Cap 17.

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Había parte de mi, que me decía que era mejor ser consciente la realidad antes de terminar de nuevo perdido en el dolor. Era fácil de decidir para mí donde quería estar justo en ese momento y no era en la sala de juntas frente a una computadora, analizando estadísticas complicadas.

Detrás de aquel teatro estaba esa persona que gustaba de pasar tiempo de calidad con su hijo y su ex-esposo. Un mes había pasado donde la rutina de llevar a Hayden a ver a su padre al hospital había bastado para que yo creará un estúpido hábito insano.

Sonreir sinceramente al verlo jugar con Hayden se había vuelto adictivo. Después estaban sus quejas que se había quedado desempleado con la contratación del guardaespaldas. En mi mente se repetía cada plática.

—Hijo, te pregunté si no tienes más dudas.

Cerré mi portátil en el instante asustado de la voz dura de mi padre.

—No ninguna.

La mirada desaprobatoria de mi padre poco me importo, me recline hacia atrás esperando el momento de poder irme.

—Necesito hablar contigo, por favor ven a mi despacho al terminar.

Mi padre había dicho esto desde el otro lado de la sala haciendo que todos supieran su molestia.

Yo hice una reverencia y salí detrás de él.

Revise la hora en mi reloj de muñeca y después metí las manos en mi bolsillo.

—¿Qué demonios pasa contigo?

Alce una ceja.

Había monitoreado los balances de la empresa con anterioridad como para darme cuenta que no era precisamente eso lo que lo tenía con pendiente.

—No entiendo de que me habla.

—Esa actitud tuya, acaso no te importa la empresa.

Me reí levemente pero luego voltee hacia un lado.

—Deberias estar al tanto de lo que sucede dentro de tu negocio.

Respiré de manera pesada.

—¿En serio esa impresión tiene?

Mi padre había guardado silencio y luego me había dado la espalda.

—No eso, pensé que la salida de tu hermano, volveria a traerte de vuelta pero veo que no es así.

Dejé mi brazos caer de forma dramática y me senté en una de las sillas. No era la primera vez que teníamos esa conversación. En las últimas cenas de los domingos mis padres siempre sacaban a colasion que yo había perdido la "chispa". Y allí venía esa plática una vez más.

—No se si piensas regresar con el muerto de hambre ese, si es así, sera mejor que me lo digas desde ahora.

—Vaya eso sí es nuevo —Dije sorprendido. Nisiquiera sabía que tenía ese poder de decidir sin que antes el diera su aprobación.

—¿Es así? ¿volverás con ese?

Tallé mis rostro con mi manos y luego revisé mi reloj de nuevo.

—Padre...

—Quiero que contestes lo que te pregunté.

Lo miré fijamente y después negué.

El en realidad no quería saber de mis sentimientos.

—No, no regresaré con él—Me levanté —¿Eso es todo?

—Espera

—¿Si?

—¿ya no lo amas?

—No entiendo por qué la duda...

—Quiero saberlo ¿aún lo amas?

Le di la espalda y luego con valentía lo enfrente.

—¿En verdad está interesado en mis sentimientos? Lo que importa es el bien de la empresa ¿No es así?

—Tengo una reunión mañana, necesitamos hacer ciertas alianzas .

Eso me dejó helado.

—¿Cómo dice?

—Lo que más me temía está apunto de pasar, Jimin, con el mercado en crisis es posible que no soportemos el déficit. Los número van bien pero no hay un aumento y eso me preocupa. Jamás creí que vivir para ver a mi empresa en declive por eso creo lanzar nuevos diseños de carros es algo muy arriesgado. Lo que necesitamos es seguridad económica, mejorar procesos y tal vez el próximo año podamos dar al mercado algo inovador que impacte —hizo una pausa— un buen inversor eso nos hace falta. 

Él me miró con duda.

—Por eso quiero saber si estás aún comprometido con la empresa.

Apenas iba a decir algo pero luego me detuve.
  
—Pero si te obligó, lo más seguro es que te perdere de nuevo, quiero que seas consciente que esto solo sería un negocio. El empresario de llama Kim Taehyung y si aceptas el está dispuesto a poner capital suficiente para solventar al menos 5 años.

—Pero...

—Es imposible que él no sepa lo que se dijo en las noticias de ti, así que asumiremos que eso no le importa. Él lo que busca es invertir su dinero en un buen negocio.

— A cambio de que.

La respuesta me atemorizaba.

—Un arreglo en prenupcial no hará tanto ruido como una dotación de capital de un extraño, nuestra posición en la bolsa no se vería afectada.

Un negocio, solo era eso.

—Quiero saber si estás dispuesto ha sacrificar 5 años de tu vida para salvar la empresa, si no, entonces tendría que hablar con tu hermano para llegar a un acuerdo.

Entonces no había opción.

Troné los dedos de mis manos y luego caminé lentamente. Me sentías asfixiado en ese lugar, comenzé a desamarrar mi corbata.

—Necesito pensarlo padre.

Mi reloj marcaba la hora exacta en la que yo llevaría a Jungkook a su casa, pues ese día por fin saldría del hospital.

—No es tan fácil como usted cree.

—Será un negocio, solo eso, tu sabes de esto, naciste para ser empresario, hay que ver por el bien de la empresa.

Lo entendía perfectamente.

—Kim Taehyung vendrá este domingo a comer a la casa.

—Entonces tengo hasta el domingo para decirle mi decisión.

—Me gusta saber que has entendido todo, hijo.

—Lo entiendo padre.

Pero cuándo llegué al hospital no sentía la misma sensación cálida de antes.








Una vez más.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora