Oscuridad ~ Hoffman #4

CAPITULO 6

Jasmine

«—Será la mejor noche de tu vida — susurra sobre mis labios, y entonces yo me río, tiene que ser una jodida broma, no he tenido noches buenas y seguramente me gane un castigo por estar aquí hoy

No debería estar aquí, debería estar en mis clases de inglés, pero no, estoy en una fiesta de disfraces, porque Ximena me convenció, dijo que sería divertido que me escapara de papá y viniera

Suspiro, lamiendo mis labios y veo al hombre que está sobre mi, debe estar sobre los 20 y no se porque estoy haciendo esto, pero llegó a mi como un deseo, lo ví a penas llegué, estaba disfrazado de diablo, algo cliché, pero sus ojos estaban rojos, seguramente por los lentes de contacto

Nuestras miradas conectaron de inmediato, y así transcurrió toda la maldita noche, hasta terminar aquí, con el sobre mi, quitando mi disfraz de Kim Possible, —ya que no se me ocurrió algo mejor,—y besando mi cuello, senos y dejando pequeñas marcas sobre mi piel

Jadeo cuando aparta la tela que hace parte del disfraz y protege mi trasero y su mano entra en contacto con mi piel, ahogo un gemido y separó un poco más las piernas, sigo repitiendo que no debería estar haciendo esto, pero aún así dejo que quite mi ropa pieza por pieza y baje dejando pequeños besos por mi piel hasta llegar a mi intimidad

Separó más las piernas y agarro su cabello sedoso que se escurre entre mis dedos, gimiendo cuando pega su boca a mi sexo, y no importa el castigo, los gritos y lo que vendrá después de hoy, porque ahora solo me interesa llegar al orgasmo en la lengua de alguien más, alguien desconocido que hoy se llevará mi primera vez»

* * *

Separó los labios, respirando el mismo aire de Aubrey Hoffman ya que está sobre mi, levanto la vista, sus ojos avellana me transmiten tanto en este momento que lo único que quiero es que termine la distancia que nos separa y me bese de una buena vez

Pero en vez de eso, pasa el cinturón de seguridad por mi cuerpo y regresa a su asiento, haciendo que su aroma se pierda, noto el problema que tiene y trago en seco, relamiendo mis labios, necesito que lo haga

No es como un capricho, es más bien una necesidad

Necesito que me folle antes de poder regresar a casa y recibir el castigo, necesito sentir algo diferente a las pocas experiencias sexuales que he tenido y no quiero que cuando llegue a casa sea un día perdido, y pueda tener algo más en mente que lo que mi padre me obligará a hacer

Aparto la vista con las mejillas rojas de su creciente erección, pensando, necesito hacer que me folle tal vez si lo provocó o no se, suspiro viendo la carretera que acorta el camino de regreso y me renuevo ansiosa en el asiento

No quiero llegar a casa, no aún, al menos quiero tener una noche fuera, como fue hace 4 años que me escape, el castigo fue brutal pero tan divertido, que no me importo, quiero eso hoy, quiero un día de libertad

—Señor Hoffman — hablo, tomando una valentía que se que no tengo, mientras mis mejillas se calientan y atraigo la atención del hombre que conduce viéndose cómo un dios y no un simple mortal, seguramente no es de este mundo

Seguramente hizo un pacto con el diablo y por eso tiene esa figura, suspiro

»—Quiero pedirle algo que seguramente no tiene lógica, ni sentido... — trago en seco arrepintiendo me de inmediato, estoy loca, solo lo he visto hoy, hace algunas horas, no puedo pedirle abiertamente que me folle, no puedo hacerlo

Aún cuando es necesario que lo haga, tamborileo los dedos sobre mi rodilla, infli mis mejillas tratando de evadir el tema pero el bufa y se que debo darle una respuesta pero ya no quiero hacerlo

—¿Que quieres niña? — rumia, entorno los ojos y lo veo indignada olvidando por completo el tema que ha surgido, cosa que agradezco

—No soy una niña — expreso levantando la voz un decibel para resaltar el punto, pero seguramente quedó como estúpida ya que da el efecto contrario y el aprieta los labios con burla

—Si lo eres, eres una niña malcriada — ya no hay hastío en su voz solo burla, igual que sus ojos avellana que brillan burlándose de mi lo que me hace enfurecer

—¡Que no lo soy...! — mi retahíla queda a medias cuando el vuelve a preguntar que quiero, y entonces los colores abandonan mi rostro sin querer volver a ese tema pero con el mal desbordándose de mi piel ya no quiero nada — ya nada, olvídalo es una estupidez

Me olvidó del formalismo y demás, ahora solo me resigno a llegar a casa pero con mal humor porque el idiota que tengo al lado me pone los pelos de punta, pero de mal humor y rabia

—Dime que quieres

Suelto una risita al escuchar el tono que usa y el me queda viendo fijamente ante eso

—Su reputación lo antecede señor Hoffman — murmuró despacio para que me escuche bien — pero no le tengo miedo al diablo

Enarca una ceja y sonríe de lado, viéndose siniestro ante esta mortal, pero igual no me amedrentó, me mantengo impasible y lo veo de lado 

—No has ido al infierno a averiguarlo

He estado allá muchas veces

»—No me cambies el tema, ¿Que es lo que quieres niña malcriada?

Gruño y suspiro

—Quiero que me folles

El auto vira violentamente tras esas palabras, Aubrey Hoffman evade varios autos con satisfacción antes de frenar en seco a un lado de la carretera, mi cabeza cuelga un momento para girarme a verlo con los ojos entre cerrados

No sé que mierda paso, pero se que sin duda se esperaba eso, ya que traga en seco y se gira a verme, sus pupilas están dilatadas y su nariz ensachada, bajo la vista hacia su erección y está tensa, muy tensa

Tal vez también tiene ganas de follarme cómo yo lo quiero aún cuando lo mío también es necesidad, mi respiración empieza a acelerarse sin saber que decir o pensar, tal vez piense que estoy loca...

»—Te dije que era estúpido... — no puedo terminar de hablar ya que en segundos está sobre mi, su respiración mezclando se con la mía

Puedo apreciar mejor sus expresiones, las facciones que lo hacen jodidamente irresistible, se relame los labios antes de sonreír de lado, de nuevo tan siniestro que podría hacerme temblar si no estuviera imaginando que pasaría si me besara de una buena vez

—¿Estás segura de lo que pides, niña malcriada? — aún cuando no se la respuesta a esa pregunta, muevo la cabeza una sola vez en señal de asentimiento — le vas a entregar tu alma al diablo

Susurra y no entiendo lo que dice pero sigo asintiendo embelesada por su cercanía, repasa con su lengua mis labios, abro la boca buscando el contacto de los suyos pero vuelve a alejarse y ponerse el cinturón, no quita sonrisa mientras vuelve a poner el auto en marcha mientras susurra en holandés:

—Nou welkom in de hel, verwend meisje — mis piernas se cierran en automático mientras las ganas aumentan en el centro de mi vientre

:Nou welkom in de hel, verwend meisje: Bienvenida al infierno, niña malcriada