Corazón de Piedra

Capítulo 12

DISCLAIMER: Los personajes no me pertenecen pero la historia sí, por lo que NO AUTORIZO para que esta se modifique o publique en otro lugar. Sólo publico en Fanfiction y Wattpad, si encuentran mis historias en otros lugares y con otros personajes que no sean de Inuyasha entonces es PLAGIO.

Capítulo 12:

- Qué... qué significa esto... - Se dijo consternada, mientras un doloroso nudo se formaba en su garganta. La inconfundible imagen de una mujer de largos cabellos negros y rostro muy pálido parecía mirarla muy fijamente.-... es... ¿Kikyo??

Sus temblorosas manos apenas sostenían el pedazo de cartulina, al final esta resbaló por sus dedos cayendo entre las sábanas.

- Que es esto... que es esto... que es esto... - Repitió nerviosamente una y otra vez sin poder poner en claro sus ideas. Sus ojos trataron nuevamente de ser enfocados en la pequeña fotografía que yacía entre las sábanas.- ¿por qué?... ¿por qué tiene una fotografía de... Kikyo?... ¿qué significa esto?... ¿qué significa esto?? Dios... qué significa esto... que esta pasando...

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Cuando entró al aula las clases ya habían comenzado. Todos voltearon a mirarla, incluso Inuyasha que la miró con una sonrisa, sentado al lado de Tsubaki... esa chica que la miraba con una semi sonrisa de lo más cínica. Los miró a todos rápidamente sin expresión y en silencio se quedó sentada en el último puesto, junto a la puerta. Llevaba en su mochila el cuaderno del chico pero por alguna extraña e incomprensible razón guardó la fotografía para sí. Las oscuras ojeras bajo su pálido rostro debelaba que no había dormido absolutamente nada. El rostro serio y sus castaños ojos estaban sin expresión. Todo en ella había cambiado nuevamente. Tanto dolor, tanta desconfianza, tanta burla sufrida el año anterior todo se había vuelto a desatar en su lastimado corazón. Se recostó pesadamente en la dura y fría silla mientras intentaba enfocar sus rojizos ojos de tanto llanto en el pizarrón, ni siquiera podía tomar notas con la mano lastimada, así que sólo por ahora debía memorizar la materia. Luego sus ojos poco a poco se dirigieron hasta Inuyasha, sentado en la segunda fila, escribiendo de vez en cuando mientras Tsubaki se inclinaba a ratos para hablarle. Apretó el puño de su mano sana tan fuertemente como si quisiera romperlo, pero no podía... no podía entender... ¿qué tenía que ver Inuyasha con Kikyo??? ¿Acaso conocía a su hermana? Si tenía su fotografía era obvio que si la conocía... ¿habían tenido algo? O tal vez... tenían algo, considerando a lo que se dedicaba su hermana... Kouga... había peleado con Kouga... ahora él no estaba en clases... otra vez estaba sola... como siempre.

Las tediosas horas al fin dieron paso a un descanso de algunos minutos. La mañana era en extremo fría y gris y debelaba que el invierno se acercaba sin piedad sobre el país. Tomó sus cosas lentamente y salió fuera del aula.

- Me alegra verte.- La inconfundible voz ronca se escuchó a sus espaldas. Ella se detuvo en seco sintiendo que su corazón iba a explotar.

- Hola- Dijo apenas dándose la vuelta y fingiendo una pequeña sonrisa al mirarlo. Luego volteó nuevamente y se alejó de él, dejando al chico un poco confundido. Luego de unos segundos la siguió.

- ¿Adónde vas?

- A la cafetería

Caminaron en silencio uno al lado del otro cruzando el pequeño prado para llegar a la cafetería de la Universidad. El chico la miró tratando de imaginar que era lo que estaba pasando... parecía que algo... no andaba bien... Al llegar, el calor del lugar se sintió en sus rostros, Kagome se sentó en el mismo sitio en que solía hacerlo, cerca de la ventana e Inuyasha se quedó de pie frente a ella, mientras la veía abrir la mochila y sacar un cuaderno que le era de su pertenencia.