5. Cita desastrosa y visita al hospital.

363 45 12
                                    

Pasamos unas horas hablando sobre cosas diversas, luego nos vamos cada uno a su cuarto, coloco la ropa que no me han robado en el armario. Me quedo dormido en cuanto me tiro en la cama, sin taparme ni ponerme pijama.

-George, deberías prepararte para tu cita, ya es tarde- noto una mano tocando mi cabeza y revolviendo mi pelo.

---------------------------------------------------------

-Mhm...- me quejo y me muevo en la cama.

-Venga, que tienes tu cita- abro los ojos y miro a Clay, ya esta vestido con ropa de calle y con una taza de café en su mano izquierda.

-¿Que hora es?

- Las diez y media de la mañana.

-Mierda, mierda...- ruedo en la cama hasta el borde, me caigo y me levanto como puedo- Voy a llegar muy tarde.

Corro por el pasillo hasta el baño para alistarme, me doy una ducha.

-George, ¿te dejo algo de mi ropa?

-Sí, ¿puedes prepararme algo de ropa para mi cita? Lo que tu quieras.

-Vale- escucho como se aleja mientras retiro el champo con agua caliente.

Salgo de la ducha y voy a mi cuarto en toalla y con el pelo mojado.

-Ahí te dejo la ropa- dice Clay saliendo de mi cuarto.

-Gracias- le sonrió, me pongo la camiseta de manga corta blanca en la que pone "Shut the f**k up" en letras negras, unos pantalones grises vaqueros, una chaqueta de tela vaquera de azul claro de Clay, un cinturón negro y unas deportivas Vans blancas y negras.

Termino de secar mi pelo a las once menos diez, me despido de Clay y corro hasta la puerta de la cafetería.

-¿Eres George?- me pregunta un chico alto de pelo castaño y ojos negros.

-Sí, tu debes de ser Thomas- le sonrío. Entramos al Starbucks, pido un café bombón y el pide un café Capuccino. Nos sentamos en una de las mesas del fondo, hablamos tranquilamente hasta que Brooke nos trae los cafés.

-Muchas gracias- le digo a mi jefa. Ella me sonríe y se va, Thomas la sigue con la mirada.

-¿Esa es tu jefa, no?

-Sí, pero es como una madre - me rio.

-No tiene porqué, eres mayorcito como para necesitar que actúe como tu madre-dice serio.

-Bueno, me tiene mucho cariño- comento un poco cortado.

-Oye, ¿estas viviendo solo?

-Sí, desde hace unos cuantos años. ¿Y tu?

-Vivo en la antigua casa de mi abuela, con una amiga.

-Que bien, ¿de que la conoces?

-Tubimos una relación y tal.

-Ah- antes de continuar mi frase, su móvil suena, se levanta y va a hablar por teléfono. Espero hasta que vuelva, pero comienza a hablar de su familia por dos horas, le mando un mensaje a Clay sin que Thomas lo note.

Mi móvil suena y acepto la llamada, me levanto y voy a una esquina a hablar.

-Hey, estoy jodido- dice nada colocar mi móvil al lado de mi oreja. - Y no voy en broma.

-Espérate, ¿lo dices en serio? - pregunto realmente preocupado.

-Sí, me acabo de hacer un corte en el dedo-dice con gravedad en su voz.

-Voy a casa- digo antes de cortar, corro a la mesa. - Thomas, lo siento, pero mi amigo me necesita, no se que le ha pasado pero creo que tengo que acompañarle al hospital.

Corro hasta la entrada sin esperar su respuesta. Subo corriendo las escaleras y nada más abrir la puerta veo a Clay con un paño de cocina en la mano izquierda, con la camiseta y el paño manchado de sangre.

-¿Que ha pasado? - pregunto nervioso acercándome.

-No sé, estaba cortando pan y se me ha ido la mano.

-Vamos al hospital-digo agarrando su mano, caminamos hasta la calle, paro el primer taxi que veo, porque no puedo conducir. Vamos al hospital y en menos de diez minutos ya le están curando la herida.

-Bueno, ¿Qué tal tu cita?- pregunta cuando la enfermera va a por unas vendas.

-Con tal de decirte que te mandé un mensaje para que me secases de allí- comento riéndome un poco.

-¿Por que?

-Se ha tirado horas hablando de su familia.

-¿Otra vez?

-Sí, además vive con su ex novia, tampoco me importa mucho, pero se me hace raro- me encojo de hombros.

-Pues que buena cita- se ríe. - Hasta yo podría preparar una mejor cita y eso que nunca he tenido una.

La enfermera vuelve y le venda la herida, él hace una pequeña mueca de color. Volvemos a casa, no sin antes comprar unas latas de refresco.

-¿Crees que vuelva a llamarte?-pregunta en el taxi.

-Espero que no, al final no es mi tipo.

No hablamos más, reviso las noticias en mi móvil, una me llama la atención, es una foto de dos chicos caminando hacia un coche marca Jaguar XJ en gris. En el titulo de la noticia pone "El famoso actor Clay Wagner acompañado en plató por un amigo o algo más que eso", en esta enseñan un video de Clay caminando conmigo hacia su coche, supongo que cuando íbamos a volver a casa. No comento nada pero me guardo la pagina web para leerla con más detenimiento en un rato.

-¿Mañana vas a volver a trabajar?

-Sí, voy un día sí y otro no, ¿quieres venir?

-No sé, luego lo hablamos- digo al notar como el taxista mira por el retrovisor hacia nosotros.- ¿Qué tal tu mano?

-Duele un poco.

-¿No te van a decir nada por hacerte un corte? Digo en el trabajo.

-No creo, en las siguientes escenas no se me ven mucho las manos.

Llegamos a casa, comienzo a limpiar toda su sangre de la cocina.

-¿Por que has dicho antes "luego hablamos"?- pregunta mientras abre el frigorífico.

-El taxista nos estaba mirando raro- me río.- Por cierto, hay unos paparazis que nos sacaron una foto y están diciendo que si soy tu novio y bla, bla, bla...- comento un poco nervioso.

-Bueno, en poco se les olvidará- se ríe. - Entonces, ¿vienes conmigo?

-Si me apetece, sí.

-Genial- termino de limpiar y me siento en el sofá, él me sienta a mi lado. -¿Enserio hay una noticia de que eres mi novio?-agarra el mando y enciende la televisión, esta en el canal de noticias para adolescentes.- Oh...- dice al darse cuenta de que lo que están hablando en el programa es sobre si Clay tiene novio.


Our little trip.Where stories live. Discover now