superstar | pablo gavi.

1 extra.

- ¡Tía, tenemos que hablar!- exclamó mi amiga Rachel al aceptarle el FaceTime. Yo me senté en mi cama poniendo el ordenador delante de mi mientras dejaba el plato con mi merienda a mi lado.

- ¿Pasó algo grave?- le pregunté mientras cogía mi donut del plato.

- ¡Sí! Verás, ¿te acuerdas de Sandra?- yo asentí.

- ¿Mi ex amiga que solo me quería para poder liarse con mi hermano? Me suena.- le di un mordisco al donut.

- Pues a que no sabes a quien vi liándose con tu ex, el que siempre soñaba con ser un cantante famoso o algo así.

- ¿Con Dani?- ella asintió- ¿A Sandra?- ella negó.

- ¡A su hermana!- yo abrí la boca en forma de asombro.- Pero eso no es todo, ¡los outfits eran horribles! Ella tenía el típico tiro bajo de los 2000s que ya sabes co...-

- Rachel- la llamé, siempre se enrolla con un tema y al final acaba hablando de otro- prosigue con lo de Dani y la hermana de Sandra- le dije con una sonrisa.

- Eso es todo. ¿Viste las fotos?- negué.

- No, pero gracias igualmente.

Después de eso se escuchó un ruido abajo, luego caí en que estábamos solos Pablo y yo ya que mi hermano y mis padres se fueron a Sevilla el fin de semana.

- ¿Eso que fue?- preguntó ella.

- Pablo, está abajo. ¿Hablamos después?- ella asintió, yo cerré el ordenador.

Cogí el plato, ya que me había acabado mi merienda (formada solo por un donut), y lo bajé a la cocina, lugar donde estaba Pablo con su móvil.

- ¿Qué haces ahí solo?- le pregunté, dejando el plato en el lavavajillas.

- Escuché que estabas hablando con Rachel y quise dejarte algo de intimidad, ya sabes, cómo casi ya no hablas con ella.

No se equivocaba en eso, ninguna de las dos teníamos tanto tiempo ya que ambas estábamos ocupadas, ella con la carrera y yo con las grabaciones de mi nueva película.

A parte que ambas también estábamos intentando mantener una relación con nuestras respectivas parejas, a distancia las dos. Pero siempre que tenía algo de tiempo intentaba pasarlo con ella.

Lo miré a los ojos y lo abracé por el cuello, él pasó sus manos por mi cintura.

- Estoy tan enamorada de ti que puede que deje de respirar ahora.- él solo me sonrió.

- ¿A qué viene eso ahora?- quitó una mano de mi cintura para acariciarme el pelo.

- No sé, tenia ganas de decírtelo.

- ¿Sí? ¿Pues sabes que? Yo estoy tan enamorado de ti que faltaría al mundial si me lo pides para quedarme contigo.

- ¡Pablo!- él me miró riéndose- ¡No hagas eso!

- ¿Hacer el qué?- me preguntó con una sonrisa.

- Intentar manipularme para pedirte que no vayas al mundial. Vas a ir al mundial y vas a marcar muchísimos goles, ¿vale?- le respondí, mientras con una mano le acaricié la mejilla.

- ¿Te los puedo dedicar?- yo le miré alzando una ceja.

- Cariño, me enfadaría contigo si no me los dedicas.- él rodó los ojos.

- Bueno, tampoco te voy a echar tanto de menos- yo abrí la boca en forma de indignación, hice un amago de separarme pero él me unió más a él- porque te vienes conmigo a Qatar.

- ¿Es coña?- él negó.- ¿De verdad?- él asintió- ¡Voy a ver como te estrenas en un mundial!

- Tampoco es otro mundo, son otros partidos como ya estoy acostumbrado.- hizo un gesto con la mano para quitarle importancia.