrás y el otro escondido bajo la almohada, tenía una de sus hermanas dobladas y a otra estirada media de costado. 

Todo su cabellero castaño oscuro revuelto y varias mechas del mismo sobre su rostro. Sus ojos negros ahora estaban cerrados. Y su audición...siendo retumbada por el molesto ruido del despertador.; Trato de estirar de una de sus manos hacía el molesto aparato en un intento de apagarlo. No podía encontrar el botón de apagado del mismo al punto de golpearlo tantas veces que al final, terminó por tirarlo al suelo -sin querer- y solo así se calmó. 

La muchacha volvió a acomodarse entre su ropa de cama, cambiando de posición, acurrucándose hacía el lado izquierdo. Soltó un suspiro y cuando creyó que podría seguir durmiendo, su móvil empezó a sonar a todo volumen. Sin querer, la joven volvió a darse vuelta hacía la derecha para intentar tomar su móvil y apagarlo, pero de dormida terminó cayendose de la cama sin querer, causando un gran estruendo en la habitación.

Solo así, la morena apenas abrió sus ojos y se arodilló al costado de su cama,sosteniéndose de las colchas de la misma,viendo sin ver para todos lados. 

Alguien golpeó a su puerta e ingresó diciendo. 

— Hope. Arriba, vamos, que tienes que ir a estudiar..

Era Camille. Había pasado como cada mañana por la residencia Mikaelson tan solo para acompañar a la ya no tan pequeña Hope a su instituto, ya que le quedaba de paso y no quería que la muchacha fuese sola. 

— ¿Qué?¿Yo? Ah, si, si, ya...ya voy. 

Respondía la joven aún sin salirse de su posición. Parecía perdida, no podía abrir sus ojos por culpa del sueño. Pero aún así, sus caidas matutinas eran normales.