42. Suyeon definitivamente no piensa, Suyeon deja de mentir

105 29 0
                                    

18.12.2021

[...]

—¡Bahiyyih!— Suyeon de nuevo llega a la sala preocupada, pillando nuevamente a una Bahiyyih husmeando en las galletas y la leche.

—¿Si?— Respondió despegando el vaso de leche de su boca, dejando una marca de un bigote arriba de sus labios.

—¿Por casualidad sabes dónde está la gallina de tu madre?— Preguntó tratando de regular su respiración.

—¿Su gallina? ¿No es que la iban a devolver?— Bahiyyih respondió ahora dejando el vaso a un lado suyo —No la veo hace días en la casa—.

—Es porque ha estado en nuestra habitación todo el tiempo o en la misma granja, pero ahora desapareció y estoy segura que Yenny no se la llevó, estaba conmigo hace dos segundos atrás, lo juro— Suyeon por un tonto impulso, se tocó los bolsillos traseros y los delanteros de sus pantalones.

—Ah...— En ese momento, Bahiyyih se sintió tonta, ¿Cómo no se había dado cuenta que la gallina estuvo ahí todo el tiempo y ella seguía su vida normal como si no tuviera un animal de granja en la casa?

—Lo último que dejó es esto— mostró un huevo —Tal vez no la tengamos a ella, pero por lo menos tendremos a su hijito o hijita, no sé— elevó este como si fuera hecho por un dios.

—¿Por qué no mejor cocinarlo?— comentó normal.

—Porque es lo único que nos queda de ella— se abrazó al huevo con cuidado como si fuera tan preciado como dijo —Pero... Tenemos que ir a buscarla, no la puedo perder— dijo dejando el huevo en un lugar "seguro" y comenzando a caminar hacia la puerta.

—Bueno... Supongo...— La siguió de cerca.

Bahiyyih no quería irse a lugares muy lejanos, por lo que sólo comenzó a buscar en los alrededores del mismo edificio, subiendo varios pisos más arriba y buscando en esos pasillos.

Suyeon se daba vueltas más largas por el césped, por los árboles y cada rincón revisaba. Como era un poco idiota, se le ocurrió la idea que en vez de llamarla como si fuera un humano, comenzar a llamarla por ruidos típicos de gallina. Recibió una respuesta, y no era lo que esperaba, era un ladrido y sabía reconocer que no era un perro.

—¡Wen Zhe!—

—¿Qué?— respondió parando de hacer los ruidos de un perro, detrás de un arbusto.

—¿Se puede saber qué haces ladrando detrás a escondidas en vez de acercarte a mí directamente?— preguntó cruzada de brazos.

—¿Se puede saber qué haces haciendo ruidos de gallina?— Wen Zhe respondió con otra pregunta.

—Yo pregunté primero—.

—Y también hiciste el ruido primero, ahora responde—.

—Bien...— Dejó los brazos a un lado para contar —No sé dónde está la gallina de Yaning, hace unos segundos estaba conmigo en la habitación y de un momento a otro desapareció por completo—.

—Entiendo...— Pensó un momento, en el que esperaba no arrepentirse, después de todo estaba aburrida y se podría decir que mucho —Yo te ayudaré a buscarla—.

—¿En serio?— Preguntó con evidente
emoción y sus ojos brillaban, demasiado para la actitud de Wen Zhe.

—No— Mintió con burla —Sí, en serio. Ahora nos separamos, yo tengo mis métodos de búsqueda— Dijo yéndose a un lado contrario.

Suyeon continuó con su búsqueda, incluso dando vueltas por lugares ya recorridos, puesto que según ella, ya había estado en cualquier rincón y sin resultados en todos. Cada lugar que recorría se sentía cada vez más repetitivo, sentía que era un Déjà Vu ver a cada rato a Bahiyyih viéndola desde la banca preocupada sin mucho que aportar.

En el tiempo se dio cuenta que incluso se le habían unido Rui Qi y Dayeon, pero esa familia lo hacía a su modo, más jugaban que buscaban, de todas formas estaban presentes que una gallina estaba perdida por ahí.

—Esto... Es imposible— tiró su cuerpo de trasero al pasto cansada, ya comenzando a actuar como una niña pequeña.

—¿Qué te pasa?— Xiaoting hizo una apareción, con su periódico en mano y su teléfono en la otra —Pareces más cansada que en un día de trabajo—.

—Ella...— Dayeon que estaba cerca, le respondió susurrando de cerca, Suyeon solo había ignorado a Xiaoting por estar en sus pensamientos profundos acerca de la gallina —Se le perdió la mejor amiga de su novia, ya sabes... Esa cosa fea que solo hacia ruidos y pone huevos—.

—Ah...— Comprendió y pensó si podía ayudar en algo, si era algo en el que no requería mucho movimiento, mejor, porque no se movería mucho por Suyeon, ni loca —Oye, tú— se acercó a ella y al no tener respuesta, da una leve patada en su pierna.

—¿Cómo fui tan tonta en perderle la gallina?— Ignoró por completo a Xiaoting que la miraba enojada —¿Y así cómo pienso pedirle matrimonio luego de esto?— Partió a llorar de forma definitiva, llevando sus manos a su rostro para ocultarlo entre ellas.

—Espera... ¿Hablas en serio?— Hizo una mueca de sorpresa y a la vez disgusto por ver a Suyeon llorar por eso.

—Sí— Le respondió por primera vez entre sus lágrimas que limpiaba con sus manos a medida que caían por sus mejillas.

—Ay, idiota— Volvió a patearla, nuevamente llamando a su atención y que deje de llorar —Es una simple gallina, ¿Cuánto tiempo llevaba aquí con ustedes?, ¿No más de 2 meses?—

—Pero...—

—Pero nada. No te va a odiar por perder a una cosa tan fea como esa gallina, es imposible. Estoy esperando que se casen hace años y tú piensas tirarte hacia atrás por culpa de una estúpida gallina— Le reprimió, a nada de pegarle otra patada y se la guardó por cómo se veía —Mira, allá viene— señaló a la entrada donde se veía una Yaning entrando muy normal.

Cuando Suyeon volteó, claramente se encontró con Yaning, por un momento pensó que le señalaba a la gallina pérdida. Su impulso la llevó a que cuando esté lo suficientemente cerca, tirarse encima de su pierna, no tenía fuerzas para levantarse lo suficiente, por lo que sólo la tomaría por una pierna y se terminaría por aferrarse pidiendo perdón.

—Susu... ¿Por qué llor...?— fue interrumpida de inmediato por el agarre en su pierna derecha.

—Perdóname , perdóname, perdóname, por favor perdón— Suyeon al aferrarse, repitió esas palabras a gran velocidad y con voz alta.

—¿Qué?, ¿Por qué?—

—¡La tengo!— la voz de Wen Zhe se hizo presente, en sus manos, la gallina tratando de escaparse de ella.

—¿¡Ah!?— Suyeon se despegó de llorar en el pantalón de Yaning y miró hacia Wen Zhe —¡Ahí está!—

—Estaba metida en mi casa, creo que se fue de ventana en ventana— En eso la deja tranquila en sus brazos a la gallina, algo de la cuál Wen Zhe se extraño de poder hacer y a la vez se sintió orgullosa —Ya no tienes de qué preocuparte, Suyeon. Me las pagarás luego, espero que con tu vida de idiota, pero está bien— subió su pulgar hacia la nombrada.

—Claro— Se levantó con algo de dolor por estar sentada en el suelo por un largo rato y después estar colgando una de las piernas de la contraria, llevándose una sonrisa.

—¿Pensaste que te reemplazaría por una gallina?— Yaning de alguna forma comprendió lo que en realidad estaba sucediendo, Suyeon se levantó en frente de ella y solo se limitó a sonreír algo nerviosa. Al darse cuenta de la respuesta, le dio una pequeña palmada amistosa en la cabeza a su novia, esta sólo sonrió más ampliamente que antes —Tonta—.

¡𝐕𝐄𝐂𝐈𝐍𝐀, 𝐒𝐔 𝐇𝐈𝐉𝐀! ' 𝗚𝗣𝟵𝟵𝟵Where stories live. Discover now