La vida de Madeline da un giro de 180° grados en cuanto aquella pregunta llega a sus oídos:
¿Cómo sería su chico ideal?
La vida Logan da una vuelta completa cuando se reencuentra con esa chica que parece no recordarlo. Pero incluso las mejores perso...
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Mi rostro se calentó de sobremanera, mis manos temblaron al igual que mi boca que intentaba soltar alguna palabra, pero todo fue en vano. Mi corazón amenazaba con saltar de mi pecho en cualquier instante, seguía encima de Logan y nuestros rostros estaban a solo escasos centímetros al igual que nuestros labios que literalmente estaban por rozarse.
Él estaba igual que yo o incluso peor, pero pasaron tan solo unos minutos para que después sus ojos se dirigieran a mis labios.
En ese instante sentí como alguien o algo muy pesado me cayó encima, sacando el aire y haciéndome ir hacia adelante. Provocando que mi frente chocará con la de Logan de manera abrupta.
Dios debe odiarme.
—¡Qué cabezazo! —exclamó Myleen con emoción, riéndose fuertemente con su dulce voz de niña pequeña de nosotros. Logan, quien se quejaba del dolor, pasaba su mano sobre la zona afectada.
Es la viva imagen del diablo, no tardará mucho hasta que ese pequeño demonio reine sobre el inframundo.
—¡Myleen! —gruñó Logan adolorido.
—Se le sumió la mollera —dice la pequeña encogiéndose de hombros, levantándose de mi espalda de una manera brusca, para nada considerada.
Pequeño engendro del mal, en cuanto mi espalda dejé de matarme juro que te tiraré al agua bendita.
Logan se sentó aún adolorido al igual que yo, ayudándome a levantarme riendo por lo bajo. Seguía sobando su frente que seguramente le dolía hasta el alma, pero mostraba una sonrisa y fuera de enojarse se reía por lo bajo ante la situación. Le sonreí.
Pero por dentro quería llorar y vengarme de aquella pequeña niña. Te maldigo por todo Abdiel, definitivamente son hermanos.
Me quedará un chipote enorme, parecerá que me salió un cuerno.
Me dirán el unicornio.
Casi un pequeño beso con Logan, con el niño poético, ¿pueden creerlo? Yo no. Pero no creí que terminaría con un gran cabezazo, que sorpresa y que dolor.
Aunque no sé si sea bueno o malo, una parte de mí está feliz y otra está muy decepcionada.
La niña corrió con sus pequeñas piernas hacia la cama de Logan, donde se tiró contra el colchón, rebotando sobre él hasta quedar sin ningún movimiento aparente.
Para después pararse sobre el colchón y comenzar a saltar.
Al menos se divierte, aunque mi mala suerte definitivamente me acompañará hasta el día de mi muerte.
Logan se veía cansado y creo que es normal pues ha estado acompañado a Leonel y seguramente tuvo que ponerse al corriente con todas sus actividades. Se recargó en la pared a un lado de la puerta, para después dejarse arrastrar hasta caer al suelo, pasando su mano por su cabello húmedo y desordenado. ¿Me permitiría tocarlo? No creo.
