Capítulo 30.

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Derek

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Derek.

En mi opinión, es tan importante reencontrarte con tu pasado para disfrutar tu presente. Por eso mismo Stiles y yo habíamos tratado de contactarnos con Talbot, claro que pensamos que sería difícil... Después de todo nuestro gran "amigo" McCall había arruinado todo la última vez.

Unas semanas estuvimos sin respuesta,
En ese tiempo Stiles y yo, simplemente seguimos conociendonos... Aprendí que nunca terminas de conocer a alguien, comenzamos a realizar trámites para transferir a Stiles a alguna universidad de Canadá, Lakehead específicamente. Y si todo salía bien, en algunas semanas viajaríamos a Europa.

Noah intentó ponernos en contacto con el pero no había respuesta, no estoy seguro si Talbot nos está evitando... Quizá está asustado, yo lo estoy. Después de todo ¿Cómo una persona Senil con síndrome estrés postraumático podría entender que reencarnamos?

Aunque a veces pienso que tengo tanta suerte.

- Hey, ¿ese no es Talbot? - me preguntó Stiles mientras comíamos helado en el parque.

- Huele a él, supongo que si. - musité y me levanté de mi asiento.

- ¿Huele a viejito? - preguntó mi castaño.

- Tú respeta. - exclamé riendo mientras le di un golpecito en la parte trasera de su cabeza.

Nos acercamos lentamente al sargento, cuidamos que nuestros pasos fueran silencioso... Si, se que tomarlo por sorpresa no es la mejor idea pero las opciones se nos estaban acabando. ¿Qué tal si se moría mañana?

Entonces su maldito perro comenzó a ladrar.

- Derek, gruñele o ladrale para que se calle. - dijo Mica riendo.

- Que no soy un perro. - gruñí y esto solo hizo reír más a Stiles.

Entonces el sargento se dio la vuelta, nos miro con la boca abierta y comenzó a apresurarse lo más rápido posible tomando impulso de su bastón.

- No va muy rápido, ¿Deberíamos decirle que no se ha movido ni cinco metros? - preguntó Stiles entre susurros.

- De verdad que tienes que aprender a respetar a los mayores. - giré los ojos y caminé hasta estar frente a Talbot.

Talbot se detuvo cuando me interpuse en su camino, no estoy orgulloso de perturbar la paz de este señor pero necesito respuestas.

- No es real, no es real... Tu solo estás viendo cosas por tu demencia senil. - musitó Talbot, intentando calmarse.

Entonces vino a mi mente... ¿Cómo demonios iba a plantearle que hemos reencarnado? No tenía ni una maldita idea, no sabía ni que decir así que solo me quedé quieto, observando al veterano de guerra.

- Tiene razón, no somos reales señor Talbot... Solo somos parte de su mente, y hay una manera en la cual usted puede librarse de nosotros... Debe liberar su mente. - Se adelantó a decir Stiles.

𝐓𝐞 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐞́ 𝐞𝐧 1945. | 𝐒𝐭𝐞𝐫𝐞𝐤 |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora