CAPÍTULO OCHO. "Jake es un estupendo manipulador "

Start from the beginning
                                    

Llevaba desde primera hora procurando convencerme de ir a la fiesta de Emma, llevaba seis horas negándome.

Mi amigo acarició mi cabello con su suave mano con delicadeza. Suspiré mientras guardaba un mechón tras mi oreja.

¡No jugaba limpio!

Relamí mis labios balanceándome sobre la suela de mis All Stars.

«Bien jugado Chase, bien jugado. »

—Esta bien... —murmuré en voz queda.

Pude apreciar como iba surgiendo la sonrisa en sus labios, hasta terminar en una resplandeciente mostrándome sus paletos levemente desviados.

Sus brazos quedaron en mi cintura. Chillé mientras me levantaba del suelo en un fuerte abrazo. Comenzó a darme vueltas mientras tatareaba la misma palabra.

—¡Gracias!¡Gracias!

—¡Suéltame! —Reí con fuerza en su oído.

Jake corrió con mi peso cargado sobre su hombro. Con mi vientre fuertemente apretado alcé la vista, mi cabello caía en cascada sobre mis ojos impidiendo una visión clara del pasillo que dejábamos atrás con rapidez. Alargué mis brazos para apoyarme de forma correcta y un poco más segura enrollándolos en su cuerpo. Estaba mareada, cerré los ojos sintiendo la sangre ascender lentamente por mi cuerpo hasta mi cabeza.

Chillé cuando de un brusco movimiento me dejó caer. Jadeé confusa mientras abría los ojos, mi espalda contra el colchón de mi cama. la consusión plasmada en mi rostro cuando Jake abrió mi armario. 

—¡Bien! — Jake sonrió mientras sacaba el teléfono móvil de su bolsillo.

Me incorporé con lentitud, quedando sentada mientras peinaba mi desordenado con los dedos. Jake hablaba animadamente mientras arruga la nariz.

Ladeé la cabeza, ¿qué andaría tramando?

«Tenlo miedo, mejor no revivir el episodio de la nata en frascos ultrasensibles. Jackson parecía un papá Noël muy enfadado. »

Reí ante ese recuerdo.

— Perfecto. —Le miré. — Tenemos coartada, Teddy llamará a tus padres y les convencerá. Al parecer nos quedamos a dormir en su apartamento, ya que necesita ayuda para terminar de colocar los últimos trastos de la mudanza. — Se encogió de hombros con una sonrisa malvada.

Mordí mi labio sin poder apartar mis ojos de él, maravillada.

—¿Cuánto tiempo llevas planeando esto Jake? — Pregunté despacio.

La sonrisa que esbozó no dejó lugar a dudas.

— Desde que nos invitó.

Puse los ojos en blanco y me impulsé fuera de la cama. Mis pies pararon paralelos a los suyos mientras alzaba la cabeza con los labios fruncidos.

—Eres un estupendo manipulador. —Dije admirada. Una chispa de maldad picó en mi pecho. —Tienes buena motivación.

Las mejillas del chico se encendieron con ferocidad. Reí.

— Eres mala.

Me encogí de hombros, ignorando deliberadamente la ventana que se encontraba a mis espaldas. La tentación de mirar era fuerte, pero me hacía sentir estúpida.

Jake chasqueó los dedos ante mis ojos. Parpadeé despertando de mi estado de ensimismamiento.

—¿Preparada para le mejor fiesta del siglo?

Suspiré tirando del borde del dobladillo de mi jersey marrón con los dedos.

—¡Preparada! —Sonreí.

«¿Preparada? Oh esto quiero verlo. »

Reto: ¡Si este capítulo llega a 100 votos publico maratón de 3 capítulos, ni uno no dos, ¡TRES capítulos sobre la fiesta! Si no los iré publicando, no sé cuándo ya que empezó el instituto otra vez. Ya lo habéis leído.

¡100 VOTOS!

No pido tanto, teniendo en cuenta que el anterior cap lo leísteis más de 600 personas, sip, yo os veo.

Esto es un reto tanto para mí, esta historia como para vosotros.

Ya que estoy, ¿qué opináis de Blake? ¿De sus padres? ¿Del conejo? Yo adoro a todos.

El reto empieza en

3…

2…

Y…

¡GO!

Mis dos padres, dos madres y mi estúpido vecino de al lado.#Wattys2015Where stories live. Discover now