Capítulo Diecinueve

506 56 12
                                    

—¿Listo para parir a mis nietas? —preguntó James dándole un beso casto en la frente a Harry.

—Supongo que tendré que estarlo, ¿no? —le contestó Harry con un débil movimiento de sus labios.

—Sí, un poco tarde para echarte para atrás. ¿Listo para pujar en la siguiente contracción? —Harry asintió, tomando la mano de James mientras Sirius y Remus se movían para levantar sus muslos con Lily allí abajo, pero James estaba determinado a no mirar y en su lugar puso un encantamiento enfriador en la frente de Harry, manteniendo su cabello fuera de sus ojos. Harry sintió una mano en su estómago, después apretó la mano de James y pujó. De repente se sintió sofocado, se sintió atrapado y con pánico, sacudió la cabeza frenéticamente mientras trataba de respirar y hacer que todo parara.

—¿Harry? ¿Qué pasa? —le preguntó James.

—Déjenme ir... todos sólo... sólo paren y déjenme y... sólo... paren, sólo paren —el corazón de Harry estaba acelerado y de repente su cuerpo se sintió mucho más caliente, no se podía calmar adecuadamente. Todo se sentía apretado y pequeño y Harry sólo necesitaba espacio.

—¿Está mal algo? —preguntó Remus ahora.

—No, sólo... estoy bien, sólo necesito cinco minutos en los que no pase nada.

—Emm... ¿Harry? Literalmente tienes la cabeza de una bebé coronando, no te podemos dar cinco minutos —le dijo Sirius.

—Sí, Sirius, lo sé, puedo sentirlo, ahora cállate antes de que te pateé o algo.

—No sería la primera vez, esta mañana fui abusado —murmuró, ganándose una mirada que le lanzaba dagas de Harry y Remus.

—Síguele y tampoco va a ser la última —le dijo Remus mientras sobaba el hombro de Harry—. Harry, en serio tenemos que sacar esas bebés.

—Lo sé, sólo... no me gusta esto. Es muy rápido y pronto y no es nada como lo habíamos planeado, y Charlie y Ariel ni siquiera están despiertos y van a despertarse con sobrinas y es un desastre y lo odio porque no lo puedo arreglar.

—Harry, no necesitas arreglarlo, sólo necesitas enfocarte en las bebés y en ti mismo y en descansar, estará bien. Vamos, de verdad no queremos retrasar esto —Harry asintió, tomando la mano de James otra vez mientras todos regresaban a sus posiciones. James hizo lo mejor que pudo para no ver nada debajo de la cintura de Harry mientras presionaba una toalla húmeda y fría a su frente.

—Está bien. Puja en la siguiente contracción ¿okey? —Harry asintió y unos segundo después pujo mientras su estómago estaba siendo apretado fuertemente.

—Ouch ouch ouch ouch ouch. Los odio. Los odio a todos —Harry no sabía si estaba gritando o susurrando. Le dolía, todo le dolía, había una sensación ardiente donde hacía mucha presión y estaba muy seguro de que había roto lo(s) dedo(s) de su papá.

—También te amamos. Un último empujón —Harry sacudió su cabeza, pero lo hizo de todos modos, encontrando fuerza para pujar de algún modo, y después una... cosa viscosa y cubierta de sangre fue puesta en su pecho. Las voces que lo rodeaban se volvieron borrosas mientras observaba la pequeña cosa que estaba llorando y era un poco asquerosa en realidad. Una manta fue envuelta alrededor de la bebé y la movieron a una mejor posición. Después Sirius estaba ahí, sonriendo ampliamente mientras sostenía a Harry y a la bebé.

—Mírala, es tan hermosa —Harry pensó que se veía más como una cosa descolorida y sangrienta en vez de una hermosa bebé, pero no lo dijo.

—Sí... hermosa —contestó observando la bebé en su pecho—. Pued...

La Verdad DescubiertaWhere stories live. Discover now