Capitulo 37 "La calma después de la tormenta"

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Aquellos días donde la felicidad reinaba, habían terminado y ahora una tristeza profunda golpeo a cada uno de los habitantes del reino. Las banderas hasta media asta, los guardias reales, la policía todos vestían de ropajes negros. Ese día por suerte no llovía, pero el cielo no habia mostrado ningún indicio de regresar a su característico color azul. Dos días habían pasado, días en los cuales por donde caminaras podías apreciar a personas llorando o con semblantes triste, flores fueron colocadas en la entrada del palacio, demostrando el amor y cariño que tenían a su primer ministro.

En esos dos días, no se sabía nada de la familia real, pues solamente la reina dio aviso de la muerte del ministro, pero de ahí no se volvió a mostrar. Hoy era el día donde se despedirían para siempre de Markus, su funeral fue sencillo y aun que muchos deseaban ver a la reina para darle unas palabras de aliento, pero ella no fue.

En los largos pasillos del palacio, frente a la puerta del dormitorio de la reina, se encontraban Yuzu, Ibuki, Mei, Matsuri y Mitsuko, los cuales planeaban como sacar a su madre de su encierro, desde que habían regresado, su madre se encerró de su habitación y no se habia dejado ver. Aquellos que le llevaban comida entraban en la habitación y solo se encontraban a la monarca acotada en su cama.

Ibuki: - Hay que sacarla. – Dijo el joven mientras caminaba para ir abrir la puerta, pero fue detenido por ambas guardias.

Yuzu: - Es mejor que dejemos que tenga su tiempo... Hemos vivido muchas cosas en estos últimos meses. Es normal que este así, descubrir que el hombre con el que te casaste y tuviste hijos fue asesinado y que al hombre que habías abierto tu corazón fuese asesinado frente a tus ojos... es algo de lo que no te recuperara tan rápido. – Dijo mientras tomaba discretamente la mano de la pelinegra que estaba a su lado.

Ibuki: - Lo sé, pero me preocupa... no ha estado comiendo, y no sabemos que es lo que hace en la habitación... ¿y si se está planeando suicidarse?

Matsuri: - Estas hablando de tu madre, ella es de las mujeres más fuertes que conozco, así que eso es imposible.

Ibuki: - Pero...

Yuzu: - Estamos aquí por que tu pediste que viniéramos, tenemos que ir a vestirnos para dar la última despedida... nosotros tomaremos el lugar de nuestra madre.

Ibuki: - Si, pero eso rompe varios protocolos.

Mitsuko: - En este momento los protocolos no cuentan, la seguridad e integridad de su majestad es más importante.

Ibuki: - Bien... si el parlamento nos regaña las culpare a ustedes.

Yuzu: - Eres un llorón, tú no tienes que estar con ellos varias veces al día hablando de cómo administrar y bla bla bla. – Dijo de forma graciosa lo que hizo que todos los presentes se rieran.

Debido a que tenían que cumplir con su papel de príncipes, tuvieron que irse. Tuvieron que separarse para que cada uno pueda preparase.

Mei: - ¿Estas bien con todo esto? – Pregunto la morena mientras entraban a la habitación de la princesa.

Yuzu: - Lo estaré... - Se sentó en la cama, extendió sus brazos incitando a la pelinegra a que la abrazara, pero esta no cedió. - ¿Todo bien?

Mei: - Yuzu... sé que has pasado por mucho, no quiero que te cierres a mí, si necesitas hablar con alguien estoy aquí.

Yuzu: - De todos los que conozco tu eres a la única persona que no me cerraría... siempre te contare todo. – Se levanto de la cama, camino a donde estaba la pelinegra, entrelazo su mano con la de la morena. – Pase lo que pase no me iré de tu lado... realmente no estoy bien lo he de admitir, pero sé que poco a poco me recuperare, estuve a punto de morir por tercera vez en mi vida... pero estoy aquí y no hay nada que temer.

Secretos (Citrus)Where stories live. Discover now