Defectuoso

Dolor

Pedri miró el techo de su habitación nublado por completo. No había tomado supresor ese día, era libre, por lo que no lo necesitaba precisamente. Bueno sí, pero su médico del día anterior le ordenó que no tomara ese día para "descansar" según él su sistema.

Al final no le habían dado un supresore más fuerte, le dejaron con la misma carga, porque era lo que su cuerpo necesitaba y que si necesitaba otra cosa para calmarse podía pedir una mano a alguien de confianza.

Básicamente su médico le dijo que tenga sexo si se ponían las cosas intensas y Pedro solo le mando a la mierda, en su mente, porque era un cobarde como para reprocharle a un profesional de la salud y más si era antes un capricho de no querer sentir siquiera su celo.

Por otra parte, su compañero Stegen le había dado el nombre de la crema esa y era de venta abierta, aunque no había tenido el tiempo de ir a comprarla pues, aún le quedaba ese día en ese estado.

Su teléfono sonaba entre las sabanas, lo sentía vibrar, pero no tenía ganas de responder. Estaba tirado en forma de estrella con la cama desecha por haber estado muy ocupado quitándose los calores, los que claramente volvían a las horas porque su cuerpo le pedía un jodido nudo, el cual por cuestiones de no querer quedar con un mini problema en su panza, no se lo iba a dar.

Entre que su hermano que le trataba de sacar de su habitación como para que se bañe minimamente, el teléfono sonando desde quizás unos pares de minutos y su cuerpo que nuevamente le pedía ser atendido. Se iba a volver loco.

Se retorcio en su cama desecha mientras busca su móvil entre las sabanas, lo escuchaba sonar pero no podía encontrarlo, se rindió cuando la musiquita se detuvo sin más y se volvió a recostar teniendo en su mente el atender nuevamente su ereccion.

Odiaba estar así, de esa manera tan vulnerable, estaba seguro que si alguien pasaba por su puerta, lo viera y se ofreciera a ayudarle, él dirá un sí desesperado para que se le fuera rápido lo calmar ese calor intenso.

Su mano se movía sin motivación alguna sobre él, ya cansado de eso, pero su ser lo necesitaba, estaba sensible por haberlo hecho anteriormente por lo que sus jadeos y gemidos bajos no se hicieron esperar.

Se aferro a su almohada para callarse a sí mismo, haciéndose bolita inconscientemente contra esta, logrando apagar sus sonidos contra ella. No queria morir de vergüenza ante su hermano, aunque ya era una obviedad lo que sucedía dentro de esas cuatros paredes. Lloriqueo un poco al no poder llegar, se sentía inconforme e incómodo por no poder encargarse de su problema solo.

Su mente estaba nublada, balbuceaba alguna incoherencia dirigida a él mismo. Hasta que lo escucho.

Mucho se moririan de vergüenza, hasta él mismo si estuviera conciente, pero el hecho de que por arte de magia su móvil saliera de entre las sabanas con una voz saliendo de este. Lo hizo calentar aún más a su Omega necesitado.

Con su mano libre puso en altavoz y escucho claro su nombre, ni puta idea de quien era, no distinguía en lo absoluto pero en su interior sabia que era un alfa, escuchar una y otra vez su nombre junto con preguntas de que si estaba bien y así, lo hizo jadear continuando con el movimiento de su mano.

Si mañana se arrepentiría. Quizás.

• • •

Pedro se sentía mejor al entrenamiento del día siguiente, había desayunado con su hermano, el cual no le supo contestar a la pregunta de cómo había estado ayer, ya que no recordaba mucho. Había estado en su estado más puro de Omega en celo.

No lo había vivido tanto desde que tuvo su segundo celo, donde aún no le daban sus supresores. Le había sentado bien, pero prefería no repetirlo nunca, porque eso de levantarse todo pegajoso por el sudor y otros fluidos le dio bastante asco.

Se desempeño bien en el día, estaba concentrado en todas las actividades y estaba más contento de lo habitual, podría decirse que su doctor tenía razón con que necesitaba un descanso de los supresores, aunque sea una vez cada tanto podría no ocupar estos con frecuentemente. Se lo pensaría.

También instalaría una cámara para ver que hacia, porque si cada vez que no tomara la medicina se olvidaría por completo de todo, por lo menos quería saber si no hizo algo loco, como abrir las persianas y que sus vecinos posiblemente lo vieran.

Su día iba estupendo hasta que bueno, le cayó un valde de agua fría encima.

–No recuerdo haberte llamado

–Yo llame –Dijo el Alfa para tomarlo de los hombros y apartarles más de los demás– Perdón, no debí interrupción en rutina

Pedro alzó la ceja mirando a su portero, sin entenderlo del todo, hasta que lo hizo por un vago recuerdo.

Reviso su móvil, y si habían estado en llamada por unas cuantas horas en realidad, algo que hizo al menor temblar y su rostro se pinto de rojo de un segundo a otro.

Stegen lo miraba apenado, aún le pedí disculpas y argumento que si iba a colgar, pero que él le pidió que porfavor no lo hiciera, que se quedara con él allí y simplemente no pudo negarse cuando lo escucho sollozar.

Pedri quedo paralizado, tratando de recordar todo aquello, pero nada se le venía a la cabeza, se avergüenza en su cuerpo y más cuando el Alfa lo toca para abrazarle. Okey Pedri este es momento para cambiar de país, nacionalidad, nombre y todo lo que fuera posible, pensó.

–Sonar triste en llamada –Comentó el alto sin separar de él. Pedri correspondió el abrazo sin mucho más remedio– Somos amigos, puede confiar en mi Pedri, lo que sea

Pedri asintió y agradeció que Stegen no le diera tantas vueltas al asunto, también que sea capaz de comprender que no estaba en sus sentidos cuando contestó la llamada accidentalmente, se prometieron no hablar del tema más, pactando silencio entre ambos. Pedro haría hasta un pacto de sangre para mantener callado al Alfa.

Todo volvió a la normalidad, menos que ahora sentía su cuello doler, el parche que se coloco estaba bien y la zona ya no estaba roja e inflamada, solo le daba pinchazos, su mirada callo en la de su mejor amigo que parecía distraído en atarse bien los cordones de los botines para luego mirar a los demás y frenar en Torres, que con muy poco disimulo lo miraba de reojo. Lo saludo con la mano sonriente.

Lo ignoro.

Su cuello dolió más y en su pecho ya estaba pesando algo.

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Agárrate catalina agarrate fuerte porque se vien cap largo(más de lo habitual) y bardo🥵

Ya sé  que dije el martes pero la vida se me complica los martes al parecer lol

Gracias por el apoyo y como siempre voten, comente y sean felices, que la vida es un poco mejor así.