Divina Obsesión (+18) Completa

Capitulo 1 (1E)

Corro con tanta fuerza que mi respiración comienza a fallar por el esfuerzo que tengo que ejercer para no caer sobre la tierra oscura y llena de piedras que me maltratan los pies cada que avanzó. La noche cubre todo el lugar y las nubes esconden la Luz de la luna, dificultando mi sentido de la orientación.

Necesito... Necesito salir de aquí. A lo lejos escucho perros enojados ladrando y las ganas de esconderme y llorar me quieren controlar, pero soy mejor que eso, así que en el momento que caigo y ruedo varios metros por una pendiente, no me quedo ahí lamentando mis heridas abiertas, en cambio me levanto, respiro profundo y oculto mi miedo en el fondo de mi mente antes de empezar a correr de nuevo, viendo hacia atrás repetidas veces para confirmar que todavía este a salvo.

En mi huida logro escuchar el sonido de ruedas deslizándose por el pavimento, más no corro en esa dirección, solo me quedo escuchando en que sentido van. En el preciso instante dónde logro captar lo que necesito, corro al lado de la carretera, orando para que aquel auto que acaba de pasar no haya notado que hay una chica llena de sangre correriendo por su vida.

Cuando ya veo las luces de la cuidad casi lloro de felicidad, pero antes de lograr llegar una mano rodea mi cuello y me lanza hacia atrás con tanta fuerza que choco contra un árbol. El grito que me llena hace reír a mi atacante, que camina hacia mí y me toma por las hebras de cabello antes de alzarme y tomarme por el cuello con fuerza, arrebatándome la respiración que busco con desesperación. Mis pies se mueven buscando alguna clase de apoyo, pero no logro encontrar nada y tampoco tengo la fuerza para luchar.

El miedo se vuelve llanto y quiero pedir clemencia, pero ya estoy cansada de exigir piedad. Mi atacante me mira con sus ojos cafés y yo lloro para mis adentros ¿Por qué? No sé que fue lo que hice en mis vidas pasadas para merecer esto, pero realmente pido perdón por ello.

El hombre me suelta y jadeo buscando aire, tratando de tocar alguna piedra grande cuando mis manos se encuentran con la tierra. Mi vista falla un segundo, pero logro encontrar un palo largo y grueso que puedo usar. No voy a rendirme. No ahora. No ante el.

Alzó el palo con fuerza, tratando de hacerle el suficiente daño para que pueda correr hacia la ciudad. Sin embargo, antes de poder hacerlo, un sonido de arma siendo ejecutada hace eco en el solitario y oscuro bosque. Mi grito de miedo y dolor le hace competencia antes de que suelte mi propia defensa.

- ¿Por qué? - lloro la pregunta y caigo de rodilla, viendo cómo mi atacante se acerca a mí.

- Porque necesito que vuelvas a mi.- otro disparo suena, más fuerte, más terrorífico, bailando al compás de su risa macabra.

*****

Me despierto jadeando y buscando el aire que necesitan mis pulmones. Me siento en la cama y respiro profundo. Me cubro el rostro con las mano y sonrio sobre ellas, sintiéndome estúpida por el sueño que acababa de tener, el intento de pesadilla que hace dos años no tenía.

Niego con la cabeza, alejando cualquier rastro de estupidez. Tal vez todo fue obra del alcohol que consumí ayer, y si a eso le sumamos que mañana me voy a ir a la universidad, lejos de mi casa, lejos de mis padres, existe la posibilidad que mi cerebro haya creado ese pánico porque voy a dejar el lugar seguro que me ha resguardado desde que logré salir de ese lugar.

He Sido voluntaria en centros psicológicos bastante veces para saber a lo que me enfrento.

Solo es mi cerebro jugando una mala pasada. No es nada del otro mundo. Esa pesadilla no me provoca nada, porque todo lo que me hacía daño ya no está cerca de mí y nunca les voy a dar el poder de hacerme temblar de miedo, no de nuevo.

Me levanto y camino hacia el baño, dónde me cepillo los dientes, me doy un baño largo y relajante antes de salir, vestirme con un vestido azul hasta las rodillas bastante suelto, pero muy cómodo para empezar el día como un rayo de luz. Cuando me siento lista bajo hacia el comedor, sintiéndome completamente feliz cuando me encuentro a toda mi familia ya sentada a su alrededor.