Iᑕᗴ ᴄsᴘɪᴛᴜʟᴏ 33

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El brazo de Yoongi se levantó como reflejo para esquivar el golpe
de Jungkook, quien se balanceó hacia él cuando Yoon se empujó a través de la puerta. Aun así, el impacto provocó que Yoongi se tambaleara hacia
atrás, cerca de perder el equilibrio. Jungkook no esperó a que lo encontrara; se abalanzó sobre Yoongi con los puños apretados con tanta fuerza que pude ver las venas en su cuello tensarse contra su piel. Pero Yoongi había sacado su arma antes de arrojar la puerta hacia adentro, y estaba listo y con un objetivo cuando disparó a Jungkook, la bala atravesó el hombro de Jungkook.

Milagrosamente, después de
una sacudida convulsiva, él continuó impulsándose hacia adelante,
avanzando hacia Yoongi con determinación casi sobrehumana.
Tambaleó tres pasos más antes de que Yoongi golpease con el revés del
arma a través del rostro de Jungkook, el golpe lanzándolo violentamente
sobre su espalda.
Jungkook yacía completamente inmóvil, una piscina de líquido
derramándose debajo de su hombro. Estaba tan sorprendida que no
pude encontrar mi voz. Me quede boquiabierta ante el cuerpo sin vida
de Jungkook. Yoongi lo había matado.
Yoongi miró hacia su oponente con una certera y retorcida admiración. Es decir, hasta que el reconocimiento emergió.

-Yoongi: ¿Qué está haciendo él aquí? —Demandó, identificando
claramente a Jungkook como Jeon del 7-Eleven.

-T/N: ¡Lo mataste! —Exclamé sin aliento, con horror.

-Yoongi: No está muerto. —yoongi empujó su pie contra la caja torácica
de Jungkook—. No pretendía matarlo. Y use una bala pequeña para
minimizar el daño. Pero este es el chico de la gasolinera. Tu novio. ¿Qué está haciendo aquí?

-T/N: Le disparaste —tartamudeé, mi mente aún aturdida.—Con el “Él” quieres decir Koo, abreviatura de Jeon, entendido.

-Yoongi: Jeon, el tipo que te secuestró y que ahora tiene mi mapa. ¿Puedo
entenderlo como que en verdad no es tu novio? —Comentó secamente.

-T/N: ¡Si no hacemos nada, se va a desangrar hasta la muerte!

-Yoongi: Silencio, o despertarás a chae —me reprendió Yoongi, caminando en un lento circulo alrededor del cuerpo de Jungkook, manteniendo el arma apuntada hacia él mientras lo hacía—. Está en estado de shock. Ayúdame a atarlo antes de que regrese.

-T/N: ¿Atarlo? ¡Necesita un hospital!

-Yoongi: Debemos mantenerlo detenido hasta que seamos capaces de ponernos en contacto con la policía. Estamos arrestando a un
ciudadano. Una vez que esté atado, trataré su herida. No estés tan
asustada. ¿Qué es lo peor que podría suceder?

-T/N: Podría morir.

-Yoongi: ¿En realidad sería eso tan malo? —Continuó Yoongi, con voz
suave que me parecía demasiado calmada, incluso para él—. Dejó a
Chae en una cabaña para que muriera, y te obligó a que lo guiaras a través de las montañas congeladas. Casi moriste, T/N. Y ahora
tenemos evidencia que prueba que asesinó a una chica el año pasado.
Míralo. No es una víctima; es un asesino. Se abrió paso dentro de la
cabaña esta noche con la intención de asesinarte, y probablemente a mí
y a chae también. Le disparé en defensa propia.

-T/N: ¿Defensa propia? —Repetí, sacudiendo la cabeza en
desconcierto—. No estaba armado. Y no sabemos ciertamente que
estaba tratando de asesinarnos.

Pero Yoongi no estaba escuchando.

-Yoongi: Ve al garaje y tráeme la cuerda. Esta sobre un estante a la
izquierda. Tenemos que inmovilizarlo antes de que recobre la
conciencia.

Vi la lógica en el plan de Yoongi, pero mis pies se quedaron clavados sobre el suelo. No me atrevería a atar a Jungkook, que parecía cerca de la muerte. La sangre se había drenado de su rostro, el cual reflejaba más a un fantasma que a una persona. Si no fuera por sus respiraciones cortas y profundas, habría parecido estar dentro de un ataúd.

~❄︎ ICE ❄︎~ // Imagina Con BTS Where stories live. Discover now