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Todo comienza con Madara y Azula besándose, recostados en un sillón dentro del palacio real, en el dormitorio de la princesa. Ambos son interrumpidos, al principio se molestan pero Madara se calma y persuade a Azula de atender la emergencia.

Mientras en una zona desértica Aang y sus amigos están recorriendo los lares para buscar el templo aire del oeste. Los chicos conversan de cómo encontrar dicho templo, no ven nada por ningún lado. Al momento de llegar los chicos no ven nada, pero Toph usando su sentido sísmico para ver con la tierra detecta que el templo está debajo de sus pies, al borde de un acantilado.

Mientras en otro punto del templo vemos a Zuko bajando por una cuerda, recordando sus primeros días como exiliado de la Nación del fuego. Su proclama de cómo estaría dispuesto a encontrar al avatar y traerlo ante su padre, que no descansaría hasta haber cumplido con su misión. Zuko reacciona y se esconde, puede ver cómo el bisonte volador llega y se detiene en un punto cercano a la posición del príncipe. Él inseguro, procura no dejarse ver por lo que de manera discreta se marcha del templo.

Al momento donde los niños se disponían a divertirse, Aang se les quería unir. Sin embargo Katara lo detiene para iniciar una conversación con él:

-¡¿Por Qué No Puedo Ir?! Preguntaba un sorprendido Aang

-Debemos decidir qué debemos hacer ahora y ya que eres el avatar creemos que deberías participar. Katara responde.

-Entiendo, y ¿cuál es el plan? Aang responde.

-Si me preguntas, el nuevo plan ¡Es el Antiguo Plan! Sokka responde.

Mientras discutían si Aang debería dominar los cuatro elementos y derrotar a Ozai, Zuko como se estaba preparando mentalmente en cómo abordar a Aang y a sus amigos para convencerlo de unirse a ellos, a su bando. Más tarde en el templo aire Sokka, Katara y Toph persiguen a Aang para convencerlo de encontrar un maestro de fuego control, no sé si es obra del destino o algo pero ese maestro les llega, en forma de Zuko. El príncipe desterrado trata de convencerles de que se una a su equipo, desafortunadamente para él no solo le rechazan la oferta sino que le recuerdan todas las cosas malas que Zuko les llegó a hacer: Cómo atacar la tribu agua del sur, o utilizar el collar de Katara para poder ubicar a su dueña y atrapar a Aang, así como enviar a un sicario para acabar con la vida del equipo avatar. Esas y entre otras cosas más. Bueno, sin más corren del templo aire al príncipe Zuko y este al regresar a la tienda de campaña que improvisó se dispone a regañarse a sí mismo por no haber sido aceptado en el grupo de niños que pretendía salvar al mundo.

Mientras en el templo aire el equipo avatar estaban hablando de lo que recientemente les había pasado hace unos momentos con Zuko, Katara contando la anécdota de su encierro con él en las catacumbas de Ba-Sing-Se, la maestra agua había bajado su guardia y ahí fue cuando Zuko la traicionó. Aang había mencionado su anécdota con Zuko, cuando fue capturado por la Nación del fuego y el príncipe desterrado tuvo que rescatarlo como el espíritu azul. Katara responde enérgicamente sobre que a Zuko poco que le interesa la integridad de Aang, Sokka le da la razón diciéndole al avatar que Zuko había hecho esa acción únicamente para llevárselo como prisionero ante el señor de fuego. Katara agregó: ¡¿Y lo de Appa, Qué Fue Eso?!¡Qué Mentiroso!

-Él en realidad no mentía. Toph interrumpe.

-¡Oh Bravo! ¡En Toda Una Vida de Crueldad Zuko no Agregó Crueldad a Los Animales a la Lista! Sokka replica.

-Solo digo que considerando su desunida familia y cómo fue criado pudo haber sido mucho peor. Toph responde.

-¡Tienes Razón Toph Vamos a Buscarlo y a Darle Una Medalla! ¡El Premio al no Haber Sido Todo lo Perverso Que Pudiste Ser! Katara responde.

Kimimaro de la nación del fuegoWhere stories live. Discover now