Capitulo 27

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Capítulo 27. Templo del Lobo en un Moutian.

Maestro de la Legión de los Guerreros de Hierro, Elyphis Diorius
836.M30

Xyat

Bueno, había tenido muchas ideas sobre esta campaña cuando comenzó, especialmente sobre las pérdidas que podríamos tener y hasta ahora lo estábamos haciendo absolutamente mejor de lo que esperaba. Y tuve que admitir que estaba un poco equivocado acerca de mis suposiciones sobre la Fuga y su nuevo Primarca.

Por supuesto, el estándar que Horus había establecido no había sido muy bueno. Oh, su llegada al campo de batalla había aumentado el número de lobos lunares hasta el punto de que podían operar en múltiples frentes e impulsar la cruzada... Pero su habilidad táctica había faltado en los primeros días. Sin mencionar que no era propenso a dar crédito, lo cual, bueno... No me sentó bien, de hecho me había molestado bastante.

Pero dejé pasar eso lo mejor que pude y necesitaba concentrarme en el Primarca en cuestión hoy, Tanya Russ. Cuando llegó, yo había estado más que dispuesto a dejar que llevara su legión a la Rueda de Fuego y la desperdiciara allí. Después de todo, con un Primarca, la sexta legión podría reponer sus pérdidas, mientras que mi legión, la cuarta, no podría. No estaba realmente interesado en ser recordado como el primer maestro de la legión que destruyó su legión. Todavía no había sucedido , pero había habido llamadas cercanas.

Sin embargo, admito que este Primarca no solo era bueno en su trabajo y entendió los asuntos militares desde el comienzo de esta campaña, sino que también tenía una mejor comprensión de los asuntos no militares que... bueno, yo. Después de que los esclavos fueran rescatados, habían sido devueltos a los diversos sistemas de este sector del espacio. Esto había creado una situación interesante en la que los sectores locales ahora ofrecían el apoyo que le habrían dado a los Orkos. De acuerdo, no era un apoyo muy avanzado, pero las reservas de alimentos ahora eran bastante altas y también se ofrecía un poco de producción de minerales a las personas que envié, que se dirigían al Administratum y al Mechanicus para que se ocuparan.

Esos suministros de alimentos nos ayudaron a apoyar los esfuerzos del ejército imperial para mantener los planetas después de que termináramos de limpiarlos, lo que nos permitió continuar con la campaña contra el siguiente planeta en la línea. Ese planeta había sido una operación bastante fácil ya que la mayoría de las fortificaciones habían estado en el planeta antes de eso, Icrinda.

Todo lo que teníamos que hacer era destruir la infraestructura, aislar las fortificaciones entre sí y luego bombardearlas desde la órbita.

Ni siquiera había grandes poblaciones de esclavos de las que preocuparnos, todo lo que teníamos que hacer era matar Orkos y habíamos matado a muchos Orkos. Pero mientras hacíamos eso, los Lobos de Fenris y su Primarca habían encontrado una grieta en las tormentas de Disformidad que mantenía este sector bastante aislado del espacio normal y habían asediado otro planeta Orko con los enanos.

Los informes de los observadores que envié con ellos indicaban que estaban comprendiendo nuestras tácticas de asedio y que rápidamente habían podido derrotar a la base de guerra Orka en ese planeta y ahora comenzaban a dispersarse con el plan general de atacar a la serpiente. hasta que murió en lugar de ir por la cabeza ya que los hombres necesitaban más entrenamiento.

Por un lado me gustó que ya estaban más adelantados en la Rueda de Fuego, por otro había descubierto el sector y se estaban llevando mucho crédito con su conquista.

The Saga of the Runt (Youjo Senki WH30k) Where stories live. Discover now