Historia finalizada. 📍
Derek Hale y Stiles Stilinski tenían una vida relativamente normal hasta el día que se vieron en el bosque, pues creían ya haberse conocido. A partir de ese momento señales comienzan a aparecer, recuerdos que no han vivido, s...
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Derek es liberado de la custodia, han pasado algunos días y no se ha encontrado nuevamente con el castaño. Es de noche y sabe que Kate Argent ha regresado a Beacon Hills. Por alguna extraña razón se encuentra escapando pero no ha sido suficiente, le han disparado en el brazo.
Solo Scott sabe que tiene el tiempo contado, escuchó a Kate Argent mencionar que a lo mucho tenía 48 horas. Asume que Derek sabrá cómo tratarse. Pasa el siguiente día. El moreno se encuentra en la escuela donde Stiles y Scott estudian, pide ayuda a Scott quien ahora deberá encontrar una bala de aconito para que pueda sanar. Mientras tanto detienen el tráfico y deciden que suba al Jeep de Stiles.
"Necesito más tiempo" el castaño Lee el texto que Scott envió y arroja su teléfono - Maldición... Oye intenta no desangrarte en mi asiento ¿Quieres? Ya casi llegamos. - responde un angustiado castaño, a primera vista se creería que es insensible, pero está atemorizado y esta es la única manera que encuentra de mantener la calma.
- ¿A dónde? - pregunta débilmente el lobo.
- A tu casa. - contesta con obviedad.
- No, no puedes llevarme a mi casa. - contesta el moreno.
- ¿A qué te refieres con que no puedo llevarte a tu casa? - Stiles grita agitado.
- No puedo protegerme. - responde el ojiverde.
Esas últimas palabras terminan por apuñalar el corazón del castaño, por alguna razón le duele ver a este hombre que se bufa de su inteligencia tan débil, no le gusta pensar que podría morir y entonces estaciona el auto.
Hay una pequeña discusión, el castaño le pregunta sobre que sucederá si la bala "mágica" no es encontrada, el moreno responde que tiene un último recurso. Segundos después el moreno enseña si herida y Stiles la encuentra repulsiva y se lo hace saber a su copiloto. Derek solo le ordena que encienda el auto.
- Escucha no creo que debas estar dando órdenes así como te ves ¿Sí?, de hecho si quisiera podría dejar tu trasero de hombre lobo a la mitad del camino y dejarte morir. - amenaza Stiles, pero solo es un pretexto para poder observar esos boscosos ojos.
- Enciende el auto, o te abriré la garganta... Con mis dientes. - no se diga más, para Stiles eso sonó sensual pero no lo diría, menos en una situación así. Enciende el auto y retoman el camino.
Aún es temprano, Stiles enciende la radio... Es la misma estación que Derek escuchaba el otro día. Se anunciaba una canción de 1945 e inmediatamente Derek cambia de estación. Ambos se miran fijamente y se preguntan si tiene algo que ver con el número que los atormenta, pero ninguno dice nada.
- No eres un gran fan de los clásicos ¿Cierto? - intenta iniciar una conversación el menor.
- No de los de 1945. - responde Derek y Stiles no puede evitar pensar "Ya déjame en paz número demoníaco".
