28. Momentos dulces.

208 29 0
                                    

Al despertarme, antes siquiera de recuperar toda mi consciencia, lo primero que veo es a Clay sin camiseta y con el pantalón desabrochado, caminando hacia mi. Puedo notar mis mejillas ponerse rojas y calentarse hasta poder hervir agua en segundos.

-------------------------------------------------------

-¿Que...?- pregunto confuso.

-Ya hemos terminado, me pongo la ropa y nos vamos a casa.

-¿Que ha pasado en lo que dormía? Antes no  estabas semi desnudo -me río nervioso.

-Es para una escena- se ríe.

-Ay, me perdí todo por dormir - me quejo mientras me estiró, él se pone la camiseta.

-Bueno...- susurra algo, pero no le escucho del todo.

-No he oí, ¿Que dijiste? - me levanto, para estar aún más cerca.

Él me ciñe la cintura con su brazo, pegándome a su pecho y me susurra al oído.

-Que, si quieres, te lo actuó de nuevo en mi casa- mi corazón se acelera y me pongo muy nervioso.

Ahogo un pequeño grito, me suelta y nos separamos, Clay se tapa la cara con una mano y mira hacia los lados.

-¿Vamos a por un café? Me han dicho que hay un puesto cerca - propone, alcanzo a ver un poco de sonrojo en sus mejillas, lo cual hace que sonría dulcemente sin darme cuenta.

-Vale- me vuelvo a agarrar de su brazo, porque aún sigo medio dormido.

Caminamos hasta la calle, buscamos el puesto y al encontrarlo, nos acercamos a este. Escucho muchos pasos rápidos, acercándose a nosotros, hago el amago de girarme, pero Clay me detiene y me pone la capucha.

Un grupo de periodistas nos rodean mientras pedimos los cafés, asciendo preguntas y tratando de grabarlo todo, me siento un poco acosado, así que trato de taparme, agarró mi capucha y la estiró para tapar lo máximo posible. Uno de ellos lo nota y me pone un micrófono casi en los labios, lo cual me asusta, comienza ha hacerme preguntas. Intento ignorarlo, pero me agobia mucho. La voz de Clay me devuelve a la realidad.

-¿Quieres un bollito relleno de nata? -pregunta mirándome con una sonrisa mientras me pasa mi café.

-Vale - susurro, él asiente y pone su mano izquierda sobre mi cabeza, sujetando la capucha, le doy un sorbo a mi bebida. De repente me siento mucho más tranquilo. Nos dan el bollo, Clay lo agarra con la misma mano que sujeta su café, y con la otra mano, agarra la mía y me guía hasta el coche. 

Llegamos a su coche, antes de entrar, él ahuyenta a los reporteros y entra. 

-Perdona por eso- suspira al sentarse a mi lado. 

-No pasa nada- me rio suavemente. 

-Toma tu bollito- dice dejándolo en mi regazo. - Ya te llevo a casa. ¿Has dormido bien?

-Sí, me he asustado cuando me he despertado.

-¿Te asusta verme desnudo? 

-Sí, un poco, no estoy acostumbrado a ver a tíos sin camiseta cuando estoy recién despierto. 

-¿Daisuke no duerme sin camiseta?- dejo de reírme y me pongo muy serio, me aclaro la garganta e intento hablar lo mas calmado posible.

-No, él duerme en pijama normalmente. 

-¿Ha pasado algo?- pregunta mirándome atento.

-Bueno, hemos terminado, por eso he cambiado de casa. 

 -Y... ¿Ha ido bien o mal?

-Bien, quiero decir, estuvimos de acuerdo y eso- dejo caer.

-Entonces... Ahora estas soltero- el silencio reina el coche, mi temperatura sube y puedo ver, a través del retrovisor, como mis mejillas se colorean de rojo. - ¿Eso quiere decir que si?- se ríe mientras alterna la mirada entre la carretera y yo. 

-¿Podemos hablar de otra cosa?- pregunto ligeramente alterado.

-Vale, vale- se ríe sonoramente. - ¿Sabes? Todavía es pronto, podríamos pasar un poco más de tiempo juntos. 

- ¿Qué quieres hacer?

-No sé. 

-Podríamos ver una película o algún capitulo de alguna serie. 

-¿Alguna serie que tengas a medias?-pregunta calmado.

-La tuya, me falta el último capítulo.

-¿Quieres que lo veamos?

-Vale.

Llegamos a casa, le sigo dándole sorbos a mi café hasta su departamento, mientras él se pone ropa cómoda, yo preparo la serie, luego se sienta a mi lado y comenzamos a verla.

Pasa el tiempo y nos vamos acomodando, acabo apoyado en su pecho mientras el deja su brazo sobre el respaldo del sofá detrás de mi. Casi al final del episodio, Tiago y Eret comienzan a besarse, las cosas escalan rápido y comienzan a quitarse la ropa, trago con dificultad y me centro en la respiración calmada de Clay, aunque me distraigo en cuanto escucho gemidos suaves, levanto la mirada y observo una escena un tanto subida de tono entre los dos personajes. 

Noto mi tripa dar un vuelvo, no se como reaccionar ante esta situación, disimuladamente miro a Clay. No noto incomodidad en su mirada, ni nada parecido, así que finjo estar tranquilo. El episodio se acaba.

-Eso ha estado bien- comenta. Me separo de su pecho y me siento correctamente. 

-Sí.

-Estas todo rojo- se ríe mirándome. 

Me tapo la cara, no sin antes golpear su pecho casi sin fuerza, me tumbo contra mi espalda. Escucho como continua riéndose, luego noto una presión sobre mi y un ligero ruido a ambos lados de mi cabeza, al separar las manos de mi cara, observo a Clay a escasos centímetros de mi, en un rápido reflejo vuelvo a tapar mi cara nervioso. 

-¿Qué pasa?

-¿Qué te pasa a ti? ¿Porqué estas tan cerca? - digo casi gritando.

-¿No quieres un beso? - susurra. Destapo un poco mi cara, él levanta su mano izquierda y aparta la mía, descubriendo la mitad de mi cara. Lentamente se acerca y deja un beso en la comisura de mis labios, no reacciono.

Clay repite esa acción unas cuantas veces más, hasta que reacciono, dándome la vuelta e intentando reptar hasta salir de entre sus brazos. Agarra mi brazo y tira de mi, hasta ponerme donde estaba.

-¿A donde vas?- pregunta confuso.

-Lejos- digo ahogando mis palabras en el sofá.

-Puedes decirme que pare, no me iba a enfadar.

-Lo sé.

-Haberlo hecho.

-¿Porque debería? - después de unos segundos, entiende lo que quiero decir. 

Pasa su mano levantando el cabello que cae sobre mi nuca para apartarlo, comienza a besar mi cuello, me dan escalofríos. 


Our little trip.Where stories live. Discover now