𝑬𝒍 𝒑𝒓𝒆𝒄𝒊𝒐 𝒅𝒆𝒍 𝒓𝒆𝒏𝒄𝒐𝒓 (𝑴𝒆𝒍𝒊𝒐𝒅𝒂𝒔𝒙𝑶𝒄)

Capítulo 27

¿Qué tan rápido debo correr para escapar de ti?
¿Tanto te cuesta contestarme?
Luces como la persona que va a destrozarme
Si fuera lo suficientemente inteligente me iría
Pero soy una masoquista empedernida

—Me preocupa Leny capitán—la voz de mi maestra hace que levante mi cabeza—en este momento necesitamos toda la ayuda posible y por lo que le suministraban ella es muy inestable cuando se trata de su poder mágico.

Meliodas me mira con preocupación, la situación no está para que sea una carga.

—¿Puedes hacer algo?—el rubio pregunta seriamente y mi vista viaja a la mujer de orbes ámbar.

—como la situación es desesperada requiere medidas desesperadas—pronuncia y de repente en su mano aparece un tarro con pastillas color rosa.

Mi ceño se frunce y siento como Diana toca mi hombro—¿que es?—la pregunta que hace el robusto caballero al otro lado del muñeco crea un ambiente de suspenso.

—cuando volvimos a encontrarnos me tome la libertad de revisar el estado en el que se encontraba Leny—Merlin explica—hay un desorden en su sistema por algún médicamento suministrado de control, como todo en exceso es malo ella sufrió un daño lo cual impide que pueda manejar sus habilidades.

—¿esa inestabilidad es la que hace que Selene sufra?—hawk me mira con nostalgia

—si—contesta con pesar la mujer—los controladores se convirtieron en un veneno en su cuerpo haciendo que el efecto no sea pacífico.

—y eso que hiciste...—la voz del rubio se escucha—¿hará que ella vuelva a estar bien?

—si—la respuesta afirmativa hace que suelte un suspiro entrecortado, voy a poder ayudar—pero, como el daño es tan severo y necesitamos una solución rápida el médicamento es muy fuerte.

—¿a que te refieres con eso?—el pequeño hombre mira a la mujer de cabellos cortos, aunque me da ansiedad pensar en los efectos secundarios estoy dispuesta a todo.

—su cuerpo sufrirá cambios para volver a su estado inicial, por lo cual los dolores serán insoportables—la mujer me mira con tristeza—por esa razón no quería tratarte así, no soporto el hecho de lastimarte.

—¿hay otra manera Merlin?—la gigante pregunta

—si, pero tomaría meses—contesta—sin contar el tiempo de entremaniento que debe tener para reconocer como debe utilizar su poder nuevamente.

—no—hablo antes de que alguien se atreva a opinar algo sobre lo que acaba de decir Mera—no es momento de consideraciones conmigo.

—pero Nea...—el llamado del hombre de ojos verdes me hace cerrar los ojos con fuerza.

—no Meliodas—lo corto—¿cuánto tiempo tomará esto?—pregunto sin mirar al rubio a pesar de que siento su mirada sobre mi, quemandome.

—tres días—me siento ahogada al pensar en cómo el tiempo se ha reducido de esa manera—pero, serán tres días donde no puedes hacer absolutamente nada, voy a desactivar tu poder para poder trabajar en tu cuerpo, además debes ser muy consciente de que tu cuerpo atravesará dolores fuertes.

Cierro mis ojos, no voy a negar que el dolor que menciona Merlín me asusta un poco, pero hace una semana que los mandamientos despertaron, durante la batalla en camelot me sentí inútil y si quiero hacer algo debo someterme a este tratamiento.

—Lo haré—digo con determinación, mi maestra me regala una mirada de culpa y asiente, mamá dame fuerzas para soportar este nuevo reto.

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Gritos gritos y más gritos
Merlín se encuentra con Nea en su último día de sesión, son las 10 de la noche y recuerdo lo que me mencionó la azabache el primero de los 3 días de esta tortura

“Siento como mis entrañas se rasgan por dentro, siento como todos mis huesos se rompen en pedazos qué son incapaces de ser contados”

—Meliodas no soporto escucharla en ese estado—Hawk me anuncia y no puedo estar más de acuerdo

Por cada grito siento como mi corazón es taladrado, desearía poder hacer algo por ella pero nisiquiera le puedo preparar un plato decente de comida.

De repente la puerta de mi habitación se abre para que el pecado de la gula salga y al fondo diviso a la castaña rendida sobre mi cama.

Me levanto lo más rápido que puedo del suelo donde me encuentro sentado para avanzar al interior del lugar, puedo escuchar los quejidos de la mujer, como le cuesta respirar y cuando estoy tan cerca como para tocarla la veo. Tiene su cabello pegado al rostro por el sudor y cuando sus ojos de manera lenta me miran puedo detallarlos, están inyectados de sangre.

—Hola... —su voz es ronca debido a los gritos.

—¿Como estas nena?—le digo mientras le acaricio el rostro, sus ojos se entre cierran y niega con la cabeza.

La miro con dolor y decido recostarme junto a ella para poder descansar después de este largo día, algo feo se acerca, lo sé pero en este momento decido ignorarlo.

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El ambiente sombrío inunda el lugar, el terror de Britania se encuentra reunido escuchando atentamente al demonio qué posee el cuerpo del caballero sacro Dreyfus.

—Así qué hay una humana con cualidades fantásticas—el chico de cabello negro habla.

—Si señor—confirma—Es fantástica, la idea de tenerla en el equipo era porque sería un elemento útil para la guerra.

—me encantaría conocerla—se cruza de brazos mientras camina al borde del acantilado—y aun más sabiendo que se encuentra con mi hermano.

Hola!
Aun se acuerdan de mi? 🥺
Espero que me perdonen por dejarlos a medias, voy a encargarme de terminar esta historia por el amor que le han dado
Nos leemos pronto 🔜