El abismo de Hades: El regreso de un Rey. Ⓒ

Capitulo 50

Capítulo dedicado a "@rosmery_chan" y "@AmyAquino6" gracias por el apoyo. 🫶🏻

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21+

Kennedy Ivanov

— La próxima vez nos empezaremos a bañar dos horas antes. — Dije caminando de un lado a otro mientras me pongo las prendas y acomodo el vestido.

— Si tan solo dejarás de ser tan sexi...— dijo Hades sentado en la cama mientras termino de ponerse sus zapatos. Se acerca a mí por detrás y sube el zíper.

— ¿Yo? Qué hay de tu amiguito, contrólalo y trataré de no pensar en el todo el día. — este sonríe y besa mi cuello en cuanto termina de subir el zíper. Sentí como su mano bajo y apretó mi nalga nuevamente.

— Se controla cuando no estás en su presencia. — Termina de decir para soltar mi nalga.

Terminamos al fin de alistarnos y sin dudar nos dirigimos hacia el lugar, por cierto, era un hotel extremadamente lujoso. Ya sabía que Ian no se podría contener, aunque su aspecto frío demuestre lo contrario, está locamente enamorado de ese bebé. Hades y yo salimos del auto. Nos tomamos de las manos como unos recién casados felices y entramos, siendo la vista de la mayoría de allí. Aunque traía tacones mi tamaño no era rival para el de el. Nos dirigimos a la enorme mesa del centro y empezamos a saludar a todos.

—¡Al fin llegan! — Habla Gane.

— Pensé que no vendrían. — Añade Enzo guiñándome un ojo y rodeó los ojos mientras abrazo a mi padre y saludamos al resto.

— El tráfico. — Dije sarcásticamente.

— Si claro! — Responde Enzo devolviéndome el sarcasmo y sonrío.

Tomamos asiento y luego de brindar, comer y escuchar los chistes malos de Enzo. Cada quien se dispersó y como era costumbre Hades y Ian conjunto a mi padre fueron hacia los socios hablar de negocios. Nosotros por otro lado seguimos riendo y contando chistes malos. A los que ni vi muy contentos fueron a los padres de Gané.

— Oye! ¿Ocurre algo? — Le pregunto en voz baja a Gane.

— Ya sabes como son, sé que lo terminarán aceptando, pero a veces me enojan. — Dice está junto a mí. — Ni siquiera pueden fingir para que me sienta bien, es como si están aquí por obligación.

— Oye tranquila, si quieres voy y hablo con ellos. — Ofrezco acariciando su hombro.

— De nada servirá, No te molestes. — Dice y asiento.

La noche fue transcurriendo maravillosamente, todos tomaban excepto Gane y yo, ella por el embarazo y yo pues tengo que entrar a un quirófano en menos de cuatro días. Ahora no quiero arruinarle la fiesta a nadie, les diré luego a los demás.  Todo iba bien hasta cierto tiempo, veo a Gane discutiendo a lo lejos con su madre. Mis ojos van hacia Ian el cual no se daba cuenta de lo que sucedía como la mayoría, pero Enzo, Mia, Tania y yo nos percatamos.

— Deberíamos interferir.

— Enzo tiene razón, si no los páramos crearán un alboroto. — Dice Tania.