Capitulo 24

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Capítulo 24, Juegos de lobos

tania russ

Mirando por la ventana o la pantalla... Todavía necesitaba investigar los detalles de cómo hacían visible el exterior dentro de naves como estas. Aunque hacer preguntas estúpidas no era algo que quisiera hacer en mi opinión. Después de todo, vengo de un mundo de estilo medieval, empiezo a hacer preguntas como '¿es de vidrio o no?' podría tomarse como si implicara que usted no era tan inteligente como su cerebro primario debería permitirle ser. Por el momento, solo estaba apostando a que debían ser pantallas LCD de algún tipo hasta que encontré alguna forma de determinar lo que realmente estaba sucediendo sin parecer molesto.

De todos modos, volviendo al tema principal, estaba mirando por la ventana una colección de naves disecadas y que apenas funcionaban que podrían describirse mejor como de alguna manera traídas a la vida por la voluntad de la cinta adhesiva.

Los Star Hunters Pathfinders habían rastreado a los Orkos a través de un pasaje lateral hacia la Rueda de Fuego e informaron a mi flota dónde estaba este lugar, desde allí iría a trabajar moviendo mi flota a este lugar, así como elementos del Militarum auxiliar y el Se pone en cuclillas la fuerza expedicionaria.

Desde allí habíamos entrado en esta grieta en la barrera que separaba la Rueda de Fuego del resto de la galaxia y nos habíamos encontrado sobre uno de los muchos mundos fortaleza que componían este imperio Orko. Un planeta realmente feo, parecía estar cubierto en su mayoría por afloramientos rocosos o selvas. También había algunos de lo que tendría que suponer que eran ciudades orkas y recintos de esclavistas, probablemente solo para recolectar chatarra, considerando que parecían adorar la cinta adhesiva como si fuera la cura para todas las enfermedades conocidas.

Tendríamos que abrirnos camino a través de la flota antes de comenzar las operaciones de aterrizaje y, bueno, quemar el planeta lo mejor que pudiéramos nuevamente. Había civiles allí abajo y, aunque vi la lógica en simplemente bombardear el planeta, si pudiéramos realizar operaciones para sacar a esos civiles, obtendríamos el crédito de las civilizaciones locales. Sí, la mayoría de ellos eran reinos feudales que estaban al nivel de Russ o peor, pero en mi opinión, le iría muy bien a la imagen del Imperio.

Después de todo, las guerras se pelean en el campo de batalla pero se ganan en casa. Ser capaz de ver que estabas haciendo el bien, no solo para las personas que podían aliarse contigo, sino también para tu propia gente, mejoró la moral de las personas. Esa moral mejorada significó que más recursos llegarían al frente, lo que resultó en un pequeño y agradable ciclo repetitivo de 'cuantos más recursos llegan al frente, mejores operaciones van allí, por lo que la moral sube'. Así sucesivamente hasta reclamar la victoria.

Mientras reflexionaba sobre eso, nuestra flota ya estaba comenzando a moverse en posición para comenzar el combate con la flota Orka. El de aquí no estaba tan bien abastecido como el que estaba cerca de la conocida entrada a la Rueda de Fuego, que era bueno. Menos barcos de combate significaban menos bajas, esperaba. Simplemente necesitábamos asegurarnos de que tuviéramos una pelea exitosa aquí hoy y tenía la sensación de que iría bien. El hecho era que, con probabilidades de dos a uno a nuestro favor y teniendo barcos más grandes que ellos, podía decir con relativa seguridad que íbamos a ganar esto.

Y una vez que tuviéramos la seguridad del espacio sobre el planeta, sería fácil ponerse a trabajar limpiando el planeta de abajo.

No solo eso, nuestra entrada a la Rueda de Fuego aquí sacaría naves de la entrada 'oficial' para tratar de asegurarnos sus propios planetas. Esto haría que el frente se debilitara lo suficiente como para que los Guerreros de Hierro pudieran avanzar y comenzar a asediar el siguiente mundo fortaleza en la lista de mundos que custodiaban la entrada a la Rueda de Fuego.

The Saga of the Runt (Youjo Senki WH30k) Where stories live. Discover now