𝕄𝕪 ℕ𝕦𝕞𝕓𝕖𝕣 𝕆𝕟𝕖♡

14

Al día siguiente.

Harry había despertado mucho antes que Draco, tan solo se había dedicado a observar a su omega que dormía sobre su pecho, dando suaves caricias dejó que los recuerdos llenaran sus pensamientos.

La charla que tuvo con Ron se filtró en su mente, ¿aquello podía ser real?

- Llegó...- escuchó el alfa, volvió a posar su mirada en su omega quien ya se encontraba despierto y también lo observaba.

- Buenos días cariño. - susurró el alfa.

- Buen día alfa - respondió el rubio abrazándose más a su pecho.

El timbré sonó y Harry entendió a lo que su omega se refería, se levantó con cuidado de no lastimar a su familia y depositando un suave beso en la frente de su omega se retiró de la habitación.

En el pasillo se encontró con la beta amiga de Draco quien se encontraba saliendo del baño.

- Buen día Pansy.

- Buen día Harry, estaba por ir a abrir la puerta.

- Te lo agradecería, iré a lavarme la cara y bajaré enseguida - la beta asintió y sin decir más fue a abrir la puerta, Harry se dirigió al baño.

Cuando el alfa salió del baño caminó hacia la planta baja, Pansy se encontraba en la cocina mientras que Cho se encontraba en sentada en el sofá con la mirada puesta en Pansy.

- ¿Qué hace ella aquí? - fue lo primero que dijo Cho al ver a Harry.

- ¿Te molesta mi presencia? - preguntó la beta mirándola con una sonrisa divertida, la omega solo asintió. - te tendrás que acostumbrar querida, ya que yo también estaré viviendo en esta casa por unos días.

- No te quiero en mi casa.

- No es tu casa - dijo la beta.

- Harry es mi esposo y como esta casa es de él, por ley es mi casa y será heredada al hijo alfa que le de a Harry.

- ¿Sabes? por esta vez lo dejaremos así, no quiero romper tus ilusiones a estas horas de la mañana - sonrió la beta mirando a Harry.

- Tu habitación será la misma que fue cuando vivías aquí. - habló Harry hacia Cho quien solo asintió no muy contenta.

- Harry, el médico dijo que necesitaré de tu aroma para que mi embarazo sea tranquilo, también necesitaré que duermas conmigo.

- Perdóname pero hasta donde sé, al ser una omega fértil, tu embarazo será tranquilo con solo tener el aroma del padre del o de los cachorros, no hay necesidad de que Harry duerma contigo, quien lo necesita más es Draco - dijo la beta ganándose una mirada de odio por parte de la omega.

- Es mi primer embarazo, necesitaré de mi alfa.

- Es mi alfa, solo mío - irrumpió Draco parándose a un lado de Harry.

Harry colocó su mano en la cintura del omega y lo apegó a su cuerpo para tranquilizarlo.

Cho solo observó molesta al omega que había ingresado en la habitación.

- Cierto, pero se me hizo costumbre llamarlo mi alfa, pero me disculpo, no volveré a decirlo - dijo la omega sorprendiendo a los presentes - trataré de cambiar mi actitud para que podamos llevarnos bien.

Todos se quedaron en un silencio algo incomodo, Draco miró a la omega pelinegra ladeando un poco la cabeza para luego sonreír un poco y asentir, podía intentarlo, miró a su alfa quien aún no sabía que decir ante aquello.