El chico del apartamento 512 •||| YeonBin |||

Episodio 14.

—... ¿Les puedo contar un secreto?

Lea cortó el silencio haciendo que su voz resonara en las cuatro paredes de la amplia e inanimada primer planta de la preparatoria donde estudiaban; era el mismo jueves por la tarde, las clases del grupo 1-A habían terminado hace un par de minutos atrás y en ese instante ya no quedaban más alumnos por los pasillos pero sí quedaban aún un par de grupos en clases ya que los horarios variaban para todos, entre esos grupos estaba el 1-D.

Chaewon cerró con llave su casillero luego de haberse cambiado sus zapatillas escolares por sus zapatos comunes para centrar su atención en su amiga mestiza mientras comenzaban su camino hacia las afueras de las instalaciones, Eunha por su lado iba entretenida con su celular dividiendo su atención entre el dispositivo y la pelinegro mientras chupaba una paleta Lollipops sabor fresa.

—¿Secreto de qué? Creí que ya lo sabíamos todo la una de la otra... —el entrecejo de la menor de las tres, Chaewon, se frunció sintiendo curiosidad— ¿Es algo malo?

—Hmm, yo no diría que es algo “malo”, aunque bueno... pensándolo bien sí es malo, al menos para tí Won —rió desganada rascando su rostro con su dedo índice.

—Bueno cuenta de una vez que me estás poniendo ansiosa, mujer.

—¡Si, sí, cuéntanos! Ya hasta me hiciste perder en mi juego~ —se quejó en una rabieta de niña pequeña, irónicamente Eunha era la mayor de las tres.

—Bueno... ¿Qué dirías si te dijera que a alguien más le gusta Yeonjun?... —inquirió, por alguna razón sentía un poco de culpabilidad en ese momento.

—¿A alguien más? ¿A quién? Espera... ¡No me digas que te gusta, Lea! ¡No seas roba novios! —con ambas manos tomó el rostro de la aludida presionando las mejillas de esta.

—¡N-no hablo de mí, tonta! —como pudo se soltó del agarre ajeno sobándose el rostro— me refiero a... alguien más.

—¿Pero quién? Bueno eso no importa supongo, sea quien sea no me pienso rendir con Yeonjun oppa —altanera infló su pecho en señal decidida.

—Uy, ojalá hablaras así de confianzuda cuando estés frente a él, nada más lo ves y te haces piedra —habló entre dientes la mayor soltando una risa burlona por su amiga.

—Tú cállate; aún me pregunto cómo alguien pudo enamorarse de alguien como tú —chasqueó la lengua entornando la mirada ignorando a la mayor.

—Si hablas de esta belleza obvio que cualquiera cae a mis pies —fingió sacudir un polvo inexistente en sus hombros ganándose que la menor le sacara la lengua en queja— ¿Jefa Lea, ya viste lo que me hizo? ¡Me sacó la lengua!

—Ya, ya, que tú la andas provocando también; en fin, volviendo a lo que les quiero contar, Won... necesito que sepas que ahora mismo estoy con la mente dividida porque no sé a quién de los dos apoyar~

—¿Hmm? ¿Osea que eres cercana a la otra persona que quiere también a Yeonjun oppa?

—No solo soy cercana... ¡Es de mi familia~! Dime, ¿Qué hago? No quiero traicionar a ninguno de los dos pero también quiero ayudarles...

—¿De tu familia? Espérate... ¿¡Le gusta a Hiyyih!?

—¿Qué? ¡No! Mi bebé está muy chiquita para él —negó mil veces sintiéndose incómoda con la imagen mental.

—¿Entonces qui-?

—¡Es Kai! —interrumpió soltando por fin la verdad— es Kai, ¿¡Ok!?

Ambas detuvieron en seco su andar quedando sin palabras ante tal confesión de su mejor amiga, honestamente no sabían cómo reaccionar o qué contestar ante aquello, ¿De verdad el hermano menor de su amiga sentía lo mismo que ella sentía por Yeonjun? ¿El hermano menor de Lea veía a su adorado Yeonjun con los mismos ojos que ella lo veía? ¿Acaso él también sentía que su corazón latía a un millón de latidos por minuto? ¿Él también se quedaba estático como piedra sintiendo su rostro arder cada vez que estaban cerca? No lo quería aceptar, no quería aceptar que aquel sentir fuera compartido, no quería aceptar que ella no era la única, que aquel sentimiento no fuese único, que no fuese solo de ella sino también de alguien más de algún modo u otro le hacía sentir... inútil.