Mi Boxeador

Capitulo 28: Paris?

Narra Mad.

Me despierto en una cama de matrimonio bastante cómoda. Ya no estoy en ese avión. Donde estoy? Me levanto de la cama y me restriego los ojos, miro a mi alrededor. La habitación era bastante bonita. Las revistas, están en francés? Por que están en francés? Me levanto ya un poco mas asustada y me dirijo a la ventana, abro las cortinas y el sol me ciega un poco. Una vez acostumbrada veo edificios. Donde estoy? Me dirijo a la puerta y pongo la oreja en esta, para escuchar si hay alguien. No se escucha nada. Poco a poca lo abro y miro. Era un piso bastante bonito, ando con cuidado hasta llegar a la puerta. Subo arriba ya que era un ático y solo quedaba una planta. Subo y una vez en la terraza me quedo estupefacta. No lo podía creer.
Des de aquí se podía ver la Torre Eiffel. Lo que significa que... Estoy en París! Francia! Dios, Jason me ha traído hasta aquí? Porque?

"Tal vez para que sea mas dificil para Jacob encontrarte? "

Me pregunta mi subconciente con tono irónico, diciendo algo lógico.

Siento unas manos en mi cintura y doy un salto.

- Ahh! - grito y siento su risa. La risa de Jason. La conocía tan bien.

- Tranquila, soy yo.- dijo en un intento de tranquilizarme cosa que era todo lo contrario.

- Ahh! - vuelvo a gritar.

- No te voy a hacer nada, mi amor.- dice en mi oído.

- No me llames así- digo tensandome.

- Prefieres mi vida? - pregunta.

- Prefiero que no me hables.

- Eso no va a ser posible, mi vida. - le empujo con mi espalda y me giro.

- Por que narices estamos en París? - pregunto con los brazos cruzados.

- No querías antes venir a París? - pregunta. Odio cuando me conoce.

- Si, pero no contigo.

- Antes no decias eso. - dice con una ceja levantada.

- Antes no sabia que estabas loco. - la dulzura de sus ojos cambia a locura. Me coge del cuello y me apreta contra la puerta.

- No estoy loco, mi vida. Bueno, estoy loco por ti. - dice apretandome mas

- No estas loco por mi, estas loco!- abre la palma de la mano y cuando la veo en el aire, cierro los ojos. El impacto me hace gritar y girar la cara. Escuece. Me saltan las lágrimas.

- Tienes que aprender a callarte, cielo. - su tono de voz me provoco un escalofrío. Le empujo y bajo corriendo. No llego a mas que a la planta del piso donde desperté. Me coge del brazo.

- Ten cuidado, todo se puede complicar. - su mirada, la mirada de loco. La mirada que me avisa que todo irá de mal en peor.
Asiento como puedo. Me empuja dentro de casa y voy corriendo a la habitación. Cierro la puerta y pongo el cerrojo. Además de atrancar la puerta con un sillón que había allí, aunque me costó lo conseguí. Me siento en el sillón con almohadas y mantas. Oia sus gritos y sentía el sillón vibrar levemente por sus golpes. Cierro los ojos fuerte intentando retener las lágrimas. Estas salen sin mi permiso. Lloro. Aunque odie esto y quiera volver con Jacob y Sky. No puedo, prefiero su seguridad a la mia.

Los echo tanto a faltar...

Narra Jacob

No podía con todo esto, había pasado un día y para mi era como tres meses. No comia nada, no tengo hambre. No he podido dormir y todavía no se lo he dicho a Sky. Me tengo que inventar una gran excusa, no le diré la verdad. 

Entro a su habitación de hospital y le sonrio como puedo. Ella me mira con preocupación y mira detrás mío esperando a alguien. Suspiro.

- Hola enana, como estas? - le pregunto.
Me mira y asiente. Veo preocupación en sus ojos. Escribe algo y me lo enseña. Veo su letra estartalada y sus faltas de ortografía sonrio.

I MAD? TE AS PELADO CON ELLA?

- No ha podido venir, se ha ido de viaje durante un tiempo. - me aguanto las lágrimas, suspiro. Nunca pensé que me sentiria asi. - Volverá pronto. No se ha podido despedir. Me ha dicho que te diga que te ama y que te tendrá en el corazón este tiempo. - veo como el pequeño y fino labio de Sky empieza a temblar, sus ojos empiezan a aguarse y siento el ruido de mi corazón romperse en pedazitos mas pequeños. Veo la primera lagrima de Sky bajar, la abrazo. Llora en mi pecho.

- Volverá, tranquila. - digo abrazandola, mientras la mecia. Yo mismo la iba a traer. Asiente. Escribe algo.

ME LO PROMETES?

- Te lo prometo pequeña. - iba a cumplir esa promesa. De eso estoy seguro.

Se duerme en mis brazos, la miro mientras duerme. Tenia la nariz roja del llanto pero igual se veía monisima. Iba a ser muy guapa y tenia que ir mentalizandome de protegerla. Aunque ya lo hago. Me doy cuenta que yo hubiese hecho lo mismo que Mad, y también me doy cuenta que Mad hubiese intentado buscarme sea como Sra aunque yo le dijese que no.

Estoy seguro que estoy locamente enamorado de Mad. Y, sé que volverá a estar conmigo. Volverá a estar en mis brazos por mucho que me cueste. Volverá a estar a mi lado y la veré dormir abrazada a mi. Todo volverá a como era hace poco y mataré a esos dos.

Narrador Omnisciente.

Los dos se amaban y todos lo sabían. Odiaban estar separados y mas notorio no podía ser. Cada uno en diferente parte del mundo y con la mente en el otro.
Los finales felices no siempre existen, pero porque no darselo a esta pareja? Por que no ser la excepción? Eso, eso se verá mas adelante.
Tal vez, nunca puedan estar juntos.
Tal vez, su deber es estar juntos.

Gracias por leer♥

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