Pacto hostil [ESCRIBIENDO]

Cap 9 Compórtate

Al fin, llegó el día de Halloween. El día en el que puedo huir y ser finalmente libre de esta pocilga mágica, aunque por alguna extraña razón, me siento inseguro a cerca de ello. Quizá sea por los nervios de poder marcharme finalmente y no volver jamás? Es probable que lo logre, aunque primero, debo tomar el colgante e irme hacia Viloy de nuevo con mi manada.

-Sí, todo va bien por aquí.-

Instintivamente levanto el cuerpo y me dirijo rápidamente hacia la dulce voz de Katie. Y aunque la puerta se encuentre cerrada no tardo ni un segundo en empezar rasguñarla hasta que finalmente se abre rápidamente, dejando paso a la famosa y conocida Katie con cara de pocos amigos.

Toma el pellejo de mi cuello con rapidez y me deja pasar antes de volver a cerrar la puerta.

-El perro quería entrar, perdona.- vuelve a contestar al teléfono sin dirigirme ni una sola mirada al entrar.

Durante toda la llamada, le dirijo miradas discretas de reojo a Katie al ver como no deja de sonreír, desviando la mirada de un lado a otro de la habitación sin rumbo.

¿Con quién habla?

-Esta noche nos vemos, y no olvides traer la bebida que te pedí.- añade risueña achicando sus ojos.

Ella es la perfecta demostración de una moneda de dos caras...

Varias risas más tarde, el rostro de Katie parece ensombrecerse.

-No estoy segura...- musita entrecortada

Levanta su menudo cuerpo de la cama y ojea dentro del cajón que hay al lado de su cama con el móvil en su mano, aunque parece que no encuentra lo que buscaba.

-Solo trae uno.- dice molesta mirándome de reojo.

Ella cede con la cabeza lentamente, volviendo a desviar la mirada de mí.

¿Qué tramas?

En silencio, se levanta de la cama mientras veo como se acerca directa hacía aquí.

-Esta noche no quiero oír ni una palabra.-

-¿Cuándo venga tu novio?- digo rodeándola sin percatarme de ello.

-No es mi novio.-niega siguiéndome con la mirada-Solo estamos de lío por un tiempo.-

Extrañamente siento como mi corazón se oprime, deteniendo a la vez mi propio cuerpo al escuchar esas palabras.

¿Qué me ocurre? Solo han sido un par de palabras, pero acaban de prender mi pecho.

-Oye.-

Chasquea sus dedos un par de veces antes de volver a la realidad. Pero de repente se detiene al encontrarse con mi mirada, abriendo los ojos de par en par como nunca antes.

-Espera...- musita cubriendo sus labios.

Cada día tengo mucho más claro que está chalada y perturbada a la misma vez.

-¿A caso acabas de sentirte celoso?- añade antes de empezar a reírse.

Doy un ligero paso hacia atrás y me percato como en sus ojos hay un tenue destello que es visible aunque se cubra su rostro entre carcajadas, parecido a una piedra preciosa y brillante escondida en una cueva oscura y sin ninguna luz adyacente.

No, debo negar cualquier tipo de atracción o sentimiento. Yo la odio.

-No.- gruño por lo bajo.

Escucho como vuelve a reírse como nunca antes y no puedo evitar mirar cómo se asemeja a una chica completamente distinta.