єℓ ѕeхy тєяαρєυтα {נυѕтιивιєвєя&тυ} єяóтιcα

Capítulo 20 ; "Todo saldrá bien, princesa"

Los ojos de ____________ se abrieron lentamente acostumbrándose a la poca luz que se filtraba por la ventana, por entre las cortinas. Gimiendo y estirando su cuerpo de una manera dificultosa, se apretó al cuerpo de Justin quién suspiró abrazándola fuertemente contra su pecho.

No se podía imaginar en otro lugar que no fuera este.

A su lado, en sus brazos.

Tenerlo cerca suyo provocaba una electricidad que no le dañaba, es más, le hacia sentir más viva. Tener sus brazos rodeándole le hacia sentir segura y confiada. Sentir su aroma le hacia sonreír como estúpida, le encantaba. Su respiración en su nuca y sentir su palpitar le ponía nerviosa, le hacia sentir que sólo era suyo, nada más que suyo.

Pero... sus besos, sus besos eran como una droga a la cual estaba adicta y no quería una cura para eso, le encantaban, nunca se cansaría de besarlo. Son muy diferentes, sí, pero se complementan, o por lo menos, él le complementa. Y no se puede imaginar en otro lugar que no fuese este, con él.

Depositó un beso sobre su cuello y él de inmediato abrió los ojos, observándola.

Ella sonrió, sabiendo lo que hoy sobrepasarían, hace dos días atrás llamó a Jack para que le concedieran sus servicios, que eran super importantes y que deberían quedar lo antes posible. Antes de que las pequeñas vacaciones que se había tomado Justin acabaran.

Justin giró en la cama y depositó un casto beso en sus labios, haciéndola sonreír.

-Buenos días princesa.

Habló con esa voz ronca que a ella le excitaba tanto.

-Buenos días príncipe. -contestó volviéndolo a besar de manera dulce.

Sueve y tierno.

Porque con la persona adecuada, los besos tienen a veces poder curativo.

-Me encantan tus besos. -comentó Justin besándola repetidas veces, haciéndola reír.

-Qué idiota. -contestó sorprendiéndolo. -Me encantas. -acabó diciendo, provocando que una leve sonrisa apareciera en la comisura de sus labios.

-¿Sabes? Tengo ganas de darte un beso en los labios, y después te quiero besar en la boca.

Ella abrió la boca sorprendida, por el descaro de Justin y giró su cuerpo hasta esconder su cara entre las almohadas, dejando expuesto su trasero completamente desnudo, sin ser tapado, nada más que la sabana blanca que Justin retiró poco a poco de su cuerpo.

Se mordió el labio reteniendo las ganas de tocarla, pero realmente no podía apartar las manos de su cuerpo y verla disfrutar bajo su cuerpo, oírla gemir su nombre repetidas veces en su oído, excitándolo de una manera sobrenatural.

Posó su mano sobre la espalda de la chica y fue descendiendo lentamente sintiendo como se estremecía ante su toque y se le ponía los pelos como escarpias. Bajó su mano hasta hallar su trasero, ahuecándolo en su mano se excitó al momento de escuchar un gemido de su parte. Pero no escuchó un "Para" o un "No" para poder seguir en su trabajo de satisfacerla, a su manera.