XXXVI

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Carousel
5sos-

Supongo que, de cierta manera, cuando me ofrecí para traerlo (cosa que no logro comprender aún porque hice) no esperé que realmente aceptara.

Pero aquí me veo caminando con cara de pocos amigos y tomada de la mano por el niño molesto quien ve todo como si fuera la primera vez en su vida que va a una feria.

-¡Mira, yo quiero ir a ese! -señaló la gran rueda de la fortuna, la cuál sobresale de todas las demás atracciones, siendo la más grande.

-quizás luego, hay muchas personas y acabamos de llegar. Vamos a otro.

Abulta su labio inferior en un puchero pero no se opone.

Seguimos caminando entre el montón de gente, ya vaya que hay mucha.

Paramos en un puesto dónde tienes que darle al blanco con una pistola de juguete para ganar un premio.

Juego típico de feria.

-¿Cuánto cuesta? -pregunto al señor que atiende dicho juego.

-2 DLS.

A.

-yo puedo pagarlo. -dice el niño a mi lado.

Y decido ignorarlo.

Si yo quiero lo pago, punto.

-tome. Gracias.

Me da una pistola, 6 intentos.

Se la paso al niño e intenta atinarle 1, 2 y tres veces cuando se rinden y comienza a hacer pucheros.

Tomo la pistola y desperdicio vilmente nuestras últimas esperanzas.

Me doy vuelta a él, con mi mejor cara de inocencia.

-juro que está arreglado el juego.

No puedo evitar reír al ver su gesto, lo tomó de la muñeca y seguimos caminando.

Pasamos por un puesto de algodón de azúcar y compré uno.

Dí el primer mordisco y me voltee hacia él.

-¿Quieres? Está bueno.

Se lo entiendo, él hace una mueca, lo mira con recelo y niega.

-no, gracias.

Vacilo un poco.

-ayudame, anda. No me lo acabo sola.

Veo una sonrisa de diversión en su rostro.

-tu lo compraste. -y me muestra su lengua mientras se inclina un poco a mí.

Pongo para de indignación y me llevo una mano al pecho de forma dramática.

-niño malcriado.

Ahora yo sonrió con diversión al verlo hacer una pequeña rabieta ahí mismo.

-¡No me digas niño! -golpea el piso con un pie- ¡Ya estoy grande! Aparte solo me llevas dos años, no se vale.

Se cruza de brazos y abulta los labios.

-ya, bueno, no te diré niño...niño.

Me doy media vuelta y río al oírlo reclamar.

Pero, aunque reclame, no voy dejar de llamarlo niño.

Cuando ya hemos pasado un rato en la feria, solamente pasando de puesto en puesto, y apenas habiendo ganado un solo premio (él cuál fue, a desición del niño, una alcancía de stich), decidimos ir, por fin, a la rueda de la fortuna

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Cuando ya hemos pasado un rato en la feria, solamente pasando de puesto en puesto, y apenas habiendo ganado un solo premio (él cuál fue, a desición del niño, una alcancía de stich), decidimos ir, por fin, a la rueda de la fortuna.

¿Buen momento para decir que le temo a las alturas?

-¿Estás bien, betts?

Bien, pero bien convencida de que si caigo de aquí muero.

-si, claro. Obviamente. ¿Por qué la pregunta?

-segura -ni si quiera volteó a verlo, veo al suelo, que parece ser más lejano que mi posible muerte y siento que me caigo.

Suelto un gritito.

Y oigo una pequeña risa de su parte.

-¡No te burles!

-no lo hago -sonrió-. No sabía que le temes a las alturas, lo siento. De haber sabido no venimos a este juego.

-pero tú...

-igual también podíamos haber ido al carrusel. Al de caballitos porque ya no cabemos en el de cars -frunce un poco el ceño-. No veas para abajo.

-¡No me digas que hacer! -siento como se vuelve a mover el juego y me sujeto muy fuerte el barandal mientras cierro fuertemente los ojos-¡Dios, María y José!

El estúpido niño a mi lado suelta una carcajada y abro un poco un ojo para verlo.

Su cabello se mueve un poco por la ligera brisa que hay acá arriba. Luce una bella sonrisa y parece disfrutar de esto.

Parece disfrutar de mi sufrir.

El juego se vuelve a detener, está vez en la parte las alta.

-o por dios, está muy alto.

Pone su mano sobre la mía y volteo a verlo.

-está buen sentir miedo. A mí la primera vez me dió mucho miedo y terminé vomitando. ¿Pero ya viste que linda vista? -niego y volteo, esta vez al frente. Realmente es bello.

Si no fuera porque siento que en cualquier momento el juego puede fallar y hacernos caer y terminarlos muertos.

Todas las personas parecen más que solo diminutas desde aquí arriba.

Las luces que alumbran el lugar parecen pequeñas luciérnagas y la inmensidad del cielo nocturno luce realmente bello.

Y es entonces que caigo en cuenta que no es lo único bello que hay aquí.

Aparte de mí, claro.

A mi lado, hay un niño molesto que admira la vista.

-jug.

-¿Si?

No sé que hago, y es solo un impulso, pero pronto me acerco a él.

-jug.

Y él voltea.

Y siento mis labios contra los suyos.






Salió horrible, lo sé, no juzguen hdksvdjd

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Salió horrible, lo sé, no juzguen hdksvdjd

Yo planee este cap hace como tres días pero no tenía imaginación, solo sabía que quería el primer beso así.

Salió bien kk pero bueno, es lo que hay y se chingan 🤧

Déjenme en los comentarios que les gustaría que pase, porque yo sinceramente no sé que va a pasar xddd

Bien. Bai.

꧁ᴍᴜɴ̃ᴇᴄᴀs Rᴏᴛᴀs꧂ (Terminada) Where stories live. Discover now