Lo que lograste cambiar

Capitulo 46

Selim

Tenía dos emociones en este momento.

Molestia y alegría.

El motivo de la molestia era claro, y creo que el de la felicidad también.

Mi pequeña y hermosa esposa acaba de hacer una escena de celos, realmente estaba muy feliz por eso, pero no me gustó la "pequeña lección" que seguramente quería darme después de a ver hecho lo que hizo antes de irse, ahora tenía una gran problema y definitivamente haría que nurbanu se hiciera cargo de ese problema, que ella misma causó, pero sabía que tenía que ser paciente con ella, así que aquí estoy, con toda la paciencia del mundo esperando a que ella entre por esa puerta.

Realmente estaba apretando fuertemente las manos en mi silla porque no quería que el impulso me ganará y terminar buscándola yo.

- Su majesta...

- Déjala entrar - casi grite cortándole de inmediato.

No estaba para anuncios estúpidos.

A penas salió nurbanu entro a mis apocentos con una enorme sonrisa en su rostro, realmente se veía hermosa con esa vestido color morado, en realidad, nurbanu siempre se veía bien para mí, ella podía tener solo una tela en vuelta en su cuerpo y para mí seguiría siendo la mujer más hermosa, y estoy seguro que también para las demás personas.

Aleje esos pensamientos molestos, no quería actuar como un celosa cuando claramente tenía a esa hermosa mujer solo para mí, siempre fue así y siempre será así, no importa que pase, nunbanu siempre será mía, no recuerdo el pasado, pero estoy seguro que incluso entonces, mi mundo giraba en torno a ella, tal y como ahora.

- ¿Termino de apreciar? - preguntó divertida mientras se acercaba a mi y se sentaba en mi regazo.

- Nunca me cansaría de a preciarte nurbanu - dije mientras escondía mi cabeza en su cuello, aspirando su aroma suave.

- ¿Hoy está muy poético no lo cree sultán? - preguntó divertida.

- También estoy muy necesitado - le susurré al oído mientras envolvía su cintura con un brazo apegandola más a mi.

- Puedo notar eso - afirmo con voz suave.

- ¿Me ayudarás con ese problema verdad mi sultana? - pregunté aunque claramente me ayudara con este problema, que ella misma causó - después de todo, siempre te haces responsable de tus acciones - afirmé cómo si fuera lo más normal del mundo.

- Claro que sí su majestad - sonrió divertida mientras se acercaba más a mis labios.

Está vez no deje que hiciera ningún tipo de huevo y simplemente atraje más su cabeza con una de mis manos para juntar nuestros labios y darle un beso demasiado necesitado, hice que levantara conmigo y rápidamente nos guíe a la cama mientras le quitaba sus ropas y ella hacia lo mismo con las mías.

Cuando la mire desnuda no tuve ni la menor idea de cómo pude estar tanto tiempo separado de ella, e incluso querer alejarme de ella, eso era imposible, definitivamente no importa cuanto lo piense, nunca hubiera podido estar en distancia con nurbanu.

- Selim - dijo en un gemido cuando pegue mi cuerpo desnudo al de ella.

No dije nada simplemente comencé a besar todo su cuerpo, estaba demasiado ansioso como para esperar a juegos previos así que simplemente sacie mi hambre de ella, aunque sabía que eso sería solo momentáneo y no me confundí, porque cada vez que ambos terminabamos, para mí, nunca era suficiente, seguí hasta que simplemente Nurbanu no pudo más, e incluso así, yo aún no estaba saciado por completo de ella y algo me decía que nunca podría estarlo.

La observé dormir hasta que a mi también me llegó el cansancio, cerré con ojos con una sonrisa y supe que está noche por fin podría dormir tan bien como antes.

"cómo antes"

Hablaba del pasado y no recordaba nada, pero realmente no quería pensar en eso ahora, no quería arruinar esto, estaba dispuesto a recordar todo lo que pasó entre nurbanu y yo en el pasado, pero no forzaría nada, viviría con nurbanu cada día, el presente, no pensaré más en el pasado, porque independientemente de lo que haya pasado, nurbanu es la mujer de mi vida, estaba seguro de ello, incluso sin recordar el pasado, así que simplemente me deje guiar por el sueño.

Todo estaba en blanco, era una habitación completamente blanca, gire a mi al rededor buscando algo que me hiciera saber dónde estaba o si había alguien más aquí, pero no era así, yo estaba solo.

- No quiero nada de ti, ni tus regalos, ni tus halagos, ni tu atención, no quiero nada que venga de ti.

Voltee a la dirección donde escuché ese grito y pude ver a nurbanu completamente molesta gritando a una persona.

Era ¿yo?

Derrepente todo ese escenario se volvió borroso y apareció otro.

-Estuve pensando en algo.
- En mi, ya lo sé - sonreía divertida.
- Tiene algo que ver - respondí
- ¿Que es? - preguntó
- Un nombre.
- ¿Un nombre?
- Nurbanu, significa mujer radiante.
- Es un significado muy hermoso - me sonreía
- ¿Te gusta?
- Me gusta mucho.
- Entonces desde ahora eres nurbanu - deje un beso en su frente con una sonrisa.

¿Entonces antes también solo sonreír asi?

-Me importa muy poco que seas el sultan - ahora veía a una nurbanu molesta mientras cruzaba los brazos- si vez a otra mujer que no sea yo será mejor que te olvides de mi.

Sonreí sin poder evitarlo, ella siempre fue así.

-Confía en mi, nunca me iré.

Ella había cumplido esa promesa, incluso cuando fui la peor persona son ella, ella se quedó aquí, incluso cuando la bote de lo que ella consideraba su hogar siguió para mí y cuando volvió, estuvo para mi aunque se haya querido alejar.

Desperté agitado.

Estaba soñando.

Mire a mi lado, nurbanu seguía ahí, con su cabello completamente desordenado y con algunos mechones tapando su cara, acerque mi mano algo temblorosa para quitar esos mechones.

- Perdóname - fue lo único que pude murmurar.

¿Que más podía decirle?

Esta mujer siempre ha estado para mí, y yo simplemente la olvidé y me rehúse a confiar en ella, ella creyó en mi, incluso cuando yo dejé de hacerlo.

¿Cómo no amar a esta mujer?

No, definitivamente ella siempre sería la mujer que amo, pudo lograr algo conmigo incluso cuando ya no la recordaba, estoy seguro que, no importa cuántas veces pierda la memoria, yo siempre regresaré a dónde nurbanu y solo por una razón.

Ella es mi hogar.

Mi lugar seguro, el lugar donde no importa que pase, siempre estará esperando por mi.