🔪 ━━━ ❝ ¿Serias de esos amigos que te ayudan a cavar una tumba, o serias de los que llaman a la policía? ❞
🩸 ┃ Donde Joe Goldberg
quiere domar sus demonios internos,
tratando de conquistar a Guinevere
Beck mientras que por un gracioso
e incómod...
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Narra Narradora
El trío de amigas caminaban por las calles de Nueva York, apenas habían llegado y estaban ansiosas. En si por saber la decisión de Sydney al ir o no a la fiesta.
Pero si estaba en la ciudad, era por más un sí, ¿no creen?
—Bien, aquí nos separaremos. —Sydney vio hacia su casa y sonrió. Abrazando a cada una y luego bajar.
Al entrar solo suspiró, ahí estaba todo en orden. Se sentía extraña, apenas hace dos semanas estaba ahí tirada en el suelo llorando por Joe. Y ahora estaba ahí, sin saber qué hacer.
Perdida.
Era obvio que aún quería a Joe, sus sentimientos no se irían así por qué si. Y ahora respecto a Ethan. El Ethan que trabaja en la librería.
Tendría que ir a su fiesta, él la invito por que la quiere y la aprecia. ¿Como podría hacer algo como eso? Apenas faltaban unas horas y sabía que en estos momentos estaban trabajando, así que aprovecho y comenzó arreglarse.
Iría a dar una pequeña visita.
Quería verse sexy, algo que nunca usaría pero que la hiciera sentir cómoda. Sonrió aún más al ver su ropero y ver cómo lograría su objetivo. Quería su atención y lo haría de la mejor manera.
Quería que viera de lo que se perdió, que se sintiera mal por jugar con sus sentimientos.
Ya estaba arreglada, solo debía cambiarse y ponerse labial rojo.
Su auto estaba enfrente, a si que decidió comer algo y verse por última vez al espejo que estaban en la entrada de su casa.
—Te mereces todo lo bueno. ¿Entendiste? Nada que caer en sus encantos y en sus hermosos ojos. —Se dijo así misma, tratando que esas palabras se quedaran marcadas en su mente.
Debía comprar un presente para su hogar; ¿Vino? ¿Algún libro? ¿Una planta?
Tal vez compraría las tres cosas, sabía que Blythe podría ser muy dura. Pero sabía sobrellevarla. Solo era seguirle la corriente y cuando se pasaba, frenarla.
Sabía que tenía carácter fuerte, e incluso han debatido muchas veces por lo mismo. Le gustaba verla molesta, no por que le gustara pelear o algo similar. Le gustaba tener a alguien digno con quien hablar, poder decirse las verdades sin ofenderse. Sin grandeza o mentiras.
A tal punto que Ethan ha tenido que meterse para que no pase a mayores. Pero no era personal, incluso a Blythe le gustaba.
Eran totalmente un reto.
—Muy bien, tú puedes hacerlo.
Se mordió el labio nerviosa, estaba consciente que los vería ahí. A tres personas en particular. No lo quería aceptar, pero se estaría mintiendo así misma al negar de que Karen Minty es otra mujer que se a agregado a la lista de Joe Goldberg, dejando de lado que la numero uno es Guinevere Beck.
