Our little trip.

26. Viaje al pasado.

Vuelvo con una pastilla en mis manos, una botella de agua y una manta grande, le doy la pastilla y la botella, mientras se la toma, le cubro con la manta.

-Estas listo para dormir- digo sonriente, en su expresión noto que quiere decir algo-. Dilo.

-Me falta el beso de "buenas noches"- susurra, me agacho, acerco mi cara a la suya y le dejo un beso en la frente, pero al separarme le veo tan cerca, con esa expresión tan dulce...

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-George...- murmura a centímetros de mi boca, su mirada alterna entre mis ojos y mis labios, como si me pidiese permiso, me separo.

-Buenas noches- digo antes de huir a mi cama, mi corazón esta muy acelerado y, por alguna extraña razón, noto ganas de llorar al ver a Daisuke plácidamente dormido, sin saber que he estado a nada de besar a Clay en su propia casa. 

Al pensarlo me siento sucio, como si le hubiese engañado con otra persona, aunque no lo haya hecho. Triste, me meto entre las sabanas, al notar los brazos de Dai rodeando mi cintura y acercando mi espalda a su pecho, se me crea un nudo en la garganta y muchas más ganas de llorar, se me escapa una pequeña lágrima, intento hacer el menor ruido posible. 

 Solo tengo una cosa clara, tengo que hablar seriamente con Daisuke sobre nuestra relación.

A la mañana siguiente, intento reunir el poco coraje que tengo para comenzar a hablar, pero no lo consigo. Paso días pensando en como hacerlo. Mientras poco a poco me siento más culpable por seguir en una relación en la que no me siento como me gustaría. 

-Dai, -le llamo desde el sofá- quiero que hablemos de algo.

Ya no hay vuelta atrás. Él me mira confuso, deja de lavar los platos y camina hasta el sofá mientras se seca las manos con un trapo.

-¿Estas embarazado? -pregunta, obviamente de broma, ignoro su comentario.

-Llevo ya un tiempo pensando en esto, pero no encontraba ni como decírtelo ni cuando. 

-Aja- dice animándome a seguir. 

-Creo que no deberíamos seguir siendo pareja.

Daisuke me mira confuso y por unos minutos nos quedamos callados.

-Esta bien, - dice, hace una corta parada- ¿es por Clay o he hecho algo o...?

-No, no, simplemente no me siento que como antes- le corto.

-Vale- mira al suelo y piensa unos segundos.

-Lo siento mucho...- susurro, pasa su mano por su pelo. 

-Bueno, sinceramente era algo que ya sabía que podía pasar. No te culpo, entiendo que también es difícil para ti- nos quedamos en silencio-. Además, ya te dije que iba a respetar todas tus decisiones, aunque no me gusten. 

-Voy a hacer mi maleta entonces- digo levantándome-. Gracias por entenderlo. 

Camino al que era nuestro cuarto, saco la maleta de debajo de la cama y comienzo a llenarla de ropa, seguido saco mis objetos y los guardo en cajas de cartón, tengo menos cosas que la ultima vez, porque me deshice de muchas cosas que no necesitaba. 

-¿A donde vas a ir? - oigo que pregunta desde la puerta. 

-La casera de mi primer piso me ha dicho que esta bien que vuelva- suspiro.

-¿Sabes que no hace falta que te vayas hoy mismo?- oigo tristeza en su voz. 

-No quiero hacerte más daño... 

Nuestra conversación termina ahí, por el resto de rato que estoy en su casa, esperando a mi Uber, él me mira con metros de distancia entre nosotros. Ya en el coche, le miro por ultima vez, sus ojos están llenos de lágrimas, retengo mis ganas de salir del coche y decirle que me quedaré con él si no llora, pero tarde o temprano esto iba a pasar, así que es mejor que no perdamos el tiempo. Me despido silenciosamente de él, y en cuanto el conductor arranca, Daisuke empieza a llorar, y yo también. 

En el coche nadie dice nada, el conductor se limita a conducir y yo lloro en silencio en la parte de atrás del coche, apoyado contra la puerta. En cuanto llego al edificio, muevo todas las cajas hasta el ascensor y subo hasta el piso de mi departamento. Observo ambas puertas, la mía y la de Clay, me planteo llamar, pero es muy tarde para eso, y tener ganas de abrazarle y de que me consuele no es excusa para hacerlo. 

Me resigno a entrar a mi departamento, tantos recuerdos... Todo sigue como estaba, mismos muebles, misma posición... incluso me atrevería ha decir que nadie ha vivido aquí desde que yo me mude con Clay. 

De repente me doy cuenta de algo.

He vuelto al principio...

Amig@sss, ya he vuelto, acabo de terminar todos mis exámenes, así que voy a tener mucho más tiempo para escribir y actualizar 🥰🥰